
América del Sur es una de las regiones más ricas del mundo en términos de número de especies vegetales. Sin embargo, la destrucción de la vegetación natural está avanzando a una velocidad alarmante. A medida que las riquezas naturales desaparecen, nuestra generación y las generaciones futuras del mundo están siendo privadas de la oportunidad de retener y ampliar la disponibilidad de alimentos, medicinas y muchos otros productos naturales útiles.
Los jardines botánicos deben jugar un papel muy importante en la conservación de los recursos genéticos vegetales y en el control de la destrucción de la diversidad vegetal. Los jardines botánicos pueden ser muy importantes tanto en conservación ex-situ como in-situ, en programas de educación ambiental, y en entrenamiento a diversos niveles. Afortunadamente, existe en América Latina una conciencia creciente sobre los problemas de conservación de la naturaleza, y se han creado en años recientes muchas entidades privadas interesadas en el medio ambiente en repuesta a estos graves problemas.
La estrategia para los Jardines Botánicos y la Conservación provee las bases teóricas y sugiere las líneas de acción para que los jardines botánicos asuman un papel activo y realicen esfuerzos en conservación de acuerdo con la Estrategia Mundial para la Conservación. La coordinación al nivel nacional y regional es muy necesaria y urgente.
La desaparición de la diversidad biológica
De un total aproximado de 250.000 especies de plantas, cerca de 90.000 crecen en la región neotropical. Brasil tiene una de las floras más ricas del mundo, con 50.000 o 55.000 especies. Colombia, Ecuador y Perú en conjunto tienen entre 45.000 y 60.000 especies. En comparación, la flora del África tropical y subtropical se calcula en 35.000 especies, y la de Asia tropical y subtropical en 50.000 especies.
Sin embargo, si la destrucción de la vegetación natural continúa a la velocidad actual, es posible que en los próximos 30 o 40 años desaparezcan por lo menos 60.000 especies vegetales.
La deforestación, como sabemos, depende de varios factores que tienen como base los problemas sociales y económicos existentes en los países en desarrollo. El crecimiento de la población, la presión sobre los recursos forestales disponibles, la industrialización, la ganadería, el desarrollo industrial, la construcción de carreteras, planeación deficiente, y la falta de estudios de impacto ambiental han contribuido considerablemente a este proceso de destrucción. Políticas gubernamentales contradictorias y falta de comunicación entre el gobierno, la comunidad científica y las organizaciones no gubernamentales han llevado al manejo inadecuado de los recursos y a la toma de decisiones conservacionistas mal fundamentadas.
Muchos productos útiles tales como alimentos, insecticidas, pesticidas, aceites esenciales, condimentos, gomas, etc., son derivados de las plantas., Más del 50% de las medicinas modernas vienen de la naturaleza. Muchas plantas están siendo sometidas a análisis en la búsqueda de compuestos anti-cancerosos o contra el AIDS.
Aunque las plantas tienen muchos usos, menos del 1% de las especies han sido estudiadas en relación con sus propiedades potencialmente útiles. En la actualidad la humanidad depende de unas 20 especies para obtener más del 35% de sus alimentos. A medida que la vegetación natural desaparece, las plantas sufren una disminución en su diversidad genética y en consecuencia nuestra generación y las generaciones futuras pierden oportunidades de mantener y ampliar la disponibilidad de cultivos, medicinas y muchos otros productos útiles.
BuenosAires.-Jardin Botanico Carlos Thay
Los jardines botánicos de América Latina
Los jardines botánicos de América Latina pueden llegar a ser muy importantes en las labores que adelantan organizaciones tales como la Asociación Internacional de Jardines Botánicos y el Secretariado de los Jardines Botánicos para la Conservación.
Como se verá más adelante, los jardines botánicos en Latinoamérica difieren considerablemente unos de otros. El jardín botánico de Rio de Janeiro y el jardín botánico de Ciudad de México, por ejemplo, tienen programas muy importantes de investigación en sistemática. Los jardines botánicos de São Paulo, en Brasil, y de Medellín, en Colombia, han desarrollado programas de educación ambiental. Se encuentra importantes exhibiciones educativas en muchas instituciones latinoamericanas, mientras en algunos casos se han establecido programas intensivos de trabajo de campo. Algunos jardines botánicos tienen reservas biológicas asociadas. Existe también una comunidad científica bien capacitada en muchos países.
Los jardines botánicos mayores y más activos están, sin lugar a duda, en los países desarrollados localizados por lo general en el hemisferio norte. Sin embargo, aunque el número de jardines botánicos en América Latina es reducido, existe un gran potencial para establecer programas de expansión y cooperación, y seguramente estos jardines jugarán un papel cada vez más importante en el futuro.
El interés por los jardines botánicos en las regiones tropicales y subtropicales de América Latina ha aumentado considerablemente en los últimos 10 o 15 años. En algunos países tanto organizaciones gubernamentales como privadas han demostrado interés en crear nuevos jardines botánicos o en apoyar el desarrollo de los ya existentes.
De acuerdo con el estudio realizado por el Secretariado de los Jardines Botánicos y la Conservación, hay 53 jardines botánicos en América del Sur, y 37 en Centro América y México. Además del jardín botánico de Rio de Janeiro, quizá el más antiguo, se han establecido varios jardines botánicos importantes en los últimos años. La mayor parte adelanta actividades de investigación, enseñanza, entrenamiento, conservación y expediciones de campo. Varios están dedicados al estudio de floras locales, otros tienen programas de investigación sobre fenología de árboles nativos para reforestación y otras actividades relacionadas con conservación, y otros han establecido cursos de educación ambiental, horticultura y jardinería. Algunos tienen bajo su responsabilidad reservas biológicas, y otros se dedican a la conservación de especies de importancia económica potencial.
Sin embargo, estas iniciativas son aún más o menos aisladas, aunque ya se están dando pasos para establecer redes de jardines botánicos como ha ocurrido en México donde existe una Asociación de Jardines Botánicos, y en Colombia donde se ha organizado recientemente la Red Nacional de Jardines Botánicos.
La Asociación Mexicana de Jardines Botánicos realizó su tercera reunión en octubre de 1988, mientras los jardines botánicos colombianos tuvieron su quinta reunión en noviembre del mismo año.
Jardín Botánico Medellin.-Colombia
Funciones de los jardines botánicos
Antes de entrar a considerar el papel de los jardines botánicos en la conservación de la naturaleza, es conveniente hacer un breve análisis de las funciones que éstos deben cumplir en términos más generales.
La mayor parte de los jardines botánicos de América Latina adelantan programas de investigación, enseñanza y conservación, aunque en diferentes combinaciones y con diferentes grados de énfasis.
Muchos están dedicados activamente al estudio de floras locales. Entre éstos están los jardines de Medellín, Cartagena, Tuluá y Bogotá en Colombia; el de Rio de Janeiro en el Brasil, y el de Punta Arenas en Chile.
Uno de los mayores herbarios de América Latina está en el jardín botánico de Rio de Janeiro. Muchos jardines botánicos tienen su propio herbario o están asociados en alguna forma con universidades u otras instituciones que los tienen.
Los jardines botánicos promueven investigación relacionada con la conservación en aspectos tales como producción de semillas, dispersión, mecanismos de polinización y fenología. En el jardín botánico de Bogotá, por ejemplo, se vienen adelantando desde hace más de 10 años estudios sobre fenología de plantas nativas de los Andes, con el objeto de dar información útil para programas de reforestación o para establecer estas plantas como ornamentales. También en el jardín botánico de São Paulo se estudian plantas ornamentales, principalmente orquídeas.
Los jardines botánicos deben ser lugares donde se exhiben temas relacionados con la botánica para el público, y por esto deben organizar sus exposiciones principalmente usando plantas nativas. Es conveniente distribuir las plantas en formas atractivas que a la vez demuestren los principios fundamentales de la ecología y la importancia de las plantas para el hombre.
Las colecciones de plantas vivas están organizadas en distintas formas en diferentes jardines. En algunos casos se tienen los denominados «jardines sistemáticos», en otras se utiliza una distribución de acuerdo con regiones fitogeográficas, etc.
Los programas de educación deben adelantarse a todos los niveles: con niños, con profesores, con el público en general, con estudiantes universitarios y con quienes tienen en sus manos la toma de decisiones. El jardín botánico de São Paulo ha organizado con éxito cursos en educación ambiental, mientras en el jardín botánico de Tuluá, en Colombia, se ofrecen cursos en Horticultura y jardinería.
Los jardines botánicos deben ser laboratorios vivos como se indica en los objetivos del Museu Goeldi de Belém. El jardín botánico «Lucien Hauman» está designado, entre otras cosas, para «proveer» materiales para la enseñanza de la botánica
Las actividades de los jardines botánicos se divulgan por lo general a través de publicaciones periódicas, panfletos, guías, y catálogos.
Jardin Botanico de Rio de Janeiro.-Brasil
Los jardines botánicos y la conservación de la naturaleza
Los jardines botánicos deben jugar un papel muy importante en la conservación de los recursos genéticos a través de sus programas de investigación, educación, entrenamiento, conservación ex-situ e in-situ, expediciones al campo, etc. Para muchas plantas el cultivo en un jardín botánico puede ser la única opción de supervivencia. Es interesante anotar que los objetivos del jardín botánico de Cartagena, en Colombia, son: «realizar estudios sobre la protección y la conservación de la naturaleza en el norte de Colombia, y adelantar trabajos culturales, científicos y educativos relacionados con estos objetivos».
Puesto que es imposible cultivar todas las plantas, es necesario establecer prioridades para plantas con valor científico y con valor económico potencial. El jardín botánico de Tuluá, en Colombia, tiene como uno de sus objetivos principales la conservación de especies importantes desde el punto de vista económico. No debemos olvidar que en la región tropical estamos en una carrera contra el tiempo puesto que la tercera parte de todas las especies puede haberse extinguido dentro de 30 o 40 años.
Los jardines botánicos deben establecer reservas naturales o cooperar con otras organizaciones para que se establezcan esas reservas, que sirven como laboratorios vivos y pueden ser la mejor forma de proteger muchas especies.
Los jardines botánicos de América Latina tienen un gran potencial para implementar la Estrategia Mundial para la Conservación y la estrategia para los Jardines Botánicos y la Conservación, las cuales ofrecen el marco de referencia para desarrollar iniciativas conservacionistas. Para que los jardines botánicos de América Latina puedan implementar con éxito estas estrategias en los diversos países, es necesario que adelanten programas que tomen en consideración las necesidades específicas de la región.
Puesto que hay una gran conciencia ambientalista en América Latina, los jardines botánicos deben tomar un papel de liderazgo si se tiene en cuenta que no hay otras instituciones tan directamente relacionadas con la conservación de las plantas.
Las investigaciones que se adelanten en jardines botánicos en América Latina pueden ser fundamentales para seguir en detalle la disminución de la diversidad vegetal, y también para la conservación de recursos genéticos vegetales y otras plantas silvestres de valor económico. Los jardines botánicos pueden ser muy importantes en programas de conservación ex-situ e in-situ
Los jardines botánicos se han convertido en importantes centros para educación popular sobre conservación y sobre la importancia de las plantas, y pueden ser fundamentales en esfuerzos locales para modificar la enseñanza en las escuelas con el fin de hacerla más adecuada a las necesidades reales en las áreas de conservación y manejo adecuado de los recursos naturales.
Los jardines botánicos deben contribuir a la preservación de los recursos genéticos vegetales y ayudar a asegurar el uso sostenido de especies vegetales y de los ecosistemas en los cuales crecen.
Es muy importante que los jardines botánicos se organicen y decidan cuáles son sus áreas de acción prioritarias, sus metas y objetivos, y sus estrategias conservacionistas. Cuando esto ocurra, estarán en mejores condiciones de proveer el liderazgo requerido por la gran cantidad de organizaciones conservacionistas y ambientalistas que se han establecido en América Latina.
El movimiento conservacionista en América Latina incluye universidades, organizaciones no gubernamentales, y una participación cada vez mayor de las comunidades locales en general. En muchos países se encuentra ya un número considerable de fundaciones privadas preocupadas con los problemas del ambiente. Colombia, por ejemplo, tiene por lo menos 15 de estas fundaciones, lo mismo que el Perú, y existen aproximadamente 20 en Venezuela. En el Brasil también se está desarrollando una gran actividad en este sentido.
En cooperación con estos grupos conservacionistas, los jardines botánicos estarán en capacidad de incrementar las posibilidades de conservación de la flora tropical y subtropical y, por consiguiente, de ampliar su propio papel en conservación al promoverla al nivel local.
Jardín Botánico de Bogotá.-Planta carnivora y orquideas
Posibles acciones
La estrategia para los Jardines Botánicos y la Conservación sugiere que los jardines botánicos se comprometan con la conservación de la naturaleza a través de declaraciones específicas y también a través del mejoramiento de los métodos de manejo de las plantas y de la información sobre ellas. La Estrategia también considera las relaciones entre conservación ex-situ e in-situ, y la importancia de la educación, participación de la comunidad y entrenamiento con énfasis en conservación.
De particular importancia para estas actividades es la colaboración entre jardines botánicos a nivel nacional, latinoamericano y mundial. El directorio de jardines botánicos latinoamericanos que ha preparado el Secretariado para los Jardines Botánicos y la Conservación puede ser un punto de partida para posibles esfuerzos conjuntos.
Con el fin de implementar la Estrategia Mundial en los jardines botánicos latinoamericanos y a la vez estimular su crecimiento y desarrollo, podría emplearse la siguiente metodología:
- Iniciar una serie de estudios encaminados a analizar las capacidades de los jardines botánicos de América Latina en relación con la conservación de la naturaleza.
- Revisar las actividades actuales de los jardines botánicos con relación a la conservación de los recursos vegetales, usando la información disponible en el Secretariado de Jardines Botánicos como el punto de partida, y
- Organizar reuniones para establecer vínculos entre jardines botánicos, fortalecer redes ya existentes y coordinar actividades.
Estas reuniones («workshops») se podrían organizar en algunos países tales como Colombia, Brasil, México, Argentina, Venezuela y Chile, y buscarían estimular la coordinación de actividades tanto a nivel nacional como latinoamericano, y programar actividades futuras bajo una estrategia común.
Las reuniones deberían incluir representantes de los jardines botánicos, pero además deberían invitarse otros miembros importantes de la comunidad botánica local. En los casos en que se considere necesario y conveniente, deberían incluirse delegados del gobierno y de las organizaciones conservacionistas no gubernamentales.
Los principales objetivos de las reuniones serían:
- Fijar métodos de coordinación de actividades a todos los niveles, regional, nacional e internacional, y
- Desarrollar una estrategia común para el desarrollo futuro utilizando la guía que ofrece la Estrategia para los jardines Botánicos y la conservación como base.
Los objetivos específicos serían:
- Ayudar a establecer vínculos entre jardines botánicos,
- Analizar las capacidades de cada jardín en términos de conservación ex-situ e in-situ,
- Buscar formas de establecer o fortalecer vínculos con las organizaciones internacionales tales como el Secretariado de Jardines Botánicos y la Conservación, la Asociación Internacional de Jardines Botánicos, etc.,
- Ayudar a establecer vínculos con diversas organizaciones conservacionistas y ambientalistas tanto nacionales como internacionales, tales como World Wildlife Fund,
- Identificar centros para la coordinación de actividades,
- Producir documentos que expliquen las estrategias adoptadas para el mayor desarrollo de los jardines botánicos, tanto por países como para toda la América Latina, con recomendaciones sobre cooperación nacional e internacional. Tales estrategias deben hacer énfasis en la necesidad de desarrollar aún más los jardines botánicos para hacer frente a las necesidad conservación en América Latina.
- Jardin Botánico de Curitiba.-Brasil.-
Los documentos deberán analizar:
a.- las actividades actuales y futuras de los jardines botánicos en conservación,
b-. la situación de las colecciones vivas y de las informaciones disponibles sobre esas colecciones,
c.- los bancos de semillas existentes o en desarrollo,
d.- las reservas naturales asociadas a los jardines botánicos
e.- las necesidades de mantenimiento,
f.- los programas en educación ambiental existentes o futuros,
g.- los programas de educación para visitantes,
h.- los programas de servicio a la comunidad, y
i.-las capacidades reales o potenciales de los jardines botánicos como entidades conservacionistas, incluyendo también recomendaciones sobre el número apropiado de jardines botánicos necesarios para tener un verdadero impacto en conservación, y su más conveniente distribución geográfica en cada país.
Es importante también que los representantes de los jardines botánicos de América Latina busquen oportunidades de participar en reuniones internacionales organizadas por la Asociación Internacional de Jardines Botánicos, o en Congresos Mundial de Jardines Botánicos y la Conservación. Los representantes de los jardines botánicos latinoamericanos deben hacer todo lo posible por presentar informes de sus actividades en esas reuniones internacionales.
Conclusiones
Los jardines botánicos tropicales y subtropicales de América Latina deben adelantar programas de educación e investigación y jugar un papel importante en la búsqueda de plantas promisorias, en el reconocimiento y conservación de especies en peligro de extinción y en el estabelecimiento de reservas y áreas protegidas.
Existe un gran potencial en la región, y algunos jardines botánicos ya están adelantando muchas de estas funciones. Pero aún queda mucho por hacer.
La cooperación entre jardines botánicos hará posible que éstos crezcan y se desarrollen. Trabajando en forma coordinada se podrán lograr los objetivos más importantes como son el avance nuestro conocimiento sobre las plantas y de nuestra capacidad para conservarlas.
Reflejamos solo algunos de los jardines más importantes de América del Sur y América Central.
San Juan Botanical Garden. Puerto Rico
El San Juan Botanical Garden, también conocido como el Jardín Botánico de la Universidad de Puerto Rico, se encuentra en el Caribe de la ciudad de San Juan, capital de Puerto Rico.
Este exuberante Jardin Urbano de (1,2 km 2) » de plantas nativas y exóticas sirve como un laboratorio para el estudio, la conservación y el enriquecimiento de las plantas, árboles, flores, hierbas y muchas otras plantas.
Treinta hectáreas están ajardinadas y abiertas al público en general, así como a los investigadores.
El jardín botánico, propuesto en 1959, fue aprobado por el Consejo de Educación Superior de Puerto Rico el 12 de septiembre de 1969.
Por iniciativa del Sr. Arturo Roque y con el apoyo del presidente de la Universidad, Dr. Jaime Benítez, el Jardín Botánico fue inaugurado el 10 de marzo de 1971.
Administrativamente, funciona como una parte de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Mayagüez.
El jardín fue abierto parcialmente al público desde 1971 hasta 1989.
Sin embargo, a raíz del huracán Hugo, el jardín estuvo cerrado para su reconstrucción hasta que pudiera volver a abrir para los visitantes en 1991.
Colecciones botánicas del jardín, lagos, cascadas y refugios están bien conectados por caminos, carreteras y caminos, lo que permite al visitante conocer y apreciar mejor el valor de la flora autóctona y tropical.
El Jardín Botánico expone varias colecciones temáticas que comprenden plantas tropicales y subtropicales.
También exhibe una excelente colección de esculturas modernas por reconocidos artistas de Puerto Rico y América hispana.
Jardin de las Heliconias. -Colores brillantes de las heliconias nativas de las regiones tropicales de América. También hay un pequeño grupo de Heliconias de Asia.
Capilla de bambúes. – Una pequeña capilla en un bosque de bambúes.
Jardin de Orquídeas. -Una gran selección de orquídeas con una colección especial de Catleya.
Jardin de Monet .- Una adaptación del jardín acuático de Monet en Giverny con sus lirios de agua en el ambiente tropical.
Palmetum. – Reúne más de 125 especies de palmeras.
Jardin acuático. -La colección incluye papiro sellado y palmas de cera roja.
Taino Garden.-. Un arboretum con una colección de especies de árboles que se encuentran a nivel local que fueron útiles en la vida cotidiana de los indios taínos.
El herbario. – Una colección de más de 36.000 ejemplares disponibles para el estudio y la investigación de los estudiantes universitarios e investigadores de Puerto Rico, el Caribe y otras partes del mundo.
El Jardín cuenta con un laboratorio viviente para la enseñanza informal de la comunidad en todos los aspectos de la flora y las otras plantas que se cultivan aquí.
Jardin Botánico de Buenos Aires. -Argentina
El Jardín Botánico de Buenos Aires, cuyo nombre oficial desde 2009 es «Dirección Operativa Jardín Botánico Carlos Thays», es un jardín botánico que se encuentra próximo a los bosques del barrio de Palermo de la mencionada ciudad.
Su extensión es de 69.772 m², en los que se encuentran más de 5.500 especies vegetales.
Cuenta además con numerosas esculturas como «La Primavera» u «Ondina de Plata», «Loba Romana», «Mercurio», «Venus»; y grupos magníficos como «Saturnalia», estatuas de mármol que simbolizan los movimientos de la VI sinfonía de Beethoven («La Pastoral»), y el grupo escultórico «El Despertar de la Naturaleza».
Posee además un invernáculo, una biblioteca, el museo Botánico, y la Escuela Municipal de Jardinería, todo rodeado de serenos senderos para caminar y contemplar la variada vegetación.
Fue inaugurado el 7 de septiembre de 1898 y su mantenimiento depende del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
El Jardín Botánico Carlos Thays de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se encuentra en el barrio porteño de Palermo, junto al Jardín Zoológico, en el perímetro de ocho manzanas delimitado por Avenida Santa Fe, República Árabe Siria, Avenida Las Heras y la Plaza Italia.
El 22 de febrero de 1892 el paisajista Carlos Thays elevó a la Intendencia Municipal, a cargo de Francisco Bollini un proyecto exponiendo la necesidad de crear un jardín botánico de aclimatación para objetivos científicos, recreativos y paisajísticos, aconsejando hacerlo en el lugar que ocupa actualmente y en el que funcionaba en ese entonces el Departamento Nacional de Agricultura.
Se le dio visto bueno al proyecto y se entregaron dichos terrenos el 2 de septiembre de 1892 y se lo inauguró el 7 de septiembre de 1898.
En la gestión siguiente a la de Thays, la de Benito Carrasco (entre 1914 y 1916) se incorporó la Escuela de Jardineros, la Bibliotecas especializada en temas botánicos y el gabinete de Fotografía.
En 1937 se le dio el nombre de su fundador, «Carlos Thays».
En abril de 1996 se lo declaró Monumento Histórico Nacional (Decreto n° 366).
El 30 de noviembre de 2009 pasó a ser «Dirección Operativa Jardín Botánico Carlos Thays» (Decreto 1079/09 del B.O. 3303).
Jardines.-Aquí se encuentran los tres estilos principales de la jardinería paisajista: el simétrico, el mixto y el pintoresco, recreados en los jardines romano, el francés y el oriental.
El jardín romano. -Como su nombre lo indica, en este sector del Jardín Botánico se recrea el aspecto de un jardín de tiempos del Imperio Romano.
Aquí se han reunido las especies vegetales que el botánico romano del siglo I de nuestra era Plinio el Joven tenía en su villa de los Apeninos, tales como cipreses, álamos, y laureles.
El jardín francés. con diseño simétrico de estilo francés del siglo XVII al siglo XVIII.
El jardín oriental.
También cuenta con zonas donde las plantas se ordenan de acuerdo a su origen; de Asia se aprecian ejemplares Ginkgo biloba de hojas amarillas en otoño y bellas japónicas (Eriobotrya japonica, Cryptomeria japonica, Sophora japonica etc.) de hojas coloradas de Oceanía, con acacias, eucaliptus y casuarinas; de Europa, con robles, avellanas y olmos; y del África, con helechos, palmeras, y gomeros.
Además, de Estados Unidos provienen las sequoias, pero, sobre todo, haciendo especial hincapié en la flora argentina.
En cada sector los especímenes vegetales se ordenan sistemáticamente, según la clasificación taxonómica.
Uno de los atractivos del Jardín Botánico son sus cinco invernaderos.
El mayor de ellos, de estilo art nouveau, fue premiado en la Exposición de París de 1900, tiene 35 m de largo y 8 de ancho y por su diseño. En él se resguardan especies diversas regiones cálidas, como los helechos (cerca de mil ejemplares), orquídeas o palmeras, como la areca vestiaria llegada desde Nueva Guinea.
En abril de 1996 fue declarado Monumento Histórico Nacional
Edificio central.-Fue proyectado por el Ingeniero Militar de origen polaco, Jordán Wysocki y construido por Pedro Serechetti.
El proyecto de presentó en enero de 1881 y se construyó entre abril y diciembre de ese año. Carlos Thays lo habitó mientras fue el director de Parques y Paseos (1892-1898).
*Desde 1882 a 1894 fue sede del Departamento Nacional de Agricultura y actualmente es el edificio central del parque. 1894 a 1896, sede del Museo Histórico Nacional.
11 de agosto: la Dirección de Paseos toma posesión del edificio, el Museo Histórico se traslada a Parque Lezama.
Actualmente es sede de la Administración del Jardín Botánico.
Su Biblioteca Botánica cuenta con 1.000 libros y 10.000 publicaciones de todo el mundo, libremente disponibles por los visitantes, y el Museo Botánico. Cabe destacar la gran ayuda que brindó el Ingeniero Agrónomo Benito Carrasco en la concreción de varias de estas obras; y que hoy pueden disfrutarse en el Jardín.
Dentro del perímetro del Jardín se encuentra la Escuela Municipal de Jardinería Cristóbal María Hicken dependiente del Ministerio de Educación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El lugar cuenta con 33 obras de arte entre esculturas, bustos y monumentos.
Son de destacar: Los primeros Fríos , del catalán Miguel Blay y Fábregas; Sagunto, de Querol y Subirats; Figura de mujer, Saturnalia, en bronce patinado, por Ernesto Biondi, una réplica de la célebre Luperca (o Loba Capitolina), una réplica de la Diana de Versalles -el original corresponde al artista griego antiguo Leocares-, una bella escultura en mármol de una muchacha desnuda llamada Ondina del Plata obra de Lucio Correa Morales que se encuentra en medio de un estanque; El mensaje de Mercurio obra neoclásica debida a Ricardo Celma y Eduardo Lloreda que substituye a una destruida representación escultórica de tal deidad.
Un conjunto haciendo un círculo de esculturas en mármol blanco representa a los movimientos 2°, 4° y 5° de la célebre sinfonía Pastoral de Ludwig van Beethoven, estas esculturas debidas a Leonor Tomassi se llaman respectivamente como los nombres de los citados movimientos de la ya dicha sinfonía: Escena por la orilla del río, La tempestad y Canción de los pastores, tal conjunto se completa con una escultura llamada El despertar de la naturaleza obra de Juan de Pari.
Otra escultura que representa a la diosa Venus -réplica de la Afrodita de Cnido-; así como también una pequeña escultura en bronce patinado que representa a Flora, el monumento donado para el Centenario de Argentina (1910) por el Imperio Austrohúngaro consistente en una especie de obelisco rematado por una esfera armilar etc.…
Jardin Botánico de Lankester. -Costa Rica
El Jardín Botánico Lankester es un jardín botánico de unas 10,7 ha de extensión con una colección de orquídeas de las más importantes del mundo.
Este jardín botánico que forma parte de la Universidad de Costa Rica, se ubica en el cantón de Paraíso, provincia de Cartago a unos 45 minutos en automóvil, de la capital San José de Costa Rica.
La historia del Jardín Botánico Lankester se remonta a la década de 1940 en la que el naturalista y orquidólogo británico, Charles H. Lankester, se mostró interesado en el estudio y el cultivo de las plantas epífitas de Costa Rica.
Como botánico aficionado, colaboró con los orquidólogos más notorios de su tiempo y dedicó su vida a la creación de un jardín privado en su finca.
Después de su muerte, la importancia de preservar su jardín llegó a ser evidente.
Con los esfuerzos comunes de la American Orchid Society (Sociedad estadounidense de orquídeas) y de la asociación Stanley Smith Horticultural Trust, el jardín fue donado a la Universidad de Costa Rica el 2 de marzo de 1973, con la promesa de transformarlo en un jardín botánico.
Con el esmero y mucho esfuerzo, el Jardín Botánico de Lankester se ha convertido en una de las instituciones botánicas más activas y más importantes del Neotrópico, promoviendo la conservación de las orquídeas de Costa
El jardín botánico Lankester tiene una de las mayores colecciones de su clase en el mundo, con casi 15 000 especímenes de orquídeas catalogadas, de unas 1.000 especies, la mayoría de las cuales son nativas de Centroamérica.
Aunque no todas tienen la floración en la misma época, es entre febrero y abril cuando coinciden el mayor número de especies en floración.
Pero no solo son orquídeas lo que se encuentran en este jardín botánico que tiene otras colecciones de plantas tropicales:
Colección de Palmeras, de orígenes diversos y una colección de las palmas de la maleza que son sobre todo los naturales que crecen en la parte más sombría del bosque secundario.
Los visitantes pueden observar la especie de la palma del melocotón (Bactris gasipaes Kunth- conocida en Costa Rica como pejibaye) muy apreciada por su fruta y plantas ornamentales del género Chamaedorea.
Bambúes, con una de las colecciones más importantes del país, así como un bosquete Phyllostachys aurea. Heliconias, una colección de más de 100 especies nativas y exóticas de heliconia que crecen junto con especies similares tal como ave del paraíso, Marantaceae, Musaceae, Zingiberaceae, y Costus.
Cactus y suculentas, plantas de cactus, agave, Crassulaceae, Euphorbiaceae y Liliaceae. Bromeliaceae
Un bosque de reforestación con muy diversas especies de unas 6 hectáreas de extensión que se ha dejado crecer sin ninguna traba desde 1973, en unos terrenos de unos antiguos pastos.
Jardin Botánico de Guayaquil. -Ecuador
El Jardín Botánico de Guayaquil es un jardín botánico de 5 hectáreas de extensión, que se encuentra en la ciudad de Guayaquil, Ecuador.
Se caracteriza por exhibir colecciones científicas de plantas vivas, que se cultivan para conseguir estos objetivos: su conservación, investigación, divulgación y enseñanza.
Este proyecto ha sido empujado por guayaquileños desde 1979, y después de un trabajo de 10 años fue abierto al público y ha recibido desde entonces la visita de millares de personas nacionales y extranjeros.
Se encuentra en la zona Norte de la ciudad de Guayaquil, Ecuador en la ciudadela «las Orquídeas» Av. Francisco De Orellana, en las cumbres del Cerro Colorado.
Misión. -Brindar entretenimiento eco-turístico educativo a través de contacto con la naturaleza, mediante métodos lúdico-cognoscitivos que fomenten y fortalezcan en el visitante el sentido de amor y respeto al medio natural, como parte fundamental de su entorno.
Uno de los principales objetivos del jardín botánico es la colección y conservación de las plantas locales o exóticas, y la protección de las especies en riesgo de extinción.
Jardin Botánico de Cienfuegos. -Cuba
El Jardín Botánico de Cienfuegos, es un jardín botánico de 97 hectáreas, que se encuentra en las afueras de la ciudad de Cienfuegos en Cuba.
Este jardín botánico es el más importante de la red existente en Cuba, debido a ser el más antiguo, y el que tiene colecciones de plantas más completas enfocadas a la investigación en mejoras de cultivos y para la exportación a terceros países.
Fue declarado Monumento Nacional el 20 de octubre de 1989. Su código de identificación como institución botánica a nivel internacional, así como las siglas de su herbario es CIENF.
Se encuentra situado a unos 15 km de Cienfuegos, enclavado en áreas aledañas al molino de azúcar actual Central Pepito Tey, en la carretera que conduce a Trinidad. Temperatura media anual: 24,5 ºC.-Temperatura media máxima: 30,4 ºC.-Temperatura media mínima: 20,0 ºC Promedio anual de lluvia: 1400 mm.-Altura: 50 msnm
Naturaleza del suelo: Pardo sin carbonato, típico sobre roca ígnea intermedia.
La fundación del Jardín Botánico de Cienfuegos tuvo lugar a finales del siglo XIX cuando el acaudalado empresario norteamericano Edwin F. Atkins, radicado en Cuba, adquiere la antigua central azucarera de «Soledad del Muerto», con la intención de fomentar un centro de investigaciones botánicas para la mejora de las variedades de caña de azúcar existentes y la posibilidad de obtener nuevos cultivares.
Cuando comienza a funcionar como un jardín botánico fue en el otoño del 1901, bajo el nombre de «Harvard Botanical Station for Tropical Research and Sugar Cane Investigation» (Estación Botánica de Harvard para la Investigación Tropical y de la caña de azúcar), contando con una extensión de una 4,5 ha.
En sus primeros 20 años se introdujeron numerosos árboles, arbustos y otros especímenes de todo el mundo. Atkins traspasó su dirección a la Universidad de Harvard en 1919.
En 1960 la Universidad de Harvard abandona el país y se hace cargo de su administración el Ministerio de la Industria, y la Universidad Central Marta Abreu de las Villas. Actualmente es una dependencia del Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente en Cienfuegos.
Sus ejemplares la mayoría únicos han aguantado a través de los años a los fenómenos climatológicos más diversos, tales como la helada de 1903, y los huracanes de 1911 y de 1935 que se ensañaron con el recinto.
Más recientemente los ciclones tropicales Lily (1996) y Michelle (2001), también dejaron su huella aquí; sólo este último afectó a 32 especies únicas, que se han recuperado en la actualidad.
En las 97 hectáreas de las que consta el jardín botánico (7 ha son de bosque natural preservado), se albergan más de 2.000 especies de plantas que representan 670 géneros, de 125 familias, en su mayoría arbóreas; aproximadamente el 70% de los ejemplares son de especies foráneas.
Son de destacar:
Colección de orquídeas con más de 400 especies. -Colección de bambúes con 23 especies. -Colección de jagüeyes (Ficus), con 65 especies. -Colección de palmeras con 280 especies, siendo esta colección una de las más importantes de América y del mundo. Con especies tan raras como “el árbol que camina”, “pata de elefante”, “trampa de mono”, y el de “la salchicha”, nombres populares que son bien elocuentes de las formas que presentan. Plantas medicinales. Frutales. -Cactáceas
Se realizan investigaciones de gran importancia en la vida científica del país.
Jardin Botánico Nacional de Cuba. *
El Jardín Botánico Nacional de Cuba es un jardín botánico de unas 600 hectáreas y en el que están expuestas unas 4000 especies vegetales.
Dependiente de la Universidad de La Habana, que tiene como sus objetivos, el promover el conocimiento, en la población en general, de los aspectos relacionados con las plantas, haciendo hincapié en la Flora autóctona.
Este jardín, es un punto de referencia, en cuanto a cultura alimentaria y comida ecológica en Cuba. Su código de reconocimiento internacional como institución botánica, así como las siglas de su herbario es HAJB.
Se encuentra a unos 25 km por el sur, de la ciudad de La Habana en Cuba. Se llega por la carretera El Rocío km 3 1/2, Calabazar-Ciudad de La Habana..-Latitud: 22 59′ N.-Longitud: 82 20′ O Temperatura media anual: 24,2 ºC.-Temperatura media máxima: 32,6 ºC.-Temperatura media mínima: 11,9 ºC.-Promedio anual de lluvia: 1615 mm.-Altura: 100 msnm
Naturaleza del suelo: Ferralíticos rojos, arcillosos, de profundidad variable, pH=6.5
Por una orden la máxima Dirección del país en 1967, se le asignó a la Universidad de La Habana responsabilidad para la creación de un nuevo y moderno Jardín Botánico.
De este modo, surge el Jardín Botánico Nacional (JBN), y que contó con la asesoría directa del Prof. Dr. Johannes Bisse (Universidad Friedrich Schiller de Jena – Alemania) para su construcción.
El Jardín Botánico Nacional de Cuba cuenta con unas 600 hectáreas de superficie y fue abierto al público en 1984
En 1989, con ocasión del 30 aniversario de la Revolución Cubana, gracias a la colaboración de la “Asociación Conmemorativa para la Exposición Mundial del Japón” y con el apoyo del Embajador de Japón en Cuba, se fundó el Jardín Japonés.
Este jardín botánico fue concebido con los fines de una institución moderna destinada al uso público en la que se muestra una gran colección de plantas vivas, clasificadas y ordenadas científicamente, con propósitos educativos, científicos, recreativos y conservacionistas.
Exposiciones bajo techo. -Su área expositiva abarca unos 2.353 m², y consta de una parte techada con 3 pabellones, y otra exterior en la que hay un estanque para plantas acuáticas y colecciones de plantas ornamentales.
Los pabellones tienen 9 metros de altura y en ellos se exponen plantas de aproximadamente 600 especies pertenecientes a 250 géneros de 90 familias.
El pabellón casa de cristal está dedicado a representar las plantas de zonas áridas tropicales y subtropicales.
El pabellón de alta humedad y 50 % de iluminación alberga plantas que habitan los bosques húmedos tropicales.
El pabellón alta humedad y 25 % de iluminación exhibe plantas de los bosques tropicales húmedos de montaña, y algunas plantas de interés económico como las de cacao, café, pimienta negra, vainilla.
En el exterior aparece una colección de plantas ornamentales acuáticas y terrestres, con una sección dedicada a plantas con troncos paquicaules (troncos engrosados para almacenar agua).
Colecciones de campo, con las zonas: Zona Fitogeográfica Cubana: Esta zona muestra una representación de las diferentes formaciones vegetales que pueden encontrarse en Cuba:
Sabanas de Júcaros y Palmeras. -Pinares. -Vegetación sobre Serpentina. -Bosque húmedo Oriental. -Montes Semideciduos.-Vegetación de Mogotes.-Monte Seco.-Manigua Costera.-Zona Fitogeográfica Mundial.-Es una muestra de la flora arbórea tropical de Asia, África, América y las Antillas, Australia y Oceanía..- Todas ellas científicamente documentadas.
Colecciones especializadas:
Sistemática. -Palmetum. -Bosque Arcaico. -Colección Ekman. -Bosque Martiano. -Plantas económicas. -Jardín Japonés, o Jardín de los paseos
Inaugurado en 1989, obra del arquitecto paisajista japonés Yoshikuni Araki, está enclavado en la zona fitogeográfica de Asia Sur Oriental, con una extensión de cinco hectáreas, expone plantas propias de esa región asiática y otras apropiadas para crear el ambiente paisajístico «Kaiyu-Shiki-teien» (jardín de paseo), en el que con la ténica «mie-gakure», de las lomas «shakkei», desde ningún punto del jardín se puede ver todo el paisaje. Posee una cascada, un lago y un mirador «Ukimi-dou».
Colección Científica. -La colección científica del Jardín Botánico Nacional de Cuba se alberga en unos umbráculos e invernaderos próximos a los edificios administrativos.
Para acceder a ellos previa cita a especialistas. Esta colección mantiene ejemplares de la flora cubana y Mundial y son la base para el enriquecimiento de las zonas expositivas y las áreas fitogeográficas del centro.
Herbario (el segundo del país) con más de 100.000 ejemplares de la flora cubana (de ellos aproximadamente 300 son tipos)
Biblioteca especializada con unos 4700 títulos de libros y 1084 títulos de publicaciones seriadas.
Personal, nueve Doctores en Ciencias Biológicas, seis Maestros en Botánica, ocho jóvenes investigadores y 11 técnicos para la investigación y la docencia, se encarga de las labores de investigación que aquí tienen lugar.
Restaurantes: ecológico (El Bambú)
Jardin Botánico de Porto Alegre. -Porto Alegre. -Brasil
El Jardín Botánico de Porto Alegre es un órgano ejecutivo de la Fundación RS Zoobotánica, en Porto Alegre.
Hoy el Jardín Botánico de Porto Alegre tiene una superficie de 39 ha, ya consolidada tras varios pleitos. Sin embargo, se considera uno de los cinco jardines botánicos más grandes de Brasil, en vista de la diversidad de su colección y su buena organización. Su público principal son los estudiantes y científicos, pero también muy frecuentado por los turistas y por los locales, que en conjunto suman alrededor de 60.000 personas al año.
Proyectos. -Ambiental educación, en funcionamiento desde 1988, estructurado como una pequeña escuela donde se celebran conferencias, seminarios y proyecciones sobre diversos aspectos relacionados con el conocimiento de las nuevas generaciones sobre la ecología y la preservación del medio ambiente, sobre todo el estado.
Jardín Botánico. – ir a la escuela, en colaboración con una escuela del barrio, buscando la formación del profesorado y la educación de los estudiantes que utilizan el parque como un laboratorio al aire libre para varias prácticas interdisciplinarias.
La plantación de los Sueños, una frente a taller de plantación de árboles para los niños.
Conocer el Patrimonio Natural y la difusión de los recursos naturales regionales.
Plántulas de vivero, con ventas al público, con más de 120 especies de árboles nativos, ornamentales, frutales y medicinales.
Actividades científicas. -La conservación integrada de la biodiversidad, con especial interés en la conservación de los ecosistemas.
Sistemática y Vegetal taxonomía, la catalogación de las especies del Jardín Botánico.
Propagación y cultivo, buscando desarrollar tecnología para producir unas plantas más cualificadas de laboratorio y vivero, así como para el cultivo de especies nativas de su hábitat original.
Etnobotánica, que se centra en la recopilación de los conocimientos tradicionales sobre las plantas, sus usos y modos de cultivo.
Planta de la salud, la realización de investigaciones destinadas a desarrollar nuevas técnicas de cultivo que permiten una reducción en el uso de productos químicos y manipulación de especímenes conservados en los viveros, con miras a la protección contra la multiplicación de enfermedades, plagas y especies invasoras. También la investigación de nuevas técnicas de gestión y rehabilitación de las zonas devastadas.
Programa de formación destinado a capacitar a los empleados y al público, para actuar como multiplicadores del conocimiento.
Exploración Botánico Programa, con viajes de investigación y recolección.
Actualmente el Jardín Botánico de Porto Alegre cuenta con una colección de 653 especies de árboles con cerca de 3.000 ejemplares, además de una colección de plantas en maceta, con 3000 copias de un Banco de Germoplasma y el Banco de semillas para la conservación de especies raras o en peligro y para la repoblación de las zonas agotadas. Su distribución sigue criterios taxonómicos y geográficos, y reconstituye en áreas limitadas muchos ecosistemas importantes regional: hoja caduca Bosque y semi-caducifolio, densa lluvia bosque, Araucaria bosque y sabana, esta última una rareza en Brasil, que se producen sólo en su estado natural, en Parque Estatal Espinilho.
Jardín botánico de Belo Horizonte. -Belo Horizonte
El Jardín Botánico de Belo Horizonte Jardin Botánico de Belo Horizonte, FZB-BH) es un jardín botánico de 10 hectáreas que está constituido por los departamentos de Jardín Botánico, Jardín Zoológico, Administración y Finanzas, el Servicio de Educación Ambiental y el Parque Ecológico Promotor Francisco Lins do Rêgo. Se encuentra en el barrio de Pampulha, en la ciudad de Belo Horizonte en el Estado de Minas Gerais, Brasil.
El Jardín Botánico pertenece a la Fundación Zoo-Botánica de Belo Horizonte – FZB-BH, creada en 1991, es una organización administrativa indirecta de la Prefectura Municipal de la ciudad de Belo Horizonte, capital del estado de Minas Gerais. Tiene como misión contribuir a la conservación de la naturaleza realizando acciones educativas, y de investigación, que sensibilicen a las personas para el respeto a la vida.
El FZB-BH fue creada el 5 de junio del 1991, incorporando el antiguo Jardín Zoológico Sargento Sílvio Hollenbach, estando subordinado a la Secretaria Municipal de Medio Ambiente. El Zoo se inauguró oficialmente en 1959, aunque ya estaba presente en los planos de la ciudad desde su fundación en 1899.
En la fecha de la creación del Zoo-Botánico se incorporó un antiguo vivero Municipal al asumir el
Departamento de Jardín Botánico, como el departamento de FZB-BH. Cuyo objetivo sería el de convertirse en el centro de referencia en todo lo relacionado con la botánica en el estado de Minas Gerais y de actuar junto con los demás órganos municipales. El Jardín Botánico pasó a colaborar en la elaboración de las ordenanzas municipales, para el desarrollo de programas educativos y de investigación, referentes a la flora regional y tiene además la tarea de cultivar en sus viveros los árboles que se utilizan en las calles y paseos de la ciudad.
Para asumir estas tareas el Jardín Botánico posee un gran vivero, con un área útil de aproximadamente 25.000m², siendo 4.200m² sombreados con tela plástica (sombrite). Actualmente hay en el vivero 270 especies arbóreas, de las cuales 153 son nativas de Brasil, proporción que se ve aumentada cada año. Produciéndose unos 120.000 plantones por año, entre especies arbóreas, ornamentales y medicinales.
El Jardín Botánico posee colecciones especializadas, representativas de la flora nativa, presentadas en forma agrupada:
Aráceas, establecida desde 1991, se encuentra bajo una estructura de sombrite en un área de 150m². Cada especie de arácea, se encuentra identificada, plaqueada y registrada en un banco de datos. La colección tiene 555 especímenes, incluyendo géneros brasileños y extranjeros.
Plantas suculentas, se estableció en 1994, por medio de permutas y donaciones de particulares y coleccionistas. Son de destacar las especies de cactáceas que presentan interesantes ejemplares de la flora de Minas Gerais. Hay un total de 286 registros con 178 especies.
Orquídeas, actualmente la colección tiene 705 ejemplares registrados en el banco de datos informatizado. La colección de orquídeas está en un área de 75m², bajo sombrite de 70%, con irrigación automatizada. En el Jardín del Campo Rupestre, en su área de visita, fueron plantadas 13 especies de orquídeas.
Bromelias, Consta de 978 ejemplares de 61 especies registradas en el banco de datos informatizado, con un total de 630 ejemplares.
Plantas acuáticas, con 19 especies y 42 ejemplares. Esta colección está alojada en un lago de aproximadamente 500m², con fondo de arcilla.
Pteridofitas, están albergadas en un sombrite con filtro solar de 70%, estantes de madera tratada y ganchos superiores para los especímenes colgantes. Esta colección varía en función de las recolecciones que se efectúan periódicamente en el cerrado.
Campo Rupestre, los campos rupestres poseen un número considerable de especies endémicas y amenazadas de extinción, siendo un biotopo representativo de Minas Gerais. Son 39 especies, con 76 ejemplares, alojados en el área de exposición, componen el jardín externo al invernadero destinado a ese biotopo.
Nota. – Los Tejidos Sombrite están diseñados para el control solar en varios cultivos donde su uso correcto asegura una mayor productividad, uniformidad en el crecimiento (plantas con igual crecimiento) y una mejor salud de las plantas.
Jardin Botánico de Sao Paulo. -Brasil
El origen del Jardín Botánico de São Paulo fue la pasión por la botánica del naturalista Carlos Frederico Hoehne en 1928, cuando el estado comenzó Orquídea en aguas profundas. Hoy en día hay 143 hectáreas que albergan diversas especies de plantas. Dentro de ella se construyó dos invernaderos – que se han convertido en el sello del Jardín Botánico – un hogar de plantas típicas de la selva, mientras que el otro está destinado a exposiciones temporales.
El Instituto Botánico cuenta con una biblioteca con cerca de 6.400 libros, numerosas obras del siglo pasado, y una colección botánica única en el estado de São Paulo. El Museo Botánico son numerosas muestras de plantas de la flora, una colección de productos extraídos de plantas, fibras, aceites, madera, semillas y también marcos y fotos representativas de los diferentes ecosistemas del estado. En el conjunto arquitectónico y cultural del Jardín Botánico se destacan, además del Museo, Linnaeus Jardín, inspirado en el Jardín Botánico de Uppsala en Suecia, los invernaderos históricos, la puerta histórica de 1894 y marzo de muelles Ipiranga arroyo.
El Jardín Botánico de São Paulo cuenta con las siguientes instalaciones:
Botánico Museo João Barbosa Rodrigues.-Jardín Linneo y reflejo de agua de la piscina. -Invernaderos de orquídeas y el Dr. Frederico Carlos Hoehne. -Palmetto Historia. -Arboleda de Imbuías. -Lago de los lirios de agua. -Puerta de Historia. -Jardín de los Sentidos.-Grove Árbol helechos, helechos, y el lago Bugios.-Conjunto escultórico para la Paz y la Libertad..-Grove Passuarés.-Lago del Riacho resortes Ipiranga.-Grove Pau-Brasil.-Planta pista beat.-Arboleda de Guaricangas.
Restaurante con comida típica brasileña.
Jardin Botánico de Curitiba
El Jardín Botánico de Curitiba,, también se le conoce como el «Jardín Botánico Fanchette Rischbieter».
Este es un parque situado en la ciudad de Curitiba , la capital del estado de Paraná , y la ciudad más grande en el sur de Brasil .
Es el mayor atractivo turístico de la ciudad, y alberga parte del plantel de la Universidad Federal de Paraná.
Inaugurado en 1991, la marca registrada del Jardin Botánico Curitiba fue creada en el estilo de jardín a la francesa.
Una vez que la puerta de entrada, se puede observar amplios jardines al estilo francés, en medio de fuentes, las cascadas y lagos, y el efecto invernadero de 458 metros cuadrados, que alberga en su interior, plantas ejemplares característicos de las regiones tropicales.
Se lanza su alfombra de flores a los visitantes justo a la entrada.
Esto ocupa 240.000 m² en la zona.
El invernadero principal, en un estilo Art Nouveau con un moderno estilo de estructura de metal, se asemeja a la mitad del Palacio de Cristal del siglo XIX, en Londres.
El Museo Botánico ofrece una colección de referencia nacional de la flora autóctona, atrae a investigadores de todo el mundo.
Incluye muchas especies botánicas de los húmedos bosques del Atlántico del este de Brasil.
Los bosques nativos están llenos de caminos para pasear. Detrás del invernadero está el Museo de Franz Krajcberg, la artista polaca brasileña que tomó la causa de la conservación del medio ambiente, con 1.320 metros cuadrados de superficie, divididos en multimedia aulas, un auditorio con capacidad para 60 personas y un salón con varias exposiciones de obras donadas por el artista, representado por esculturas y relieves, así como fotografías, vídeos, publicaciones y materiales educativos.
En el otro lado está el Museo Botánico, un edificio de madera que la entrada con un puente hecho de madera también.
En realidad, el Museo Botánico de Curitiba tiene el cuarto más grande herbario del país.
En el frente de la construcción hay un estanque con carpas, tortugas, las cercetas, las garzas, etc., y ofrece un lago, un auditorio, una biblioteca, un área de exposiciones, un teatro, tenis y un carril bici.
Jardin Botánico de Rio. -Rio de Janeiro. -*
El Río de Janeiro, el Jardín Botánico está situado en el distrito en la » Zona Sul «(zona sur) de Río de Janeiro.
El Jardín Botánico muestra la diversidad de la flora brasileña y extranjera.
Hay alrededor de 7.000 especies (algunas en peligro de extinción) distribuidos en un área de 54 hectáreas con numerosos invernaderos.
El jardín también alberga monumentos de importancia histórica, artística y arqueológica. Hay un importante centro de investigación, que incluye la biblioteca más completa en el país especializado en botánica, con más de 32.000 volúmenes.
El Jardín Botánico de Río de Janeiro, uno de los grandes jardines tropicales botánicos y arboretos del mundo. Fue fundada en 1808 por Juan, príncipe regente del Reino Unido de Brasil y Portugal (más tarde Rey Juan VI), para introducir y aclimatar plantas económicamente beneficiosas traídas de otras regiones tropicales del mundo.
El jardín, ubicado en un sitio de 350 hectáreas (140 hectáreas) por debajo de los picos altos, tiene una colección de más de 7.000 especies de plantas tropicales. Predominan las plantas nativas de Brasil, como las aroideas, las palmeras y los miembros leñosos de la familia de las leguminosas.
Una característica llamativa del jardín son sus avenidas espectaculares de las palmas reales que miden alrededor de (30 metros) de altura. El jardín mantiene un herbario que cuenta con aproximadamente 330.000 ejemplares de referencia, una excelente biblioteca y laboratorios de investigación bien equipados. Se encuentra a lo largo de una avenida principal que une los distritos de Botafogo y Gávea en Río de Janeiro.
Previsto originalmente para la aclimatación de especias como la nuez moscada, la pimienta y la canela importada de las Indias Occidentales, el jardín fue abierto al público en 1822, y ahora está abierto durante las horas del día todos los días excepto el 25 de diciembre y el 1 de enero.
El parque de 140 hectáreas se encuentra al pie de la montaña de Corcovado, muy por debajo del brazo derecho de la estatua de Cristo Redentor y contiene más de 6.000 especies diferentes de plantas tropicales y subtropicales y árboles, incluyendo 900 variedades de palmeras.
Una línea de 750 m de 134 palmeras constituye la Avenida de las palmas reales que conducen desde la entrada a los jardines.
Estas palmeras todas descienden de un solo árbol, el Mater Palma, desde hace mucho tiempo destruida por un rayo. Sólo alrededor del 40% del parque se cultiva, y el resto bosque atlántico se levanta las faldas del Corcovado.
El parque está protegido por el Patrimonio Histórico y Artístico Nacional y fue designado como Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1992.
El Jardín Botánico cuenta con un importante instituto de investigación, que desarrolla una amplia gama de estudios botánicos en Brasil.
El instituto cuenta con los taxónomos que se especializan en la identificación y conservación de la flora neotropical.
Los jardines incluyen colecciones que incluyen las bromelias, las orquídeas y plantas carnívoras y cactus.
Incluye la biblioteca más grande de Brasil sobre temas botánicos y las colecciones de frutos secos, plantas raras en Brasil, además de muchas fotografías.
La pintura de hierro fundido de la Fuente de las Musas se hizo en Derby, Reino Unido, y hasta 1895 fue localizada en la villa de Henrique Lage en el Largo da Lapa, en el marco de la jardinería por el pintor inglés John Tydall .
Jardín botánico de la Universidad Austral de Chile
El Jardín Botánico de la Universidad Austral de Chile es un jardín botánico de unas 10 hectáreas de extensión, que se encuentra en la isla Teja, junto a la ciudad de Valdivia, Chile.
Pertenece a la Universidad Austral de Chile y se halla dentro de su campus «Teja», su código de identificación internacional como institución botánica, así como las siglas de su herbario es VALD.
Fue creado en 1957 por el fundador y primer Rector de la UACh, Dr. Eduardo Morales Miranda, quién se propuso la creación y desarrollo de uno de los mejores jardines botánicos del país.
La parte ornamental fue diseñada y construida por la Sra. Kathy Taylor quien trabajó conjuntamente con el Sr. José Garrido, uno de los jardineros con más experiencia en la UACh”.
Para proteger el potencial ambiental, cultural y patrimonial que tiene el Jardín Botánico de la Universidad Austral de Chile, se creó en el 2003 el Comité de Manejo Sustentable del Jardín Botánico dependiente de la Comisión de Espacios Físicos UACh.
Actualmente el Jardín Botánico de la UACh se encuentra en una etapa de modernización, dirigida por un plan marco de desarrollo (2012-2022) que tiene por objetivo transformarlo en un centro de investigación, educación y cultura, a fin de convertirlo como el primer Jardín Botánico complejo de Chile.
El Jardín Botánico de la UACh es un lugar de ocio y un laboratorio abierto para la universidad y para quienes se interesan en la vegetación nativa y exótica, con un total de unas 950 especies de plantas.
Plantas del bosque valdiviano y de sur de Chile. Formaciones de plantas nativas, incluyendo especies forestales, arbustos, praderas,
Sección de plantas de estepas, dunas, arbustos de terrenos salinos
Sección de plantas acuáticas y palustres de los humedales, gracias a encontrarse junto al río Cau Cau.
Sección de plantas con problemas de conservación, manteniéndose un activo intercambio con otras entidades similares en el mundo.
Especies del género Nothofagus de Nueva Zelanda.
Jardín botánico Nacional de Viña del Mar.-Chile
El Jardín Botánico Nacional, es un jardín botánico de 395 ha incluidos cerros de matorral y bosque esclerófilo. Dentro de esta superficie hay 22 ha correspondientes al parque antiguo construido por Pascual Baburizza que están abiertas al público.
Es miembro del BGCI y presenta trabajos para la Agenda Internacional para la Conservación en los Jardines Botánicos, su código de reconocimiento internacional como institución botánica, así como las siglas de su herbario es VINAD.
El Jardín Botánico Nacional de Viña del Mar fue creado en 1951, cuando el parque El Salitre de Don Pascual Baburizza, construido en 1918, fue donado al estado de Chile.
Desde 1951 ha sido un lugar de ocio, encuentro con la naturaleza y conservación de especies vegetales de los biotopos presentes en Chile, siendo un lugar de formación y de cultura ambiental, de la provincia de Valparaíso.
Para agilizar la realización de actividades por parte del jardín botánico (anteriormente entorpecidas por una maraña burocrática), se logra en 1998 la creación de la Fundación del Jardín Botánico Nacional de Viña del Mar, que se encarga de su administración y fijación de objetivos y actividades.
En total el JBN cultiva 779 especies de plantas de las cuales el 42,5% son nativas de Chile que se encuentran en estado de amenazas varias en su medio natural.
Entre sus colecciones son de destacar:
Cactarium, con Cactus chilenos y centroamericanos, con unos 680 ejemplares de 90 taxones, por ejemplo Copiapoa ssp., Browningia candelaris, Haageocereus fascicularis y Corryocactus brevistylus..-Colección de plantas del archipiélago de Juan Fernández con unos 710 ejemplares de 53 taxones endémicos..-Colección de plantas del bosque esclerófilo de la zona central, unos 143 ejemplares de 49 taxones..-Parque de Plantas Exóticas, se reúnen unas 2.317 plantas de 285 taxones exóticos procedentes de Europa y Asia..-Colección de Plantas medicinales.
Colección de Sophora toromiro, especie extinta de su hábitat natural, la isla de Pascua, solo sobreviven individuos en jardines botánicos y algunas residencias particulares. El Jardín Botánico Nacional posee 149 individuos de dos generaciones de Toromiro y otras 3 especies de Isla de Pascua.
Geofitarium, colección de 5.140 individuos de 59 especies de plantas Geófitas (aquellas que poseen bulbos o rizomas como órganos de acumulación de nutrientes y regeneración). -Colección de Mirtáceas de chile central y sur, más de 17 taxones (aún no abierta al público). -Colección de Plantas del sur de Chile, llamado también «Jardín Secreto», 306 individuos de 86 especies del sur del país. Aún no abierto al público. -Colección de Tarasa umbellata (Malvaceae), más de 80 individuos de esta especie endémica En Peligro Crítico de Extinción.
Actividades y Servicios. -Realizan trabajos sobre la nutrición de las Plantas. -Realizan trabajos de Exploración. -Programa de educación ambiental mediante el cual se imparten cursos al aire libre a niños de educación básica entre los meses de marzo y diciembre.
Visitas guiadas a grupos especializados.-Instalaciones de picnic de uso gratuito,.-Sendero de interpretación ambiental, caminos, prados, estero natural, pequeñas cascadas, puente japonés..-Laguna artificial con una antigua glorieta para aliviar el agua mediante compuertas interiores, siendo el hábitat de 50 especies de aves, algunas de ellas difícil de observar en la naturaleza..-Se ofrecen servicios para eventos como matrimonios, conciertos musicales al aire libre, cumpleaños, muestras a público, etc.
Desde finales del año 2004 el JBN se asoció con la empresa «SURAMERICA» para desarrollar un proyecto del deporte aventura para visitar el dosel forestal, que contempla un circuito de puentes de cimbra, colgantes, tibetanos y dos tirolesas (cable de transporte) entre las copas de árboles de gran altura.
Jardín Botánico de Bogotá. -Colombia
El Jardín Botánico de Bogotá «José Celestino Mutis» es el jardín botánico más grande de Colombia. Se encuentra en la sabana de Bogotá, a 2 600 msnm, en la faja tropical goza prácticamente de 12 horas de luz solar al día. Su precipitación media anual es de 713 mm. Posee 19,5 ha junto al parque Simón Bolívar, es un lugar de investigación, educación y ocio de la capital colombiana. Miembro del BGCI. Es administrado por el gobierno distrital de Bogotá. Fue creado en 1955, en homenaje del naturalista, matemático y astrónomo gaditano José Celestino Mutis.
Mutis fue el primero en consagrarse de lleno al estudio de las ciencias naturales en el territorio de la Nueva Granada. Mutis nació en Cádiz, España, el 6 de abril de 1732. En 1760 se trasladó a este territorio como médico del virrey Pedro Messía de la Cerda. Con el apoyo del virrey Antonio Caballero y Góngora y la aprobación de Carlos IIIica del Nuevo Reino de Granada, que duró treinta y tres años, en cuya labor se catalogaron 20.000 especies vegetales y 7.000 animales.
Durante sus siete años de permanencia en Mariquita, Mutis formó el primer jardín botánico de Colombia con el propósito de iniciar la aclimatación y dispersión de plantas tan importantes para la economía colombiana como los canelos, el café y la quina. Luego de padecer de fiebres palúdicas, decidió trasladarse a Santa Fe, en donde organizó otro jardín con semillas traídas de Europa por don Jorge Tadeo Lozano.
El fundador del actual jardín fue Enrique Pérez Arbeláez, quien además ejerció la función de recolector de semillas en los bosques de los Andes. Es autor del texto Plantas útiles de Colombia y del «plan de zonificación» del Jardín y el Ingeniero Francisco Sánchez Hurtado, ha sido uno de los encargados de desarrollar el proyecto.
De igual manera, gracias a los conocimientos del doctor Luis Eduardo Mora Osejo, se construyó el bosque que lleva su nombre. Con el apoyo de Lorencita Villegas de Santos surgió la rosaleda. En el siglo XX también se realizó la monumental la cascada, el páramo y el lago principal.
Para realizar las actividades centrales de su gestión: investigación, educación y mantenimiento de sus colecciones e infraestructura, el Jardín ha sido fundación, corporación y ahora una entidad pública descentralizada que desarrolla su plan de acción y deriva sus recursos de la Alcaldía Mayor de Bogotá.
Desde los años 1990, el jardín es el encargado de adelantar el programa de restauración de ecosistemas estratégicos y la arborización urbana, que se aprobó mediante el Decreto 984 de 1998.
La flor de Mutis. -Su nombre común es clavellino y el científico Mutisia clematis, Su familia es la de las asteraceae. Es una planta trepadora, de hojas compuestas color verde intenso por encima y blancuzco por debajo (debido a la abundante vellosidad aterciopelada que posee), presenta zarcillos (hojas modificadas que sirven para agarrase a un cuerpo de ascenso) enroscados y de color verde claro.
Su flor es muy vistosa, pendular y posee un color rojo vivo en sus pétalos. Es una especie característica de los bosques andinos de Colombia. Se distribuye en un rango altitudinal que va desde los 2.300 a los 3.200 msnm, es característica de zonas abiertas y por lo general se ubica en el borde del bosque en donde aparece adherida a algunas plantas de estas zonas externas.
Esta es una planta excepcional, ya que es una hierba de la familia de las compuestas pero trepadora y con zarcillos, lo que es completamente atípico en ella. Por este motivo Linneo, su descriptor, se sorprendió mucho al hallarla y le dio al género el nombre del sabio Mutis, con el objeto de inmortalizarlo y en la actualidad se encuentran descritas más de 50 especies del género Mutisia
Por acuerdo distrital número 069 del año 2002, se declaró el nogal (Juglans neotropica como árbol insignia de Bogotá. El nogal es el árbol insignia de la capital, reemplazando el tradicional caucho Sabanero y destacándose por su longevidad, resistencia a la contaminación y valor paisajístico e histórico.
En diciembre de 2003, el Concejo adoptó la orquídea Odontoglossum luteopurpureum como flor insignia de Bogotá. Es característica de la penumbra húmeda de los cerros Orientales de la sabana de Bogotá y se encuentra en peligro de extinción. No es una parásita sino una epífita, pues vive principalmente sobre las ramas de los árboles, pero sin alimentarse de ellas
Colecciones. -Alberga unas 18.206 accesiones de plantas vivas, con unos 2.143 taxones de plantas cultivadas, estando especializado en las plantas de la región andina. Posee cinco colecciones especiales dedicadas a la conservación de especies en peligro de la región de los Andes (CEPAC), que incluyen a las familias botánicas de Araceae, Bromeliaceae, Cactaceae, Lamiaceae y Orchidaceae.
Entre sus jardines temáticos se destacan la rosaleda y el orquideario, este con 5.000 ejemplares, entre ellos la Odontoglossum luteopurpureum Lindl., flor emblematica de Bogotá. También cuenta con invernaderos climatizados a diferentes temperaturas donde se exhibe la flora de las diferentes regiones y pisos térmicos de Colombia, desde La Guajira, pasando por los páramos de las alturas de los Andes colombianos (con cactus y otras plantas suculentas, plantas xerofíticas,) e incluyendo la Amazonía. Se destacan sus palmeras, plantas medicinales, acuáticas, de interés económico y coníferas. También cuenta con un jardín sistemático de criptógamas (Pteridophytas) y angiospermas, un arboretum, un herbario (con 4.560 especímenes) y un Index Seminum.
Posee una fauna asociada con los planos de agua propios y los del Parque Simón Bolívar aledaño, que son frecuentados por aves migratorias como la « mirla buchipecosa » (Turdidae), el « atrapamoscas occidental » (Empidonax difficilis) y el « cardenal abejero » (Piranga rubra).
Actividades. -Señalización en los terrenos del jardín.
La institución cuenta con programas de biotecnología, conservación de plantas amenazadas y de ecología, conservación de ecosistemas, etnobotánica, exploración, florística, horticultura, biología y control de especies invasivas, restauración ecológica, conservación de semillas y esporas, estudios de sistemática y taxonomía, programas de sostenibilidad, programas dedicados a la mejora agrícola, restauración de terrenos degradados y al medio ambiente urbano.
Jardín botánico de Medellín. -Colombia
El Jardín Botánico de Medellín Joaquín Antonio Uribe es un jardín botánico de unas 13.2 hectáreas de extensión, ubicado en la ciudad colombiana de Medellín. Cuenta con un recinto para eventos llamado el Orquideorama, un lugar arquitectónico para la exposición de flores. El Jardín cuenta con la condición de ser centro de cultura y educación ambiental y botánica, de enorme riqueza florística, y alberga más de 1.000 especies vivas y 4.500 individuos.
Hoy día convertido en un monumento a la naturaleza, transformado también en 2007 en joya arquitectónica, este lugar data del siglo XIX, cuando sólo existía allí la llamada Casa de Baños el Edén, un restaurante familiar tipo estadero. Posteriormente, a principios del siglo XX se llamó sucesivamente Bosque Centenario de la Independencia y posteriormente sólo El Bosque, apelativo con el cual duró más de 50 años, al igual que sus instalaciones tradicionales, un gran lago central con navegación en canoa de remos, paseos en burro y naturalmente algunas especies botánicas.
Adquirió el nombre de Jardín Botánico Joaquín Antonio Uribe en el año de 1972, cuando sus instalaciones se ampliaron para dotarlo del Orquideorama inicial, una colección mucho más amplia de especies vegetales, auditorio, biblioteca, museos y zona de comidas más amplias para los visitantes.
Pese a que durante muchos años el Jardín no fue objeto de suficientes cuidados por parte de la administración, dada la importancia que han adquirido los recursos naturales y la ecología, hoy día se encuentra perfectamente renovado y modernizado, forma parte del conjunto de equipamientos urbanos de la zona norte de la ciudad junto con el Parque Norte, la Estación Universidad, el Planetario, el Parque Explora y el Parque de Los Deseos, y es así como con el lento paso de los decenios ha llegado a convertirse, de un pequeño lugar que fuese en el siglo XIX, en uno de los principales atractivos turísticos de la región.
Sus colecciones de especies y especialmente de flores son destacadas en el país y meca de la flor nacional de Colombia, la orquídea.
Además de los turistas y locales que permanentemente lo visitan, el Jardín, su Orquideorama y sus variadas colecciones de especies, cuentan con todo un grupo de científicos, técnicos, mecenas y patrocinadores amigos de la naturaleza, la ecología, las ciencias botánicas y biológicas y, además, del turismo, actividad en la cual la ciudad está empeñada.
Los Baños El Edén. -A finales del siglo XIX se inicia la historia del Jardín Botánico de Medellín, cuando los terrenos que hoy ocupa comenzaron a tener vocación recreativa, en lo que entonces era conocido como la Casa de Baños El Edén. La finca era propiedad de don Víctor Arango y luego de las hermanas Emilia y Mercedes Arango P., “solteras, mayores de edad y vecinas de este distrito”, como está consignado en una escritura pública.
Medellín contaba en aquel tiempo con 40.000 habitantes, y la finca era arrendada a familias que disfrutaban de los baños y que además saboreaban las delicias de la gastronomía popular que se ofrecía en el lugar. Era una especie de “estadero”, parecido a los de hoy, reconocido como centro de sano esparcimiento gracias al cuidado de las señoritas Arango, donde las familias que llegaban en tranvía, a caballo o en carreta pasaban el rato en los baños, mientras comían los platos típicos de la región. Un documento de la Biblioteca del actual Jardín Botánico cuenta que “iban los señores de la Villa en coche o a caballo por el camellón de Bolívar o por la carretera del norte, a tomarse sus copetines con mujeres hermosas y generosas, conversar, hacer negocios y concertar alianzas matrimoniales”.
Jardín Botánico de Medellin.-Bosque Tropical
Comenzó a decaer El Edén cuando se prolongó la ruta del tranvía hasta Bermejal, donde se crearon establecimientos que llamaron más la atención de los anteriores clientes de la casa de baños. Para entonces, ya se empezaba a gestar una nueva etapa en la historia de este terreno.
Bosque de la Independencia. -A comienzos del siglo XX, se acercaba el primer centenario de la Independencia de Antioquia, por lo cual las organizaciones civiles y estatales más destacadas, encabezaron la conmemoración de la fecha para que fuera inolvidable. Luego de muchos trámites y consideraciones, sumados a otros acontecimientos que también marcaron el aniversario, la Junta Organizadora de la Celebración del Centenario y la Sociedad de Mejoras Públicas de Medellín logran que el gobierno nacional – en ese momento Carlos E. Restrepo era Presidente de la República- dé un auxilio de $15.000, de los cuales $5.000 son destinados a los gastos de celebración y $10.000 se trasladan a la Sociedad de Mejoras Públicas para la compra del terreno en el que se crearía un nuevo bosque para Medellín.
Luego, Ricardo Greffestein, presidente de la Sociedad, inició la búsqueda de un lote adecuado para realizar el proyecto. Después de considerar varias opciones, determinó que el sitio ideal era la finca El Edén, por su extensión y por sus abundantes aguas propias. Pronto se hizo la negociación con las hermanas Arango.
Ricardo Greffestein y Leocadio Arango se destacan junto al de otros personajes que comienzan a trabajar intensamente por hacer que ese ideal pudiera concretarse. Reciben un campo estéril, pedregoso, aparentemente adverso para que allí creciera un conjunto vegetal importante. Las contingencias fueron muchas y diversas, pero junto a ellas, comienzan a darse también los resultados. Así, el 11 de agosto de 1913 se crea el Bosque Centenario de la Independencia, que luego fue conocido como Bosque de la Independencia y, finalmente, sólo como El Bosque.
El lote inicial, que más adelante pasó a ser propiedad del Municipio de Medellín, se agregaron otros terrenos y fincas aledañas comprados o donados por particulares, hasta configurar un terreno considerable. Y el lugar vuelve a convertirse en el epicentro de la actividad recreativa de la ciudad.
Se construye allí el primer hipódromo de la ciudad, con una pista doble de carreras de caballos. Aprovechando las aguas existentes, se crea un lago donde los visitantes podían pasear remando en barcas. Cerca se construye un edificio para bar-restaurante y pista de baile. En lo que hoy es el Salón Restrepo, un sitio de eventos, funcionaba una pista de patinaje. Además, el Bosque de la Independencia contaba con vivero, canchas de tenis, trencito, juegos infantiles, un incipiente zoológico y hasta el servicio de venta de animales domésticos (perros y gatos).
Las historias se crearon, quedándose en la memoria de los habitantes de la época. Se convirtió en tradición, por ejemplo, que los novios llevaran a su amada, acompañada de la suegra, a navegar en las barcas, de las que se decía que sacaban ampollas incluso a las manos más callosas. En la proa se sentaba la suegra, mirando para adelante, la novia atrás y el conquistador en el medio, remando, mientras disfrutaba de los mimos de su enamorada, sin ser vistos por la guardiana que contemplaba el paisaje al frente.
El Bosque fue el lugar de las celebraciones patrias, sede de competencias náuticas y de pesca, foco de carreras de encostalados y concursos con vara de premios, epicentro de las retretas y de las representaciones teatrales o folclóricas que se hacían cuando existía la concha acústica. La ciudad entera se reunía en este sitio, apreciado desde entonces como un verdadero espacio público, al que concurrían las familias de alto nivel socioeconómico y también las de los trabajadores y obreros. Mientras los niños paseaban en burritas, los adultos se entregaban a otras diversiones, como el baile que comenzaba a la una o dos de la tarde y se prolongaba hasta las nueve de la noche, o hasta que había quién le pusiera monedas al piano del bar.
En cincuenta años el Bosque de la Independencia permitió el entretenimiento de los habitantes de Medellín. Llega entonces el declive, añadiendo el surgimiento de casas de citas en los alrededores, lo que lleva a la crisis la administración del Bosque. Sus 235.000 varas de extensión eran uno de los lugares más apreciados de la ciudad.
Jardín Botánico.
En 1968 comienza otra etapa para el terreno. Por esos días regresaba de Australia la señora Elena Baraya, Presidente de la Sociedad Colombiana de Orquideología, con una noticia extraordinaria: Medellín sería la sede de la VII Conferencia Mundial del Orquideología.
Este evento fue el generador de un proceso que llevó a transformar profundamente el Bosque de la Independencia. Se unen con tal fin la Sociedad de Mejoras Públicas, la Sociedad Colombiana de Orquideología, el Municipio de Medellín y el Club de Jardinería. Juntos crean una Fundación privada sin ánimo de lucro, que le da vida al Jardín Botánico Joaquín Antonio Uribe, como homenaje al sabio naturalista antioqueño. La nueva institución es inaugurada el 19 de abril de 1972, en el marco de la VII Conferencia Mundial de Orquideología. El evento marca un hito en la historia de la ciudad, pues por esos días Medellín giró en torno a las 62 delegaciones colombianas y extranjeras, representantes de 16 países, que se encontraron aquí para exhibir las más bellas orquídeas del mundo.
Así empezó la historia del Jardín Botánico y la meta que se trazó la nueva institución fue el fomento y el desarrollo de las ciencias naturales, en especial de la botánica, a través de la investigación y la conservación de la flora. Se propuso también crear un ambiente propicio para la educación ambiental y aportar un espacio para presentar la flora colombiana, además de constituirse en un atractivo turístico y ecológico importante de la ciudad y servir de sede para la realización de diferentes eventos culturales y educativos. En mayo de 1979 fue declarado Pabellón de Flora y pasó a formar parte del antiguo Sistema de Parques Nacionales, hoy Sistema Nacional Ambiental (SINA). En 1985 fuera declarado Patrimonio Cultural de Medellín.
La institución con su largo trabajo realizado la ha convertido en una de las entidades más respetadas y reconocidas de Colombia por su vasto dominio en la exploración, la preservación y la conservación de la flora colombiana, con énfasis en la regional. El prestigio de su labor llevó a que el Jardín Botánico fuera declarado Patrimonio Cultural de Medellín, avalado por hechos como ser parte desde 1989 de la Red Internacional de Jardines para la Conservación, dentro de la Estrategia Mundial de la Conservación en los Jardines Botánicos, con la colaboración de la FAO, UNEP, Unesco, WWF, UICN y BGCI, entre otras organizaciones mundiales.
Bosque tropical. – la colección muestra la estratificación de un bosque, con su dosel o techo, la vegetación del sotobosque y las plantas de piso. Por sus condiciones microclimáticas y de diversidad, constituye el hábitat de muchas especies de fauna. En su interior se ha creado el cauce para el agua que surge de un afloramiento natural. El bosque del Jardín Botánico está cruzado por un sendero de madera por el que pueden circular sillas de ruedas. Para preservar sus condiciones, no está permitido consumir bebidas ni alimentos en él.
Jardín de las palmeras.- en este espacio los paisajistas crearon un paisaje con pequeñas colinas, que destacan la esbeltez y belleza de las palmeras (familia Arecaceae). Después de las gramíneas y leguminosas, esta es la familia de plantas más útiles al hombre; además de su uso ornamental, son aprovechadas como alimento, medicina, material para construcciones, biocombustible, objetos cotidianos y artesanías. Colombia es el país americano más rico en palmas y el segundo en el mundo. La colección cuenta con 120 especies.
Laguna Francisco José de Caldas.- constituye un referente de los ecosistemas naturales denominados humedales, que desaparecieron de la planicie de inundación del río Medellín a causa del desarrollo urbanístico de la ciudad. Su origen es una combinación de afloramientos naturales con intervenciones artificiales, ocurridas desde hace más de 90 años. Es hábitat permanente de diversas especies animales, así como lugar de paso para otras.
Jardín del desierto. -Jardín del desierto: la vegetación que alberga este sitio, está representada por plantas que se han adaptado a vivir en regiones que reciben pocas lluvias, desiertos y semidesiertos, ecosistemas que se caracterizan por su aridez. Entre las principales familias botánicas de estos ecosistemas que se encuentran en la colección, están: Cactácea, Crasulácea, Aizoácea, Liliácea, Euphorbiaceae, Asclepiadaceae, Chenopodiaceae y algunas leguminosas
Jardines del Orquideorama.- bajo el techo de esta estructura arquitectónica, lo mismo que en sus alrededores, está dispuesto una exhibición permanente de diversas colecciones vivas, como orquídeas, bromelias, plantas carnívoras, cuernos, helechos arbóreos, entre otras especies. En el interior del orquideorama se encuentra un pequeño lago, con vegetación propia de ese tipo de ecosistemas, y áreas amplias para la organización de exposiciones temporales de plantas, como las anuales Expoheliconias (principios de diciembre) y Orquídeas, pájaros y flores (agosto), ésta organizada por la Sociedad Colombiana de Orquideología.
Huerto medicinal. – este tipo de colecciones posee una larga historia, la misma de los jardines botánicos. Este huerto incluye plantas a las que se les reconocen valores curativos, lo mismo que ejemplares de plantas consideradas mágico- religiosas, hierbas aromáticas, especias y condimentos. Sobrevivientes en una visión antropológica y cultural, están la coca y el yagé, plantas sagradas de los aborígenes americanos, que todavía hoy constituyen parte sustancial de su cotidianidad, elemento de rituales y tradiciones.
Patio de las azaleas. – en los alrededores y plazoleta central se encuentran diferentes especies de azaleas y bifloras. Estos arbustos de la familia Ericácea, florecen casi todos los meses del año y se destacan sus cálidos colores como el rosado, rojo, naranja, amarillo, púrpura y blanco.
Jardín vertical del Teatro Suramericano. – como prueba piloto en la utilizando de una técnica innovadora de siembra, el equipo de arquitectos y biólogos desarrolló un muro vegetal de 8.52 m de altura, en el que crecen diferentes especies de orquídeas, arbustos y coberturas. Las plantas se establecen en un sustrato natural y requieren de permanente riego. El secreto de este jardín está en la capacidad que tiene la naturaleza para crecer en todo tipo de condiciones.
La casa de las mariposas. – para poder hacer una adecuada conservación de un grupo de organismos como las mariposas se dispuso de una amplia colección de plantas. Estos insectos establecen una interacción biológica con las especies vegetales, pues todo su proceso vital está directamente relacionado con el ambiente que las rodea. Las plantas de este lugar sirven a las mariposas como fuentes de alimento, por su alto contenido de néctar y como hospedero para poner huevos o posarse. Además, se establecieron hierbas, árboles, arbustos y lianas nativas de bosques tropicales.
Restaurante: como parte de la ambientación que rodea el Restaurante In Situ están las eras o huerta de especias y plantas comestibles. Esta colección cuenta con especies como romero, cebollín, albahaca, ají, menta, tomillo, orégano.
Laberinto. – es una de las zonas predilecta de los niños para juegos y exploración de la naturaleza. El laberinto es un conjunto de arbustos de Thunbergia erecta que se entrelazan para formar pequeños senderos, las plantas ubicadas allí alcanzan muy buena altura.
Espacios arquitectónicos y urbanísticos
El proceso de renovación desarrollado entre los años 2005 y 2007, estableció las necesidades de intervención en la infraestructura del Jardín, indicando qué estructuras deben ser renovadas, demolidas o construidas. Como consecuencia de la crisis económica que la institución vivió antes de esas fechas, sus edificaciones se encontraban seriamente deterioradas, algunas de ellas inclusive amenazaban ruina, poniendo en peligro el bienestar de las personas que permanecían en el Jardín. Para el cumplimiento de las actividades cotidianas del Jardín, algunas construcciones resultaban inapropiadas, pues a pesar de ocupar una huella suficiente en el terreno, su diseño dificultaba la eficiencia en la operación. Algunas dependencias del Jardín debían cruzar hasta 100 metros a la intemperie para hacer una llamada de larga distancia, por ejemplo.
Se definieron entonces los principios que regirían la renovación arquitectónica y urbanística del Jardín, los presupuestos y cronogramas de las obras a realizar, lo mismo que los arquitectos que se encargarían de los diseños, según su especialidad. Un equipo de base, dirigido por el Arquitecto Nicolás Hermelin y el Ingeniero Civil Juan Diego Mesa, se encargó de coordinar la totalidad de las obras, excepto las relacionadas con el espacio público.
Además de las edificaciones, se llevó a cabo la actualización y mejoramiento de las redes eléctrica, hidrosanitaria, de voz y datos, el sistema de senderos, el amueblamiento, el pozo de aguas subterráneas y otros elementos complementarios, que no habían sido intervenidos desde la fundación del Jardín Botánico.
Edificio científico. -Por primera vez el Jardín Botánico de Medellín cuenta con un espacio diseñado específicamente para desempeñar la misión que le concierne. Gracias a un aporte de 3.500 millones de pesos del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, que como nuevo Socio Activo de la institución se vinculó al proceso de renovación impulsado por la Alcaldía de Medellín durante los años 2005 al 2007, nuestra entidad tiene ahora un Edificio Científico, corazón y cerebro del quehacer del Jardín Botánico.
Hasta el comienzo del proceso de renovación, el funcionamiento del Jardín Botánico se adaptó a espacios construidos con otros fines. Debido a lo anterior, se tenían pequeñas oficinas, sin posibilidades de ampliación, dispersas por todo el Jardín, con distancias de hasta 400 metros entre ellas. Esta condición, sumada a las características inapropiadas de cada lugar y a las condiciones estructurales y de humedad existentes, producto de la crisis financiera e institucional que afectó a la entidad, dificultaba seriamente el desarrollo de las actividades relacionadas con el funcionamiento cotidiano del Jardín Botánico. Además, el Herbario, protector de uno de los patrimonios florísticos más importantes del país, carecía de un espacio idóneo para preservar la colección de muestras botánicas y desempeñar sus tareas científicas. Durante muchos años, la colección fue trasladada de un sitio a otro, según fueran resultando espacios disponibles en la planta física del Jardín. Por todo esto, la recuperación de estas estructuras costaba más que construirlas nuevamente.
Edificio científico. -Se impuso entonces la necesidad de diseñar un espacio que concentrara a todo el personal del Jardín en un sitio único, de manera que se optimizara la operación, con las especificaciones óptimas de funcionamiento.
La edificación fue construida respetando el patrimonio natural del Jardín Botánico, en la zona donde menos se afectaban los árboles, ya que esta fue la única edificación del proceso de cambio que utilizó una huella nueva en el territorio. Para ello se trasplantaron algunos individuos arbóreos, que ahora hacen parte del entorno del edificio.
El Jardín Botánico exigió al arquitecto que el diseño implicara el mayor aprovechamiento de la luz natural y un manejo climático de las zonas de oficina del edificio, sin que deba recurrirse a equipos de aire acondicionado (excepto en el Herbario), para reducir el consumo de energía eléctrica. Con ese fin, el arquitecto Óscar Mesa contó con la asesoría bioclimática de Alberto Arango Johnson. El manejo de las corrientes de aire, la coloración del vidrio de fachadas, la presencia de vegetación interior y exterior, así como la localización de espejos de agua perimetrales, son factores que inciden en el control de la temperatura del edificio.
El edificio, construido en un tiempo récord de cinco meses, fue inaugurado el 1 de noviembre de 2007. En él funcionan la Biblioteca Botánica Andrés Posada Arango, el Grupo de Silvicultura y Paisajismo, el Área de Educación y Recreación, la Coordinación de Viveros, el Servicio de eventos y banquetes, y el Área Administrativa del Jardín Botánico.
Pero el verdadero epicentro del edificio será el Herbario JAUM (así es identificado internacionalmente), que cuenta aquí con un espacio diseñado a la medida para la identificación taxonómica de material vegetal. En el edificio está también el laboratorio, que permite desarrollar las investigaciones requeridas por los programas de conservación y de aprovechamiento de nuestros recursos florísticos. El Jardín trabaja para conseguir los equipos que requiere para dotar estos espacios en forma apropiada, de manera que el equipo de trabajo pueda adelantar estudios acerca de fisiología vegetal, fitoquímica, bromatología, etnobotánica, genética y biotecnología.
Orquideorama. Construido sobre la huella del anterior, el nuevo Orquideorama José Jerónimo Triana, fue resultado de un concurso de ideas arquitectónicas, realizado directamente por el Jardín Botánico a finales del año 2005. El jurado, conformado por los arquitectos Dicken Castro, Giancarlo Mazzanti y Leonardo Álvarez, el entonces Secretario Privado de la Alcaldía, David Escobar Arango, y la Directora del Jardín Botánico, Pilar Velilla, eligió la idea presentada por el grupo conformado por Plan B y JPRCR. Estas oficinas reúnen a los arquitectos Alejandro Bernal, Felipe Mesa, J. Paul Restrepo y Camilo Restrepo, todos ellos antioqueños.
El jurado destacó, entre otros criterios, “el planteamiento de una idea contundente, capaz de convertirse en un nuevo símbolo para la ciudad, y la capacidad de involucrar los referentes naturales, con gran habilidad para la abstracción y calidad estética”.
Este jardín cubierto, ideal para la exposición permanente y temporal de flora, fue construido originalmente para la inauguración del Jardín Botánico en 1972. Su nombre rinde homenaje a José Jerónimo Triana, botánico colombiano, hijo de españoles, nacido en Bogotá el 22 de mayo de 1828, un personaje multifacético, que se desempeñó también como editor y escritor, fue naturalista, médico, químico e investigador y cónsul de Colombia en París, ciudad donde murió a los 62 años de edad, el 31 de octubre de 1890.
La catleya, orquídea considerada flor emblemática de nuestro país, honra también a este personaje con su nombre científico, Catleya Trianae. Por más de treinta años, el anterior Orquideorama albergó todo tipo de eventos sociales, académicos, empresariales, políticos y recreativos, convirtiéndose en el epicentro de las actividades del Jardín y también de muchas organizaciones de la ciudad. El paso del tiempo deterioró su infraestructura e hizo poco práctico el espacio.
El nuevo Orquideorama conservó la esencia y el nombre del anterior. La estructura fue construida en seis meses, y se inauguró el 25 de agosto de 2006. Por su belleza y por ser el primer componente entregado a la comunidad, se convirtió en símbolo del proceso de renovación del Jardín Botánico.
Su diseño plantea una relación entre arquitectura y organismos vivos. En concepto de los arquitectos, el nuevo espacio integra lo natural y lo artificial, en una organización material, ambiental y espacial particular, cercana a los procesos de la vida, con leyes y patrones geométricos flexibles (como los de un panal), a partir de un módulo repetitivo al que llamaron “árbol-flor”. Tan ejemplar como su diseño fue su proceso de construcción, gracias a un comprometido equipo de especialistas, técnicos y obreros, quienes asumieron esta empresa con emoción, logrando un trabajo artesanal único. Desde su culminación, la nueva estructura, se configuró en uno de los diseños arquitectónicos más representativos de Medellín y en un ejemplo de arquitectura local con carácter internacional. En el 2007 ganó dos categorías del premio de diseño Lápiz de Acero, como reconocimiento al proyecto más innovador.
Su inauguración estuvo cargada de mensajes con los cuales la Alcaldía y el Jardín Botánico quisieron simbolizar que este componente, como los demás que se derivaron del proceso de renovación, fueron concebidos para el servicio de toda la comunidad, como un aporte a la educación integral de los medellinenses y a la generación de espacios públicos de alta calidad. Para ello, los primeros en ingresar fueron mil niños y niñas de 5 y 6 años de edad, quienes protagonizaron una fiesta con música hecha a partir de instrumentos construidos con elementos reciclados y cortaron la cinta con el Alcalde de entonces, Sergio Fajardo. Luego se llevó a cabo un acto simbólico de entrega a la comunidad académica, empresarial, ambiental, educativa, líderes comunitarios, dirigentes y vecinos, entre otros. El sábado 26 de agosto, en compañía del Parque Explora, se realizó la inauguración académica, con el colombiano Cristián Samper, en ese momento Director del Museo Nacional de Historia Natural del Instituto Smithsonian en Estados Unidos, quien ofreció una conferencia magistral gratuita en el nuevo Orquideorama, acerca del papel de los jardines botánicos en la conservación mundial de la flora. Así representamos el lugar relevante que ocupan las ciencias y la educación ambiental en el renovado Jardín Botánico de Medellín, siempre bajo la óptica del disfrute y el acceso a todos, no sólo a los especialistas.
Conjunto Patio de las Azaleas.-. El proceso de renovación del Jardín tuvo como premisa el respeto por espacios arquitectónicos y paisajísticos que pudieran recuperarse y conservaran una memoria histórica para la ciudad. El claustro que conforma la edificación, se renovó, enriqueciendo además la colección de azaleas, con lo cual creamos un refugio acogedor y versátil para el encuentro, el reposo y la realización de eventos múltiples de pequeño formato.
Auditorios..- A partir de la remodelación de algunos y la construcción de otros, el Jardín Botánico cuenta con cinco salones distintos, con ambientes diferentes, habilitados para desarrollar todo tipo de encuentros académicos, empresariales, sociales o culturales. El uso intensivo que públicos diversos hacen de estos espacios, así como su carácter polifacético, convierten a los auditorios en lugares de impacto que resaltan el crédito de quienes los hagan viables. El conjunto de auditorios, situado en el Edificio Patio de las Azaleas, está conformado por los siguientes espacios:
. Salón Restrepo. Capacidad: 300 personas dispuestas en auditorio.
. Auditorio Uribe Ángel. Capacidad: 100 personas. Mobiliario fijo.
. Salón Humboldt. Capacidad: 200 personas.
. Salón Linneo. Capacidad: 50 personas.
. Salón Mutis. Capacidad: 150 personas.
Restaurante In Situ. Está ubicado en el Edificio Patio de las Azaleas, próximo a la laguna. Esta edificación fue diseñada por el arquitecto Santiago Caicedo, reconocido en el país por sus trabajos excepcionales en el tema de restaurantes, hoteles y sitios similares. Creamos un restaurante de género casual elegante, donde se podrá disfrutar de una original carta basada en la grandeza de nuestra flora colombiana, sin que sea un restaurante vegetariano. Tiene un ambiente contemporáneo y cálido, donde la presencia de la naturaleza y las delicias del menú propician una experiencia memorable para los comensales.
Teatro Suramericana.- Un espacio armónico con la naturaleza. Así será el nuevo teatro al aire libre, que lleva el nombre de la empresa que patrocina la construcción de este lugar de encuentro y recreación: Suramericana.
En medio de la zona de grama, surge una plataforma, a manera de meseta, en cuyo interior se sitúan los baños, de diseño alegre y contemporáneo. En la parte superior un deck en madera será el escenario, con el respaldo de una gran pared vegetal, el mejor fondo para la presentación de todo tipo de espectáculos.
Y como complemento, el espacio “tras bambalinas” se configura como un hermoso y acogedor parque, propicio para la realización de pequeños eventos culturales diversos o como zona de apoyo de los actos que se presenten en el Teatro Suramericana, como conciertos, lecturas, bazares, entre otros.
Biblioteca del Jardín Botánico..- Especializada en la materia, fue creada con el propósito de servir de apoyo a la investigación científica de la flora de Colombia. En 1978 fue fortalecida para ampliar sus servicios y enriquecer sus colecciones, con textos académicos que permiten las consultas de la población escolar circunvecina. Así, la biblioteca logra atender a públicos neófitos, aficionados o profesionales, incluyendo en sus servicios programas de todo tipo. Como respaldo, esta área cuenta con el apoyo de varias redes institucionales, como el Grupo de Unidades de Información Especializada –GUIE-, el Grupo de Bibliotecas Escolares y Públicas de Medellín y el Área Metropolitana y el Grupo de Servicios al Público de las Unidades de información.
Jardín botánico de Quito. Ecuador
El Jardín Botánico de Quito es un Parque, jardín botánico, arboreto e invernaderos de 18.600 metros cuadrados que está previsto aumentar, alberga especies de plantas del país (Ecuador está entre los 17 países más ricos del mundo en especies botánicas nativas, un estudio actualizado sobre la flora ecuatoriana clasificada, determina la existencia de 17.000 especies), que se encuentra en la ciudad de Quito, Ecuador.
El código de identificación del Jardín botánico Quito como miembro del «Botanic Gardens Conservation Internacional» (BGCI), así como las siglas de su herbario es QUITO.
El clima de la ciudad corresponde al clima subtropical de tierras altas; Quito se divide en 3 zonas; sur, centro, y norte; donde el sur es el lugar más frío de la ciudad porque es la zona más alta, el centro es caliente; donde se dan siempre las temperaturas más altas, y el norte es templado. El clima de Quito se divide en 2 estaciones o etapas; el invierno con un período de lluvias prolongado y una estación seca de cuatro meses donde se presentan las temperaturas más altas. Quito siempre tiene un clima templado con temperaturas que van desde los 10º a los 27º grados centígrados.
Este jardín botánico surge en 1989, gracias a un convenio suscrito entre el Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales, el Club de Jardinería y el Municipio de Quito por el que se convirtió el antiguo vivero municipal del Parque de la Carolina, en un jardín botánico.
Con el objetivo de garantizar la eficiencia administrativa de esta entidad, se gestionó en junio de 1991 la creación de la Fundación Botánica de los Andes, cuya misión es la de gestionar y llevar a cabo acciones directas para el conocimiento, protección y conservación de la flora ecuatoriana.
Nuestra botánica de numerosas especies de plantas tanto ecuatorianas, como de otros países junto con algunas especies de aves y donde el agua, corre abundantemente por riachuelos y cascadas.
Entre sus colecciones que se distribuyen a lo largo de senderos de paseo:
Plantas de los humedales, -Bosque nublado, -Plantas del páramo, tal como las almohadillas de páramo, que invitan a recostarse en esos suaves y verdes colchones, ¡pero ojo!, son almohadillas llenas de agua.
Orquideario dispuesto en 2 Invernaderos, donde se albergan las orquídeas de altura y las tropicales. En estos se encuentran las orquídeas dispuestas sobre las piedras, el suelo o en troncos de árboles, tal como sucede en la naturaleza.
Plantas medicinales, tal como el guanto o floripondio, una especie conocida como la flor del Inca y que se creía podía ahuyentar los malos espíritus, la cascarilla o quina, (el remedio para la malaria).
Frutales nativos e introducidos, en proyecto que será planificado de acuerdo con los colegios de la zona.
Invernadero hidropónico de rosas, este aún en proyecto para un futuro próximo.
Jardín Etnobotánico Nugkui.-Perú
El Jardín Etnobotánico Nugkui es un jardín botánico de una extensión de unas 7 hectáreas ubicado en Santa María de Nieva, Provincia de Condorcanqui, Perú.
En la tradición Aguaruna y Huambisa, «Nugkui» (pronunciado por los nativos «Nugkuí») es un espíritu que habita bajo la tierra y que enseñó la agricultura a las mujeres de la tribu.
Tiene lazos de cooperación con el Latín American Ethnobotanical Garden de la Universidad de Georgia, Estados Unidos.
Presenta trabajos para la Agenda Internacional para la Conservación en los Jardines Botánicos.
El código de identificación del Jardín Etnobotánico Nugkui como miembro del «Botanic Gardens Conservation Internacional» (BGCI), así como las siglas de su herbario es NUG.
Este jardín está hermanado jardín con el Latin American Ethnobotanical Garden, con el fin de reunir los conocimientos para la conservación y desarrollo de los recursos de la selva de las tierras altas del río Marañón, con una perspectiva técnica adaptada a la referencia fundamental de los remedios vegetales de la medicina tradicional de los pueblos Aguaruna y Huambisa, de la familia etnolingüística Jíbaro.
Como parte del «Centro Cultural Tunaants», el jardín también tendrá más adelante un zoológico de recuperación de especies animales, una zona de viveros forestales y un orquideario.
Los colaboradores del Latin American Ethnobotanical Garden de la Universidad de Georgia, son miembros del Vicariato Apostólico San Francisco Javier del Marañón, una organización confesional de los sacerdotes jesuitas y representantes indígenas de las naciones Aguaruna y Huambisa.
Hay que hacer hincapié en el valor de los conocimientos tradicionales en la biodiversidad y el uso de las reliquias y el patrimonio natural para la conservación cultural de los paisajes sagrados de la naturaleza.
El proyecto que está en marcha trabaja en tres frentes:
Cultivo y producción de plantas,
Árboles maderables para la reforestación: caoba (Swietenia macrophylla), cedro (Cedrela odorata), chonta (Bactris gasipaes), chuchuhuasi (Maytenus macrocarpa), copaiba (Copiafera paupera), poma, árbol de sangre (Croton lechleri), palo de cruz (Brownea ariza), cocobolo (Andinoacara pulcher), quinilla (Manilkara bidentata), asarquiro, palo de rosa (Aniba rosaeodora), quilloscapi, quillocisa, chilca brava, yngaina.
Palmetum, colección de palmeras de las que utilizan los pueblos Aguaruna y Huambisa en su alimentación, tejidos o en la construcción de sus casas y que tienen una gran importancia en sus culturas, así para hacer dardos de cerbatana se utiliza Phytelephas chambira, y Oenocarpus bataua, en los techos de las casas hojas de Phytelephas macrocarpa o de diversas especies de Geonoma ssp., para las fibras que utilizan en sus tejidos las sacan de Astrocaryum chambira, o que las hojas de Pholidostachys synanthera las utilizan para envolver sus alimentos cuando los cocinan y darles sabor. Asi mismo en la tradición oral Huambisa hay una palmera que marca el inicio y el fin del año la «pijuayo» (Bactris gasipaes)
Especies productoras de frutas, lúcuma (Pouteria lucuma), aguaymanto (Physalis peruviana), camu-camu (Myrciaria dubia), pomarrosa (Syzygium jambos),
Plantas Medicinales: copaiba (Cocainera langsdorffii), sachindaso, hojé (Ficus insipida), caña agria, quinaquina, zarzaparrilla, alolva, piñón, ancusacha, bolsamullaca, atapí, la liana ojo de vaca (Mucuna rostrata), chinchirilla.
La cultura nativa y su cosmovisión (relación de los mitos y la selva)
La educación (nuevos modelos de educación ambiental de la selva).
Museo y Jardín Botánico Profesor Atilio Lombardo. -Uruguay
El Museo y Jardín Botánico Profesor Atilio Lombardo se encuentra ubicado en el Barrio Prado, ciudad de Montevideo, Uruguay, donde también es conocido simplemente como Jardín Botánico. Depende administrativamente de la Intendencia de Montevideo.
Funciona como centro de información y formación sobre botánica, así como centro de actividades científicas. Promueve el conocimiento y apreciación de plantas nativas del Uruguay y de otras regiones del mundo, uno de sus objetivos es divulgar el conocimiento de la botánica y las ciencias relacionadas haciéndolas más accesibles para el público en general.
Es un referente permanente en temas de botánica y manejo de áreas verdes en espacios públicos de todo el país, así como en la conservación de ecosistemas naturales y sus plantas nativas. Su Herbario es objeto de frecuentes visitas de investigadores extranjeros.
El código de identificación internacional del Museo y Jardín Botánico Profesor Atilio Lombardo como miembro del «Botanic Gardens Conservation International» (BGCI), la sigla de su herbario es MVJB.
El Jardín Botánico de Montevideo fue diseñado por el paisajista francés Carlos Racine, con el impulso de José Arechavaleta, quien tuvo la idea de realizar el parque, Cornelio Cantera quien donó el primer conjunto de plantas autóctonas y Daniel Muñoz, quien motivó a la opinión pública para apoyar el proyecto.
Fue fundado el 17 de abril de 1902, con una extensión de poco más de una hectárea. El predio se amplió incorporando áreas pertenecientes al vivero municipal y luego se anexaron terrenos por expropiación y donaciones.
En 1916 fue creada su Escuela de Jardinería, orientada a la formación de funcionarios municipales y desde 1986 se extendieron diferentes tipos de cursos para público en general.
El profesor Atilio Lombardo lo dirigió desde 1940 hasta 1973, organizando las colecciones e incrementando en gran medida el Herbario.
El ingeniero agrónomo forestal Carlos Brussa es su actual director. Desde 1985 hasta la actualidad, la ingeniera agrónoma Liliana Delfino Roure, es la curadora del Herbario.
El Jardín Botánico tiene unos 1000 taxones, está especializado en plantas nativas de Uruguay, pero además tiene también numerosas plantas de otras partes del mundo.
Se encuentran agrupadas por su parentesco botánico en clases, órdenes y familias; por sus lugares de origen y por sus exigencias ecológicas de acuerdo a las condiciones del medio. La mayoría de las especies cuentan con identificación en cartelería donde se detalla el nombre científico y el nombre común, el área de ocurrencia natural y la familia botánica.
Entre sus colecciones vivas destacan:
Colección de palmeras. Con seis especies diferentes (Syagrus, Butia, Butia capitata, Butia yatay, Butia paraguayensis, Trithrinax, Trithrinax campestris y Trithrinax brasiliensis) y un híbrido natural (Butyagrus) como integrantes del conjunto de plantas autóctonas del país.
Algunas de las especies más características del jardín:
Heteropterys dumetorum (Grseb) Nied. Enredadera de la mariposa arbusto trepador de flores amarillas, de los bordes de los ríos. Presente en Argentina, Bolivia, Brasil, y Uruguay.
Rhodophiala bifida (Herb.) Traub Azucenita roja planta bulbosa de flores rojo oscuro. Crece cerca de los ríos en Argentina (provincia de Buenos Aires) y Uruguay.
Tillandsia arequitae (André) André ex Mez – Clavel del aire de Arequita, planta epifita. Se desarrolla en la superficie de las rocas, en el Departamento de Lavalleja. Endemismo de Uruguay.
Erythrina crista–galli var. leucochlora Lombardo. Ceibo de flores blancas. Se encuentra en pantanales y bordes de cursos de agua. Endemismo de Uruguay.
Habranthus gracilifolius Herb. Azucenita, planta bulbosa pequeña de flores rosas, se encuentra en la zona de la provincia de Buenos Aires y en Uruguay.
Cuenta también con un conjunto de colecciones específicas de plantas según diferentes ambientes tales como: xerófilas, acuáticas, tropicales, esciófilas (plantas de sombra) y dos colecciones temáticas vinculadas a plantas medicinales y gramíneas y plantas graminiformes.
El museo. -En el edificio central, a metros de la entrada por la Av. 19 de abril, se encuentra el Museo Botánico que constituye un complemento documental para el estudio del jardín. Cuenta con una serie de paneles didácticos que ilustran diversos aspectos de la fisiología vegetal y una completa biblioteca especializada que reúne obras de consulta y publicaciones periódicas de instituciones afines.
En su herbario reúne muestras secas de especies silvestres y cultivadas, clasificadas y ordenadas por familias de acuerdo con las normas científicas establecidas. Formado por las muestras colectadas por el Prof. Atilio Lombardo por duplicado y muestras obtenidas por otros investigadores y técnicos de la Institución. Cuenta con una colección carpológica de la que se exhiben semillas y frutos secos de una gran variedad de especies.
Jardín botánico de Caracas. -Venezuela
El Jardín Botánico de Caracas (JBC) o Jardín Botánico de la UCV es un sitio de Patrimonio Cultural de la Humanidad que forma parte de la Ciudad Universitaria de Caracas, sede de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Posee una extensión de 70 hectáreas y está administrado por la Fundación Instituto Botánico de Venezuela (FIVB). Su código de reconocimiento internacional como institución botánica, así como las siglas de su herbario, es VEN.
En el año 1945, se inició un intenso trabajo científico de reforestación y plantación de árboles exóticos en terrenos de la antigua hacienda Ibarra para dar vida al Jardín Botánico de la UCV bajo la dirección del Dr. Tobías Lasser, apoyado por el horticultor suizo, August Braun y el jardinero venezolano Pedro Naspe. Abierto al público en 1958, este fue el primer jardín botánico del país y formó parte del proyecto original de la Ciudad Universitaria de Caracas. Además de albergar el Herbario Nacional, el Instituto Botánico de Venezuela y una amplia colección de arte, el jardín fue nombrado conjuntamente con la ciudad universitaria como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO el único en su tipo junto al Real Jardín Botánico Kew de Londres. El 30 de octubre de 1969 la Universidad Central de Venezuela es allanada por el gobierno de la época, incluyendo el jardín botánico, pasando este a ser «Parque nacional» dependiente del Ministerio del Ambiente, para luego en 1991 convertirse en una fundación. A partir del 20 de diciembre de 2000 mediante decreto presidencial se incorpora el Jardín Botánico a la Ciudad Universitaria, bajo la figura de la Fundación Instituto Botánico de Venezuela (FIVB) adscrita a la UCV. Desde entonces su mantenimiento y control está bajo su responsabilidad.
El Jardín Botánico de Caracas cuenta con más de 2.500 especies que corresponden a unas 200 familias botánicas, de las cuales el 50 % son de Venezuela, proviniendo el resto de Centroamérica, África, la India y otras regiones de Asia y Suramérica.
De sus 70 hectáreas, 15 de ellas tienen unas determinadas zonas donde se encuentran las plantas distribuidas por sectores, las 55 hectáreas restantes, se han reforestado y se han dedicado como bosque autóctono preservado.
El Palmétum de la UCV o Palmétum del Jardín Botánico de Caracas y alternativamente Palmetum del Jardín Botánico de la UCV es un espacio protegido que se encuentra ubicado dentro de los terrenos de la Universidad Central de Venezuela, específicamente dentro del Jardín Botánico de Caracas, en el Municipio Libertador, al oeste del Distrito Metropolitano de Caracas y al centro norte del país sudamericano de Venezuela.
Contiene una colección de 215 palmeras de diversas especies tropicales, 3 variedades y 88 géneros entre las que se incluyen la Pándanos (Pandanus sp.), palma Carabobo (Cardulovica sp.), palma sagú (Cycas sp.) y palma del viajero (Strelitzia sp.) que están rodeadas por dos lagunas artificiales, el Jardín Etnobotánico, la Plaza del Jardín Paleozoico, el Jardín Xerofítico al sur del edificio principal del Instituto Experimental Dr. Tobías Lasser y a un costado de la Autopista Francisco Fajardo una de las más importantes de la capital venezolana.
Otras variedades incluyen Archontophoenix alexandrae, Phoenix reclinata, Livistona chinensis, Chamaedorea radicalis y Phoenix dactylifera. Entre las especies foráneas se incluyen Corypha, Latania, Brahea y Cyphophoenix, mientras que entre las especies locales o nativas encontramos a Roystonea oleracea, Mauritia fleuxosa y Euterpe oleracea.
Como parte de la Ciudad Universitaria de Caracas es patrimonio mundial de la Humanidad de la Unesco desde el año 2000.
De los sectores existentes, son de destacar: -Laguna Principal. -Senderos de Interpretación. -Orquideario. -Bosque Húmedo Tropical. -Laguna Venezuela. -Jardín Xerofítico
Palmeto, es una de las colecciones de Palmas más importantes de Latinoamérica, albergando unos 4.000 ejemplares de unas 250 especies. -Zingiberales. -Bromeliario. -Aráceas. -Zona didáctica recreacional. -Jardín Económico. -Arborétum
Equipamientos y Actividades
Dentro del Jardín Botánico de Caracas se encuentran:
Fundación Instituto Botánico de Venezuela. Dr. Tobías Lasser (FIBV), cuyo principal objetivo es el de realizar y promover la investigación botánica en el país, el inventario y conservación de la flora venezolana y la educación ambiental en todos los ámbitos.
Biblioteca Henri Pittier, sus inicios datan de 1920, y es una biblioteca especializada en temas botánicos, especialmente en taxonomía.
Herbario Nacional de Venezuela, fue fundado por Henri Pittier10 en 1921, actualmente posee 400.000 especímenes que lo colocan como el mayor herbario y la referencia más completa de flora de Venezuela.
Auditorio: Cabe destacar que dentro del edificio principal existe un Auditorio, con capacidad para trescientas personas, excelente acústica y equipos audiovisuales con tecnología de punta. En las adyacencias del Auditorio están ubicadas dos terrazas, área delimitada, ventilada y adornada por los jardines interiores que brindan luz y color a su alrededor, con murales de Wilfredo Lam.
Además de las actividades de recreación como paseos dirigidos, campamentos y excursiones, también se realizan actividades de relajación como yoga, tai chi, meditación, además de constituir un importante centro de apoyo para los estudiantes y profesores de Biología, Farmacia y escuelas afines.
Jardín Botánico Andrómeda. -Barbados
El Jardín Botánico Andrómeda, Andrómeda Botanic Gardens es un jardín botánico de 2,43 hectáreas de extensión, que se encuentra en la Parroquia de Saint Joseph en Barbados. Este jardín botánico es miembro del Botanic Gardens Conservation International. Su código de identificación internacional como institución botánica es ANDRM.
El Jardín Botánico Andrómeda es junto al Flower Forest uno de los más bellos jardines de la isla. Nombrado por la figura de Andrómeda, perteneciente a la Mitología griega. Comenzó como una colección privada de plantas alrededor de la casa de Iris Bannochie, una sobresaliente experta en horticultura de la isla.
Iris Bannochie fundó el jardín en 1954 en la tierra propiedad familiar desde 1740, exhibiendo las plantas existentes en Andrómeda junto con las de la sociedad « Barbados Horticultural Society » que habían participado en numerosas ocasiones en la exhibiciones florales del « RHS Chelsea Flower Show » en Londres.
Andrómeda fue abierto al público por primera vez durante una fiesta benéfica para la obtención de fondos organizada por la « Barbados Horticultural Society » (Sociedad Hortícola de Barbados) en los años 70. El Andrómeda fue bien recibido, y ha seguido estando abierto al público pagando una tarifa de entrada desde entonces.
Cuando la reina Íngrid de Dinamarca visitó el jardín en 1971, le fue servido un refrigerio en un recién construido gazebo que domina una vista del mar.2
En 1990, el jardín tenía 40.000 visitantes. El Jardín Botánico Andrómeda es actualmente propiedad del «Barbados National Trust» y alquilado su mantenimiento al «Perseus Inc». La University of the West Indies (UWI) (Universidad de las Indias Occidentales), es la responsable de las actividades educativas y de investigación en Andrómeda. Las actividades de la universidad fueron programadas por la fundación Peter Moores del Reino Unido.
Colecciones de árboles, arbustos, plantas ornamentales y frutales tropicales con más de 600 especies de plantas dispuestas entre cascadas, estanques, arroyo, agrupadas como:
Colección de cactus,.-Colección de orquídeas,.-Palmeras, en 1991, el «palm garden» contenía más de 60 diferentes especies de palmeras. Digna de mención es la gran «Palmera de Ceilán» (Corypha umbraculifera) uno de los mayores especímenes en el mundo.
Plantas de humedales, en el centro del jardín superior, cerca de unos lirios de agua hay un majestuoso baniano..-Plantas medicinales.-Plantas xerófitas
Entre las especies destacan: Artocarpus communis, Ficus citrifolia, Zingiber officinale, Ravenala madagascariensis, Artocarpus heterophyllus, Pandanus utilis, Senna alata,
Entre los géneros de plantas destacan por su representación Begonia, Bougainvillea, Croton, Hibiscus, Heliconia, Bromelia,
También hay una biblioteca, aulario, cafetería y tienda de regalos.
El programa educativo del «Andrómeda Botanic Gardens» está elaborado en coordinación con el Departamento de Ciencias Químicas y Biológicas de la Universidad de las Indias Occidentales.
Jardín botánico de Matanzas.-Cuba
El Jardín Botánico de Matanzas es un jardín botánico de 10 hectáreas que se encuentra en Matanzas, Cuba.
Es uno de los jardines botánicos que forman parte de la red del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente encaminado a brindar información sobre los ecosistemas regionales de Cuba.
El código de identificación del Jardín Botánico de Matanzas en el «Botanic Gardens Conservation International» (BGCI) así como las siglas de su herbario es MATAZ.
La idea de este centro científico germinó en 1978, mediante iniciativa de la doctora Ángela T. Leiva Sánchez entonces directora del Jardín botánico Nacional de Cuba en La Habana, la que fue recibida y desarrollada, con el beneplácito y apoyo de la dirección del Gobierno provincial.
La incansable labor de Ángela Leiva la llevó a integrar importantes organizaciones, entre ellas, la Academia de Ciencias de Cuba; la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Jardines Botánicos; la International Association of Botanic Gardens, y en el momento de su deceso desempeñaba la labor de coordinadora de la Red Cubana de Jardines Botánicos.
El Jardín Botánico de Matanzas forma parte de los 13 existentes de su tipo en Cuba posee más de 800 especies entre plantas medicinales y aromáticas, cactus y suculentas, citrus, así como plantas ornamentales para jardinería.
Con énfasis la flora cubana de la provincia, alberga especies vegetales endémicas y nativas de Cuba estableciendo estrategias de conservación para especies amenazadas de la flora de Matanzas tal como el Melocactus matanzanus y Coccothrinax borhidiana. Propagación mediante semillas de las especies Acacia daemon, Dendrocereus nudiflorus, Harrisia eriophora, Guettarda undulata y Zamia integrifolia.
Entre sus variedades existen componentes exóticos definidos como plantas no oriundas del país o de la región en que se encuentran, entre las que se encuentran cactus y suculentas, begonias, citrus. Y Herbario
Aún en construcción y proyectos de pronta ejecución se encuentran:
. -Centro de visitantes con su mirador, para otear todo el horizonte; la dirección. -Centro científico, con biblioteca, herbario y locales para la investigación. -Residencia científica. -Instalaciones socio administrativas necesarias.
Jardin Botánico del Instituto de Biología. -UNAM. -México
El Jardín Botánico del Instituto de Biología (UNAM) es un jardín botánico que se encuentra en la Ciudad de México, depende administrativamente del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Este jardín botánico es miembro de la Asociación Mexicana de Jardines Botánicos, A.C. y del BGCI, presentando trabajos « International Agenda for Botanic Gardens in Conservation »,
El código de identificación internacional del Jardín Botánico Medicinal como miembro del Botanic Gardens Conservation Internacional (BGCI), así como las siglas de su herbario es MEXU.2
El Jardín Botánico del Instituto de Biología de la UNAM fue fundado en 1959 por los botánicos Faustino Miranda y Manuel Ruíz Oronóz, con el apoyo de Efrén del Pozo, fisiólogo médico, quien entonces fungía como Secretario General de la UNAM.
Algunos años después de su inauguración, el jardín fue integrado al Instituto de Biología. Las primeras etapas de crecimiento estuvieron íntimamente ligadas al desarrollo de la botánica moderna en México. El Dr. Miranda, botánico y ecólogo tropical de origen español, formó un equipo de jóvenes entusiastas para realizar la colecta de ejemplares de plantas en todo el país, que incluyó a Ramón Riba, Arturo Gómez-Pompa y Javier Valdez, quienes años después se convirtieron en destacados especialistas de la botánica mexicana. Otros científicos ilustres que participaron en diferentes formas en el proyecto fueron Teófilo Herrera, Eizi Matuda, Otto Nagel, Helia Bravo, Francisco González Medrano, Hermilo Quero, Claudio Delgadillo y Mario Souza.
Desde el principio, su objetivo fue mantener una colección de plantas vivas representativa de la diversidad vegetal de México, la cual sirviera de apoyo a la investigación y la educación en Botánica. Desde las colectas iniciales de plantas para el jardín se puso énfasis en plantas raras o endémicas de las zonas tropicales y áridas del país y en familias botánicas como Agaváceas, Cactáceas y Orquídeas. Esto contribuyó a que en el presente el jardín resguarde en sus colecciones una gran proporción de las especies mexicanas amenazadas y en peligro de extinción
Entre las colecciones que alberga, son de destacar dos zonas diferenciadas:
El Jardín Botánico Exterior, donde se pueden recorrer las zonas árida y semiárida (desierto), la templada (bosque) y la cálido húmeda (selva) y
El Invernadero «Faustino Miranda» donde se mantiene un ambiente cálido húmedo con temperatura uniforme, y alta humedad, con una representación de la vegetación típica de las selvas húmedas mexicanas.
Las familias botánicas representadas:
Colección de Agavaceae, con 175 taxones de los cuales 109 taxa son del género Agave y 22 del género Yucca 22.-Nolinaceae con 30 taxones, de los que Dasylirion comprende a 14 taxones, -Cactaceae, con una colección de Opuntia, -Orchidaceae, -Pinaceae, -Arecaceae, y plantas de interés económico.
Jardín Botánico del Bosque de Chapultepec. -México
Inaugurado en octubre de 2006, el Jardín Botánico del Bosque de Chapultepec resguarda aproximadamente 400 especies de flora, como agaves, suculentas, plantas medicinales y plantas en peligro de extinción (exhibidas en el orquidiario, una estructura central blanca con mosaicos azules y rojos), 18 jardines que pueden ser de contemplación o de producción (de plantas medicinales o de chiles, por ejemplo) y un invernadero.
En este lugar se exhibe una buena parte de la biodiversidad del país, un entrañable espectáculo natural que invita a sus visitantes a conocer y valorar la importancia de temas agrícolas, botánicos y climáticos como parte de una educación ambiental. Además, en él se imparten talleres y se desarrollan prácticas ecológicas como Domingo Verde, actividad que promueve un estilo de vida saludable, y los Cursos de agricultura urbana sustentable impartidos por el Instituto de la Juventud de la Ciudad de México (INJUVE), con los que se incentiva la cosecha autogestiva.
Al ser el lugar de conservación botánica por excelencia, también fue designado para ser sede del Primer Festival de Flores y Jardines. Para la realización de este evento se acondicionaron siete jardines que expresaron distintos temas sociales y artísticos, además de tres exposiciones que reunieron a paisajistas, expertos en jardinería, horticultores, arquitectos y estudiantes.
Arma tu itinerario, recorre el Jardín Botánico y no dejes de estimular tus sentidos en espacios como el “Arboretum”, donde podrás abrazar a tu árbol favorito y sentir sus beneficios energéticos, o el “Jardín Sensorial” para que avives tu olfato con el aroma de las flores, deleites tu vista con sus colores y sientas la textura de las hojas mientras te relajas con el sonido de la fuente.
Textos y fotografías bajadas de internet. Los jardines visitados se señalizan con *.