El Torcal de Antequera

Fotos de las visitas realizadas la primera con carácter privado y la segunda con la Asociacion Sevillana de Parques y Jardines y el Paisaje

El Torcal de Antequera es un paraje natural de 1171 ha (11,7 km²) situado en los términos municipales de Antequera y Villanueva de la Concepción de la provincia de Málaga (Andalucía, España). Es conocido por las caprichosas formas que los diversos agentes erosivos han ido modelando en sus rocas calizas, constituyendo un destacado ejemplo de paisaje kárstico.

En el año 1929 se reconoció al área como el primer «Espacio Natural Protegido Andaluz» de interés Nacional.​ En 1978 fue declarado «Parque de la reserva Natural»​ y «Paraje Natural» en 1989.​ En 2014 fue declarado Zona Especial de Conservación (ZEC).​ La sierra goza también de la declaración de «Zona Especial para la Protección de las Aves» (ZEPA), emitida por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía.

En 2013 el Torcal de Antequera fue elegido segundo finalista de El Mejor Rincón 2013 de Guía Repsol. Además, El Torcal está propuesto como «Lugar de interés geológico español de relevancia internacional» (Global Geosite) por el Instituto Geológico y Minero de España por su interés geomorfológico, con la denominación «SK002: El Torcal de Antequera», dentro del contexto geológico «Los sistemas kársticos en carbonatos y evaporitas de la Península Ibérica y Baleares».​

El Torcal está constituido por rocas calizas de tres tipos: oolíticas, brechoides y clásticas. Todas ellas tuvieron su origen en el fondo marino durante el periodo Jurásico, hace entre 250 y 150 millones de años.

Como todos los macizos calizos, el Torcal de Antequera, presenta una enorme riqueza en simas, cuevas y otras formas subterráneas de las cuales se han explorado hasta la fecha algo más de un centenar.

El Torcal.-Crataegus monogyna.-Majuelo

Flora

Las formaciones vegetales originales del paraje natural Torcal de Antequera han sufrido, en mayor o menor medida, el efecto de diversas actividades humanas como el carboneo, el pastoreo, o la tala para la obtención de leñas. Como resultado, la vegetación climácica presenta cierta degradación, a lo que contribuyen las condiciones limitantes del sustrato. En cualquier caso, la riqueza y diversidad florística son notables y constituyen uno de los principales valores del paraje natural, con numerosas especies raras o endémicas, destacando la presencia de Atropa baetica.

En el paraje predominan los estratos arbustivo y subarbustivo, condicionados por la mínima potencia del suelo desarrollado sobre las calizas y dolomías del macizo. Buena parte de la superficie está cubierta con espinares, zarzales y otras plantas de la orla forestal (saúco, peonías, rosales silvestres). En zonas puntuales donde el sustrato es favorable aparece la vegetación potencial de la serie de los encinares béticos subhúmedos y basófilos en que se enmarca el espacio; la encina (Quercus rotundifolia) está acompañada por serbales (Sorbus aria), arces (Acer monspesulanum), y quejigos (Quercus faginea), junto a cerezos caninos (Prunus mahaleb). Los árboles no suelen alcanzar gran talla, pudiendo presentar un porte arbustivo.

Entre los espinares y zarzales se intercalan los pastizales y cardizales que crecen en las dolinas (depresiones características de los relieves kársticos) o «encerraderos». Estas depresiones albergan especies de valor ganadero como Poa bulbosa, Trifolium subterraneum o Ranunculus bulbosus, junto a otras más raras como Dianthus anticarius o Nepeta amethystina. En el Torcal Alto, con un interés botánico notable, aparecen comunidades rupícolas adaptadas a las fisuras y grietas de las rocas y los relieves kársticos, con numerosos endemismos entre los que cabe citar Saxifraga biternata, Linaria anticaria, Viola demetria o Scrophularia viciosoi, entre otras.

En el año 2016 fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO como parte del bien cultural en serie denominado Sitio de los dólmenes de Antequera, ya que el tholos de El Romeral está orientado hacia su cima.

Fauna

De la riqueza faunística que alberga el Torcal es especialmente notable su avifauna, pues constituye un área de campeo y nidificación de grandes rapaces, mereciendo mención el buitre leonado (Gyps fulvus). También están presentes el águila real (Aquila chrysaetos) y el águila perdicera (Hieraaetus fasciatus). Otras especies de rapaces, como el halcón peregrino (Falco peregrinus), el aguililla calzada (Hieraetus pennatus) o el búho real (Bubo bubo) también anidan o campean en este espacio junto con otras aves.

Par más información recurrir a Wikipedia de donde he sacado la información.