Si sois observadores y os gustan los árboles habréis observado que algunos árboles plantados en las calles y plazas de la ciudad aparecen a pesar de los años que llevan plantados  un aspecto escuálido y raquítico , no los hemos visto prosperar desde su aparición en el paisaje urbano de la ciudad, nadie les hace caso, pasan los años y nadie se preocupa de ellos.

Las causas pueden ser múltiples desde una mala plantación, una mala calidad de la planta o del sustrato empleado con un  pH inadecuado, la compactación del terreno, el encharcamiento,, la insuficiencia de materia orgánica en el suelo, la ausencia de riegos adecuados etc.…

¿Tenemos que seguir contemplándolos así en el paisaje urbano o pueden ser recuperados si les aplicamos  unos mantenimientos adecuados ¿

Nos quejamos cada vez mas conscientemente de la falta de arboles en los alcorques vacíos de las calles ,plazas y jardines de la ciudad ,pero a estos famélicos estamos acostumbrados a verlos , no nos llaman la atención, estimamos que son así, no valoramos su lamentable estado.

Me refiero en esta ocasión a los naranjos de Plaza Nueva, de la Plaza Virgen de los Reyes ,Plaza de la Concordia.-del final de Almirante Lobo y del Paseo de Colón solo por citar algunos y a los que va dirigida esta suplica a quien corresponda.

Naranjos escualidos en Calle Betis

¿ Porque no intentamos recuperarlos ¿ Un análisis, una buena fertilización un buen abonado liquido con el agua de riego o abonado foliar, un buen tratamiento de las raíces, un tratamiento del  alcorque , una descompactacion del suelo etc.…hacer algo para que despierten de esta abulia que denotan y ofrezcan el mejor servicio en los lugares de la ciudad donde  han sido plantados.

Esta vez se citan naranjos del centro ,pero podemos trasladar la petición a muchos otros arboles de los barrios de la ciudad que se encuentran en iguales circunstancias.

Sobreviven con mucho esfuerzo,, están necesitados de ayuda para vivir dignamente.

He aquí la importancia de una buena plantación inicial, donde deben ofrecerse al árbol todos los elementos necesarios para su normal subsistencia.