
No son muchas las personas que conocen en Córdoba esta joya de la jardinería barroca, a pesar de que se la tiene muy cerca, en el paraje de la Alameda del Obispo, antes conocido como “Granja del Estado” donde actualmente se encuentran las instalaciones del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA) dependiente de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía. Por lo tanto, la administración autonómica es titular de los terrenos y responsable de su cuidado. Más aun teniendo en cuenta que en el año 2014 esta jardín fue inscrito en el Catálogo de Patrimonio Histórico Andaluz por su valor monumental y sus características singulares.
Construido alrededor del año 1770, ha venido manteniendo en buena medida su configuración original aunque ha experimentado diversas restauraciones a lo largo de los siglos. Circundado por un muro aventanado, se extiende por una superficie aproximada de 3.400 metros cuadrados y consta de una parte de jardín en crucero con una fuente central llamada Fuente de Tobías, una preciosa galería con pérgola de forja emparrada y lo que constituye la parte más especial de este conjunto: el jardín laberinto.
Se trata del único jardín de este tipo que se conservaba en Andalucía y el más grande de España, formado por setos de más de medio metro de anchura y altura cercana a los dos metros.

Y lo peor de todo es que en 2016 : el jardín laberinto había desaparecido. Fue talado, eliminado porque, al parecer, las plantas, en aquel entonces boneteros.-Evonymus japonicus se habían visto afectadas por hongos de suelo, ya que el especifico oídium Evonimi japonici de las hojas se mantiene como plaga en toda Andalucía.
. El río Guadalquivir pasa muy próximo y en las crecidas de los años 2010 y 2011 habían inundado el jardín dejando acumulada una capa de lodo donde proliferaron los hongos. Y estos sedimentos trajeron fitóftora (Phytophthora), cuya etimología es bien precisa: es una enfermedad fúngica que mata y que conviene prevenir a toda costa. Ataca a las raíces y el cuello de las plantas en suelos mal drenados o regados en exceso: la absorción del agua y los nutrientes se ven dificultados por el hongo que puede acabar secando la planta por completo. Se trata de un hongo de suelo «que va secando las plantas, pero no de forma fulminante, sino de forma alternativa .y es muy difícil combatirlo». Aunque nos consta que la Dirección del IFAPA ha hecho algunos planes para su recuperación, la falta de presupuesto y de atención por parte de la Consejería correspondiente mantuvieron el espacio convertido en un erial donde solo crece la maleza donde hasta hace unos años ocupó un esplendoroso laberinto vegetal.
En marzo de 2020 leemos la noticia de que el Laberinto va ha ser restituido a su trazado original sustituyendo los Evonymus japonicus que ante lo habían configurado por Mirthus communis.-Arrayan el seto andaluz por excelencia que esperemos resista la contaminación edafológica producida por aquella primitiva inundación.
La utilización del arrayan, también conocidos como mirtos también ha traído una nueva polemica «El arrayán es una planta vectora de la Xylella fastidiosa del olivar», explica este especialista. La Xylella fastidiosa es una bacteria que invade el xilema de la planta que la hospeda y obstruye el flujo de la savia. Resulta muy perjudicial para el olivar. Los arrayanes son una de las especies que potencialmente pueden ser focos de contagio de esa bacteria en concreto, pero significa que la resisten “aclara Juan Manuel Armenteros, que trabaja en el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Ganadera (Ifapa)Por este motivo, el de la resistencia, y `por su adecuación al medio ambiente cordobés posiblemente puedan sobreponerse a la fitóftora establecida en el suelo.
¿ Alguien conoce en que situación esta la restauración del laberinto de la Alameda del Obispo y de sus resultados ¿
Agradecería información sobre el estado actual y el estado de las nuevas plantaciones.
Enero 2021