Sevilla.-Plaza San Francisco                                                                                                                   Rio Guadalquivir y Torre del Oro

El punto de vista filosófico: el hombre y la Naturaleza

«La naturaleza, según las leyes eternas de la belleza y de la variedad que ella siempre posee, ha repartido en los paisajes una gran diversidad de caracteres, y uno dirá también, que ha tenido puesta la mirada a la diversidad de gustos e inclinaciones de los hombres destinados a habitar estos lugares»

Watelet, pintor-arquitecto 1774

LOS ESPACIOS VERDES DE SEVILLA.- En la historia de la ciudad

Una somera visión sobre el crecimiento y desarrollo de los espacios verdes , paseos y plazas más importantes de la ciudad desde la antigüedad hasta nuestros días, nos puede ofrecer un hilo conductor de su evolución y una idea generalizada de su distribución en la ciudad, más producto de hechos históricos que de un planeamiento estudiado, el desarrollo de la ciudad siempre ha ido por delante, las necesidades se han creado cuando la naturaleza ha ido siendo eliminada de la ciudad, y el desarrollo urbanístico sobre el medio natural, creciendo a costa de los espacios naturales, las huertas agrícolas y los jardines de su perímetro.

En la Sevilla almorávide, en el camino que conducía a varias huertas y jardines desde la Puerta de la Carne, el Califa Abu-Yacub Yusuf amplió la Buhaira, deseando convertirla en un lugar de recreo que rivalizara con lo que los califas de Córdoba habían hecho el Medina Zahara, donde se plantaron olivos, frutales, y miles de palmeras. Eran los años 1171-1181. Jardines que como otros tantos desaparecieron en el curso de la historia y que ahora se han rehabilitado, son éstos, junto con los de los Reales Alcázares, los jardines más antiguos de los que tenemos conocimiento en la ciudad.

Los primeros apuntes históricos de verde en la ciudad aparecen en 1383. El río había dañado considerablemente las murallas en una de sus habituales crecidas, específicamente en el lugar de la Almenilla (La Barqueta hoy) donde el río atacaba frente la muralla. A efectos de protegerla se rellenó un gran espacio, formando un terraplén trabado con piedras y argamasa para que pudiera frenar el ímpetu de las aguas, y se plantaron árboles en la explanada que tomó el nombre de «Patín de las Damas» lugar protegido donde concurrían los vecinos de la Macarena, San Lorenzo y San Vicente. El paseo permaneció en uso hasta el siglo XIX en el que se derribaron las murallas de la ciudad.

Sevilla, desde el siglo XV, ha contado con el más antiguo de los paseos públicos existentes en la ciudad, la Alameda vieja, conocida hoy como Alameda de Hércules, dotada por el Asistente de Sevilla D. Francisco de Zapata Cisneros, Conde de Barajas, de frondoso arbolado y abundantes fuentes, era la época de los paseos de la que la ciudad se vio favorecida por el interés de sus Asistentes.

Sevilla.-Alameda de Hércules con sus cines de verano                                                                  Alameda de  Hércules.-

En 1522-23, siendo Asistente D. Gaspar Fernández Manrique, Conde de Osorio, se hacen plantaciones de Álamos en las márgenes del río para fortalecer los muros de defensa de las riadas que padecía la ciudad.

En 1727, el Asistente D. Esteban Joaquín de Ripalda, Conde de Ripalda, manda plantar 560 árboles en la orilla del río, desde la Torre del Oro hasta el puente de Triana, lugar donde se realizaban las faenas de carga y descarga de buques, denominándolo paseo del Arenal.

En 1734 conocemos una nueva plantación en la ciudad de una frondosa alameda en la Calzada, desde el Monasterio de San Benito hasta el templete de la Cruz del Campo, por iniciativa del Asistente D. Rodrigo Caballero Yllanes.

El paseo del Malecón desde San Laureano al Puente de Triana y el paseo de Bellaflor hasta Eritaña completaban los paseos de la época.

Junto a ellos, existían en la ciudad los jardines privados, unos pertenecientes a la realeza, otros a las familias burguesas de aquella época, los jardines de los Reales Alcázares, más reducidos que en la actualidad, los jardines del Huerto de Colón, jardines del Palacio de las Dueñas, Casa de Pilatos, etc, y en los exteriores de la ciudad, las Huertas de Capuchinos, Huerta del Retiro, Huerta de la Alcoba, etc.

Pablo de Olavide forma un paseo en las afueras de la Puerta de Triana en 1792, desde el Triunfo de la Trinidad hasta la Torre del Oro, y otro desde San Telmo hasta la Fuente del Abanico, en las orillas del río frente al populoso barrio de Triana.

Plano de Olavide

Pero fue D. José Manuel de Arjona, Asistente de Sevilla, quien acometió las mejoras más importantes en la jardinería pública de la ciudad, la primera prueba de su amor por los jardines hispalenses la plasmó acometiendo en 1825 una serie de mejoras en la Alameda de Hércules, prosiguiendo con la plantación de una alameda interior en la Plaza del Duque y en dos obras importantes en el extrarradio de la ciudad, la primera fueron los jardines de las Delicias, creando un paseo junto al de Bellaflor, cerca de Eritaña, conocidos como las Delicias de Arjona, al que se entregó con mayor esfuerzo y el que más impacto causó al vecindario; el segundo fue el Salón de Cristina, llamado así en honor de la esposa de Fernando VII, que ocupó un área abandonada entre la orilla del río próximo a la Torre del Oro, desde donde se iniciaba el paseo de Bellaflor, fue el jardín que con más cariño emprendió y durante mucho tiempo fue el punto de cita de la buena sociedad sevillana. En 1830 se finalizaron las obras de los jardines de las Delicias de Arjona y en el mismo año, en el mes de Julio en la onomástica de la reina Cristina se inauguraba el Gran Salón del Paseo de Cristina.

Estos paseos atrajeron la mayor concurrencia, aunque existían otros en la ronda que, aunque no merecieran el favor del vecindario, tenían anchas calles y buenas arboledas. Los cuidados del municipio se encaminaban de manera preferente a que los accesos de la ciudad se encontraran con plantaciones de árboles, frondosísimas plantaciones de Álamos configuraban los paseos que desde la Puerta de Jerez se dirigían a la Real Fábrica de Tabacos y al Prado de San Sebastián hasta la nueva Puerta de San Fernando, desde aquí hasta el Cuartel de Caballería de la Puerta de la Carne y de Carmona; luego frente al hospicio y Puerta del Osario, terminando en la de Córdoba, desde el Campo de Bailén hasta la Puerta Real, nos describe la historia otro paseo hermosísimo de varias calles de Álamos, Acacias y Moreras, enlazando hasta la alamedilla de la Puerta de Triana, y continuando hasta la orilla del río.

Continúan siendo los paseos los que configuran la trama urbana de espacios verdes de la ciudad, es en 1846 con la celebración del enlace de S.M. la Reina Isabel II cuando se inaugura el Paseo del Museo, bancos, esculturas y fuentes junto a una plantación de 59 árboles, formaban alineaciones y glorietas.

La Plaza del Pacífico (hoy Magdalena), Plaza del Salvador, Plaza del Triunfo, Plaza de las Descalzas (hoy Cristo de Burgos), la Plaza de las Carnicerías (hoy Alfalfa) y la Plaza de Santa Cruz fueron construidas como espacios públicos en la década de 1840-50.

 

 

Sin embargo, no es hasta 1852 cuando sobre los solares del ex-convento de San Francisco, no sin varias vicisitudes, se inician las obras de la más importante de las plazas en el circuito de la Sevilla antigua, la Plaza Nueva, de la infanta Isabel o de Isabel II, que en 1877 se llamó de San Fernando.

En el centro antiguo, en lo que podemos llamar corazón de la ciudad, ya existía una de las más antiguas, dando testimonio social y político, la Plaza de San Francisco, la más popular; en ella se han celebrado fiestas reales, torneos, toros, cañas, procesiones, mascaradas, autos de fe, fusilamientos, patíbulos, altares, todo ello en incesante sucesión. Existiendo igualmente la Plaza del Triunfo que ha sufrido varias reformas hasta su estado actual.

Mientras, en la ciudad se amplía el inventario de zonas verdes privadas, con la llegada a Sevilla de los Duques de Montpensier en 1850, se realizan importantes obras de mejora en el Palacio de San Telmo, adquieren la huerta del Naranjal y los terrenos del exconvento de San Diego, transformándolos en costosos jardines, magníficos por su extensión y su carácter pintoresco al gusto de la época.

Perteneciente al Palacio de San Telmo, en 1881, la Quinta de Juan Cruz, hoy conocida como la Casa Rosa en la Avenida de la Palmera, se convierte en jardín, su dueño Juan Cruz «el sastre más afamado de la época», es sastre de los Duques de Montpensier (D. Antonio de Orleans). Construida en las afueras de Sevilla, rodeada de huertas y con un gran jardín, vino a engrosar los jardines privados de la ciudad. Hoy el Palacio de San Telmo es residencia del Presidente de la Junta de Andalucía, la Casa Rosa es la sede central de la Agencia de Medio Ambiente.

En 1889 se conforma un paseo en la Plaza de Santo Tomás, junto al arco, frente a lo que se conoce hoy como Coliseo, el Plátano existente puede ser un testigo de esta plantación.

Prado de San Sebastian .-1846

 

En 1898 el antiguo Prado de San Sebastián quedó unido a los terrenos del municipio por una concesión que había hecho el Real Patrimonio, con una ancha faja de terreno procedente de la Huerta del Retiro, desde la que fuera Puerta de San Fernando hasta la Puerta de la Carne, nació el Paseo Catalina de Ribera, con plantación de hileras de árboles y cuadros de jardines con asientos de mampostería y otros de cemento. En 1920 fueron reformados por obra de D. Juan Talavera y Heredia con el trazado actual, del que han desaparecido la mayoría de los adornos originales.

El 19 de Junio de 1893, la historia de los espacios verdes de la ciudad, con la donación por S.A.R. la Serenísima Sra. Infanta de España Dª María Luisa Fernanda de Borbón y Borbón, Duquesa Viuda de Montpensier, hermana de Isabel II, de gran parte de los extensos jardines de San Telmo a la ciudad para uso y disfrute de los sevillanos, recibe el aldabonazo de poder situarse en primera línea de las ciudades con mayores zonas verdes en relación al número de habitantes, y que dio la posibilidad de disponer de un gran parque para la ciudad.

Hasta que el comité ejecutivo de la Exposición Americana no encargó el proyecto de reconstrucción del Parque en 1911, los terrenos donados estuvieron en espera de que se decidiera su uso como parque, siendo la situación de los jardines de total abandono.

Desde esta fecha hasta 1914 se realizaron las obras proyectadas por Jean Claude Forestier, y ese año se inaugura el parque con feliz éxito, coincidiendo con la celebración de la Feria. Su extensión era en aquel

Vista aerea antes de la Exposición

momento de 135.829 m².

Con motivo de las obras para la celebración de la Exposición se incorporan a los terrenos cedidos la Huerta de Mariana (hoy Plaza de América) y la Plaza de España, así como los terrenos de los actualmente denominados Jardines de San Telmo, donde se albergaron pabellones de distintos países americanos.

Mientras, con la construcción del Hotel Cristina y el Hotel Alfonso XIII con el fin de resolver problemas de alojamiento para la Exposición, se seccionaba el Gran Salón del Paseo de Cristina y desaparecían los jardines de Eslava.

En años sucesivos seguirían una serie de modificaciones producidas por la incorporación de diversas glorietas conmemorativas de distintos personajes locales, nacionales. Todo el Parque convertido en biblioteca pública al aire libre.

En este caso la actividad de la Exposición fue lesiva para el patrimonio de las zonas verdes de la ciudad.

El Ayuntamiento cedió el Parque de María Luisa, el Huerto de Mariana, el Naranjal y las Delicias Viejas para el certamen, y la Exposición se extendió hasta el sector Sur de la ciudad.

Antes en 1911 el Rey Alfonso XIII había cedido a la ciudad parte de la Huerta de Retiro anexa a los Reales Alcázares de la que nacieron los jardines llamados de Murillo. pequeños jardines de marcado sabor sevillano, con paseos transversales adornados con fuentes de mármol y bancos de azulejos, levantándose en estas fechas el muro almenado que los separa de los jardines de los Reales Alcázares.

La modificación de los límites del recinto de los Reales Alcázares con la anexión de las Huertas de la Alcoba y parte de la del Retiro posibilita la ampliación de los jardines del recinto, con la creación del Jardín Inglés, el Jardín de los Poetas y los de Valle Inclán.

Con motivo de reformas urbanas realizadas con motivo del Certamen Ibero-Americano se crean los Jardines de la Lonja delante del Archivo de Indias en 1928, obra del ingeniero D. Juan José Villagran.

Estos nuevos jardines fueron obras realizadas dentro de la política urbana llevada a cabo por el gobierno municipal liberal, bajo la alcaldía del Conde de Halcón, anterior a la guerra europea. En dicho período se reformaron diversas plazas en la ciudad, y se implantaron jardines en otras, De estas mejoras destacamos la Plaza de San Juan de la Palma, la Plaza de San Pedro, la Plaza de Pilatos, San Lorenzo, San Jacinto, Altozano, la del Pacífico (hoy Magdalena), la del Salvador, etc.

Tras este período de intensa actividad urbana, la labor no se ciñó sólo a reforma de plazas, sino que la labor más importante fue la de plantación de árboles en las calles, paseos y plazas céntricas. A esta labor de repoblación urbana sucedió la de dotar de bancos a los paseos públicos.

La actividad desplegada en las zonas verdes mereció durante años que Sevilla fuera recordada como una ciudad llena de espacios públicos ajardinados, en los que destacaba sobre todos ellos su gran parque, el de María Luisa.

Celebrada la Exposición Ibero-Americana en el primer tercio del siglo XX, Sevilla fue la Sevilla de la Exposición, fue capaz de la remodelación, de forjar otra fisonomía a la que se conocía a principios de siglo con 148.315 almas, de un núcleo urbano decadente, sumido en la parálisis por el peso de un orden estructural sujeto a su propia inercia.

Inauguración de la Exposición Iberoamericana 1929

La Exposición abrió un ancho cauce para desterrar la decadencia y recuperar la imagen de núcleo urbano preeminente, y sin duda, la principal hacedora de la moderna Sevilla.

Sin embargo, hay que admitir que la Sevilla de 1936 ya no era aquella con la que se había iniciado la organización del certamen, cierto que aquel trajo consigo elevadas  inversiones y un sin fin de mejoras urbanísticas, una imagen monumental de extraordinaria belleza, pero dejó tras de sí un crónico paro obrero, una dura exigencia de responsabilidades político-administrativas en la demolición de lo edificado, la bancarrota del Ayuntamiento y un sentimiento de frustración ante un iberoamericanismo fugaz, frágil, retórico y sin alcance posterior.

Ya en 1930, los habitantes de Sevilla eran 228.729, setenta mil almas más que a comienzos de siglo. La ciudad se desarrolla y cambia, este simple dato demográfico es ilustrativo del salto cuantitativo operado, los problemas ya sí eran urbanos. Los problemas post Exposición eran manifiestos, unos alabando sus resultados positivos, otros su fracaso y la causante de la ruina del municipio, de la parálisis de los negocios y el malestar de amplias capas de la población, hacinadas en arrabales y sumidas en el paro y la miseria.

La Guerra Civil paraliza durante unos años el desarrollo de la ciudad; terminada la guerra y ante la gravedad del problema de la vivienda causada por la afluencia de refugiados durante la Guerra, el Ayuntamiento fija su atención a la promoción de construcción de nuevas barriadas, La Barzola, El Tardón, Árbol Gordo, etc.; otras de carácter residencial en los Remedios en la Avenida Eduardo Dato, Prado de San Sebastián, éstas promovidas por la Diputación Provincial; otras de carácter social obrero, Santa Teresa, Amate, la Candelaria, San José Obrero, …; el boom de la construcción y el crecimiento demográfico de la ciudad había llegado y el crecimiento urbano arrasaba.

Junto a esas construcciones nacieron las «barriadas clandestinas», formando un verdadero cinturón urbano, Bellavista, Torreblanca, a las que luego se unieron, la Negrilla San José de Palmete, Padre Pío, La Doctora, Aeropuerto Viejo, Valdezorras, La Bachillera, etc.

Habían transcurrido muchos años en los que otras necesidades tan imperiosas como la vivienda, la educación, el trabajo, etc. habían copado el interés de nuestros políticos, las zonas verdes y jardines quedaron en un último plano, asistimos a la verdadera explosión demográfica de la ciudad. Ésta creció y su dinámica no hizo posible detener su extensión y densificación.

La especulación del suelo fue moneda cotidiana, construir y construir para vender y más vender. Las urbanizaciones defectuosas o inexistentes, los espacios libres y zonas verdes, sustituidos o eliminadas por aparcamientos de vehículos.

El desarrollo aumentó el parque móvil de la ciudad, convirtiendo el coche en el «dios» de las calles, ensanches, reformas y operaciones de cirugía en la trama urbana eran «imprescindibles» y traumáticas diría yo, cuando se trata de operar en una ciudad antigua como Sevilla. Desaparecieron bulevares plantados de árboles, el de la Avenida de la Borbolla, el de Eduardo Dato, el de la Avenida Reina Mercedes, la ampliación del Paseo de las Delicias, etc., la ciudad se transformaba para un «normal desenvolvimiento del tráfico», y en muchos casos sin resolver el problema, a su completa desnaturalización.

En aquel entonces, el único instrumento legal capaz, al menos teóricamente, de establecer un sistema coherente de espacios de equipamiento y espacios verdes era el PLANEAMIENTO.

A este nivel, el P.G. redactado en 1945 y aprobado en 1946 que actuaba sobre una ciudad de 312.000 habitantes era el punto de partida, aunque con anterioridad hubiera una serie de proyectos de extensión (Aníbal González 1911) sobre los terrenos de Nervión (Sánchez Dalp 1912), sobre la totalidad de la ciudad (Conde de Colombí 1915), sobre la Exposición Ibero-Americana, y un Plan de García Mercadal para la Sevilla de 1930.

El escaso cumplimiento de las determinaciones del Plan desde 1946 hasta 1962, fecha de aprobación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Sevilla, fue por dos motivos fundamentales:

  • La gran crisis que atravesaba la ciudad
  • La falta de interés y recursos de la Administración, según se reconoce en la memoria del mismo.

La verdad, es que, en materia de zonas verdes, poco o nada se hizo en este período, conservar y mantener lo existente ya era importante.

El Plan General de Ordenación Urbana de 1962 fue redactado en base a las dotaciones y determinaciones de la entonces vigente Ley del Suelo de 1956, con un horizonte de 15 años de vigencia.

La ciudad se estructuraba y jerarquizaba en base a una política de estándares urbanísticos, hoy lógicamente desfasados, unidades vecinales, unidades de barrio y unidades de distrito. Cada distrito estaba formado por un mínimo de 10 barrios, y éstos, a su vez, por cuatro o cinco unidades vecinales. Cada distrito dispondría de un Centro de equipamiento y un parque denominado de Distrito, dotando a éste de los estándares señalados en la ley.

En el desarrollo del mismo, los Planes Parciales debían incluir las zonas verdes y espacios libres, en la mayoría de los casos los sectores estaban cubiertos por la edificación con imposibilidad de llevar a cabo las dotaciones que establecía el Plan.

Sevilla.-Jardines del Paseo de Colón

En estas fechas se plantaron los jardines de Paseo de Colon y los de la Avda. Eduardo Dato y la Gran Plaza.

En 1969, al ser cegado el Río Guadalquivir a la altura de la Estación de Córdoba, se crea la Avenida del Cristo de la Expiración, decidiendo el Ayuntamiento embellecer las márgenes del río desde el Puente de Triana hasta la corta, creando los jardines de Chapina, desaparecidos en parte con la ampliación de la dársena y desaparición de la corta en el año 1990 con motivo de la EXPO 92, y la apertura del río hasta el meandro de San Jerónimo.

En el año 1973 un nuevo parque nacía entre los barrios de Triana y los Remedios, el Parque de los Príncipes de España, con una superficie de 9 Ha. que vino a paliar los problemas de falta de espacios verdes en un barrio tan densamente poblado como el de Los Remedios. Inaugurado coincidiendo con el traslado de la Feria desde el Prado de San Sebastián a Los Remedios.

El Parque de Amate fue el beneficiario de aquel P. G. O. U. al incluirlo como parque de Distrito en el Plan Parcial del Sector, con una superficie de 50 Ha, ocupada una parte de las mismas por construcciones clandestinas, otra superficie de 10 Ha. ocupada por instalaciones deportivas y 2 Ha. las ocuparon unidades escolares, con lo que se redujo la extensión del Parque a 38 Ha. En el año 1974 se iniciaron los estudios, en 1979 las primeras obras de explanación y cerramiento, en 1981 las primeras plantaciones de árboles y arbustos.

La obra del Paseo Marques del Contadero viene a engrosar la relación de obras llevadas a cabo en la ciudad en este caso como embellecimiento de las márgenes del río, la totalidad de la obra desde la Torre del Oro al Puente de Triana es inaugurada en 1980.

En Nervión, uno de los Distritos más desfavorecidos en superficie de zona verde por habitante, ve como en 1981 sobre un solar de 7.900 m² donde estuvo ubicada la industria de Envases Metálicos Riojanos Moreno S.A. nace un nuevo jardín para el Distrito, en calle Pirineos y Santo Domingo de la Calzada, denominado Parque Pirineos

Sevilla.-Parque Pirineos en calle Sto Domingo de la Calzada

Vemos como en otras ocasiones que el Plan redactado a base de dotaciones y una política de estándares urbanísticos, no sólo no soluciona los problemas, sino que éstos se acrecientan. Las zonas verdes previstas no se ejecutan, los estudios económicos del desarrollo del Plan y los de gestión urbanística fracasan una vez más, desbordados por el afán de construcción con actuaciones incluidas en el Plan General u otras realizadas al margen del mismo, que lo desvirtúan y lo distorsionan.

Durante el período de crecimiento demográfico, década del 60-70 y años siguientes, asistimos a la desaparición de plazas tradicionales y patios interiores, unas bajo la presión automovilística tan en boga, y otros bajo la especulación del suelo para construcción de viviendas.

En un congreso celebrado en Barcelona, nos sorprendía una intervención desmandada y provocadora del arquitecto urbanista Oriol Bohigas asegurando que «el verdadero protagonista y el que caracteriza a la ciudad es el coche, a cuya medida hay que planificar y diseñar aquella», mientras en la Carta Urbana Europea aprobada en Estrasburgo en el mes de Marzo de 1992 por el Consejo de Europa (Ref. 8) en su capítulo primero de temas individuales, afirma al hablar del transporte y movilidad «el coche mata a la ciudad, lenta pero seguramente. Para el horizonte 2000 habrá que elegir uno u otra, no podemos conservar las dos» y sigue «los coches agreden a las ciudades por el ruido, la inseguridad física y psicológica, la degradación y la pérdida de los espacios públicos, la contaminación. En conjunto entraña una pérdida global, social y cultural …»

«Es preciso imperativamente reducir el volumen de desplazamientos y el uso del coche privado». «Hay que reconquistar el espacio social de la calle». «Es indispensable un esfuerzo continuo de formación».

Sevilla pierde los verdaderos núcleos convivenciales de sus plazas y los patios interiores de las típicas casas sevillanas, grandes espacios que colaboraban en gran medida como esponjadores de la trama urbana. Durante este período, se restauraron y reformaron muchas plazas existentes en toda la ciudad.

Sevilla ha alcanzado un crecimiento demográfico importante, la ciudad ha crecido y sus zonas verdes no, existe déficit de espacios verdes, y zonas donde la naturaleza pueda ser contemplada y disfrutada.

En 1981 Sevilla inventariaba un total de 152 Ha de zonas verdes, con una superficie verde útil por habitante de 1.82 m², una cifra realmente muy baja, a la que se añadía el factor agravante de la mala distribución de las mismas en la ciudad; favorecido el Sector Sur y Centro, el resto de los distritos eran totalmente deficitarios.

El auténtico déficit de zonas verdes, era más un problema de falta de voluntad política y de ejecución del Planeamiento, entre otros factores. Los planes por etapas previstos no se ejecutaban, las actuaciones se limitaban a las rentables o a las de iniciativa privada. La falta de capacidad de gestión municipal y la incapacidad económica del municipio imposibilitaron el desarrollo del P.G.O.U. de 1962. La consecución de suelo a través de expropiaciones era una rémora para la economía municipal.

Sevilla.-Parque de Amate

Posteriormente las actuaciones de los Organismos Centrales también distorsionaron acusadamente el Planeamiento, el Área de la Cartuja, el Polígono del Aeropuerto, el  Polo de Desarrollo

entre otros, nadie estaba en contra de estas actuaciones, pero hemos de reconocer que distorsionaron el P.G.O.U. Con las actuaciones que se llevaron a cabo en estas fechas, se programó la construcción de 223 Ha destinadas a Parques urbanos y estructura de esparcimiento en el Polígono del Aeropuerto -ahora Sevilla Este- no programadas en el PGOU y de difícil gestión en cuanto a su adecuación, conservación y mantenimiento, no existían recursos para ello, y el ciudadano reclamaba su acondicionamiento, Hasta hoy, quedan todavía zonas que se plantaron en aquellas fechas pendientes de acondicionar.

Del Área de la Cartuja hablaremos más adelante por su importante incidencia en la ciudad, en estas fechas su calificación era preservadora.

Una nueva Ley del Suelo y la revisión del P.G.O.U. de la ciudad y la creación de la Gerencia de Urbanismo podría solucionar muchos problemas en la ciudad.

La primera porque en la nueva ley del suelo, como es sabido, todas las zonas destinadas a equipamientos comunitarios e infraestructuras han de ser cedidas gratuitamente a la administración como un componente de la justa compensación que se exige a los propietarios de los beneficios derivados del proceso urbano independiente de la cesión del 10 % de suelo edificable para formación del Patrimonio Municipal.

El segundo porque sería el elemento de gestión eficaz que posibilitaría el cumplimiento del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad aprobado.

El desarrollismo de los años siguientes añadió un componente más despersonalizado del proceso del planeamiento urbano, que cobró un carácter sólo cuantitativo, bajo la óptica del mercantilismo inmobiliario, ayudado de cerca por el trato favoritista de la Administración.

La ciudad que es el lugar cuyo aire hace libre al hombre y reúne un conjunto de recursos y atractivos indudables, se convirtió en un puro objeto de la especulación urbanizadora, acumulando problemas sólo característicos del medio urbano (la contaminación atmosférica y sónica, las islas de calor urbano) transformándose en el modelo del que se protegen todavía hoy los ciudadanos y del que huyen -los que pueden- en desbandada los fines de semana.

Hemos permanecido al margen de las corrientes urbanísticas durante decenas de años. Sin saber si es peor la terquedad o la ignorancia de los urbanistas que desde los años sesenta a los noventa se pasan el relevo sin inflexiones de interés en lo que se refiere al tratamiento ambiental, paisajista y ecológico de la ciudad.

En nuestra ciudad, tal como en tantas otras de la geografía nacional, durante muchos años se ha desaprovechado la naturaleza con cierta alegría, porque no se sabía que la necesitaríamos.

La bondad del «verde urbano» es un concepto que se introduce tarde … es un concepto más bien moderno.

Los ciudadanos fueron conscientes de la necesidad de zonas verdes que esponjasen la densidad urbana, sin embargo, la planificación de hectáreas de verde no salía del papel. La historia hasta nuestros días es pura tragedia, la nómina de los jardines incorporados se acaba pronto, los sistemas para su ejecución se dilataban en el tiempo ante otras demandas sociales.

Cuántas veces hemos oído o leído ahora que los ayuntamientos franquistas centraban sus prioridades en llenar de ladrillos y asfalto la ciudad, no existía política verde, por más que los vecinos, insípidamente organizados, empezaran a colocar los ojos y pancartas en solares, plazas, o zonas industriales o terrenos disputados entre la esperanza popular y la especulación generalizada. ¿Vivíamos un urbanismo sin ley y un urbanismo por venir?

Polígonos de promoción pública y privada, pisos pequeños de construcción dudosa, densidades impensables y ningún equipamiento sensato, dotar de viviendas al ciudadano acuciaba.

La ciudad que se construía era gris, caótica e incómoda.

No era sólo el gobierno municipal, sino una densa red de beneficiarios, en la que se integraban constructores y propietarios, por citar sólo dos estamentos activos en la destrucción. Quien tenía un jardín, tenía un solar para edificar. Donde había un bulevar, cabía una avenida, quien tenía una finca, tenía lugar para un polígono.

Todas estas cosas requerían mucha unanimidad y una gran complicidad que existió.

La ciudad crecía y se comía el verde que le sobraba, hasta que se da cuenta e intenta ganar aquello que había perdido.

 

 

Sevilla.-Parque de Amate                                                                                                                        Sevilla .-Parque de los Príncipes de España

Pero esto ya pasó, a pesar de ello, en aquella época se construyeron los parques de Los Príncipes y de Amate, dos pulmones en barrios de la ciudad, y se plantaron muchos árboles.

Rememorar la historia da miedo, entre otras cosas porque los disparates son siempre complejos de corregir años después.

Pero todo esto ya sucedió …

A la llegada de la democracia, todo parecía que iba a cambiar, la problemática situación no podía seguir, requería trabajos serios y determinación de estrategias a seguir, era preciso olvidar antiguos hábitos totalitaristas para solucionar viejos problemas con formas nuevas.

Inmersos en un estado de democracia, la actuación de los poderes públicos debía estar en lo verde, como en tantas otras cosas supeditada a las necesidades y demandas de los ciudadanos.

La integración del ciudadano en la gestión y planificación de los parques y jardines públicos, para que a través de su participación se adecuara la oferta a satisfacer la demanda, implicando al ciudadano con el medio, comprometiéndolo y colaborando en su conservación, parecía que era una meta a conseguir. En muchos casos una falacia.

No cabe duda que todo ello gestionado a través del único instrumento legal capaz, al menos teóricamente, de establecer un sistema coherente de espacios verdes y de equipamiento, como es el planeamiento.

Hacer hoy apología de los espacios verdes de la ciudad está fuera de lugar: los niños lo aprenden en la escuela.

La demanda de espacios destinados a equipamientos comunitarios se hace ahora cada vez más acuciante, y dentro de ellos las áreas destinadas concretamente a espacios verdes y espacios libres.

La ciudad crece a costa de huertas y espacios naturales de su perímetro; en el medio urbano, la actividad humana va modificando de tal forma los ecosistemas que no es posible o extraordinariamente difícil la reconducción de los procesos ecológicos fundamentales.

Estos últimos años ¿Qué hemos hecho? ¿Qué objetivos nos hemos propuesto? ¿Con qué medios? ¿Con qué prioridades? Quizá debamos meditar sobre ello.

¿Cómo hemos desarrollado el planeamiento vigente, una vez cumplida la vigencia del Plan General de Ordenación Urbana?

¿Hemos cumplido el Plan? ¿Qué desfases se han producido? ¿Porqué? ¿Es defecto del Planeamiento o de su ejecución? ¿Se han conseguido los planes de etapas? ¿Es una falta de capacidad de gestión municipal? ¿O ha sido la incapacidad económica del Ayuntamiento?

O aún cuestionaría más ¿Ha sido falta de interés de la Administración para llevar a cabo el Plan? ¿Se ha distorsionado el P.G.O.U. con actuaciones realizadas por Organismos Centrales?

Hemos creado o intentado crear nuevas zonas verdes en este período. Algunas parecieron eternas (Parque de Miraflores, Parque de San Jerónimo (Parque Celestino Mutis, Jardines del Prado de San Sebastián, Jardines de la Buhaira, Parque de Miraflores 1ª fase, Parque de San Jerónimo, Parque de Amate (nunca terminado) etc), otras como consecuencia de la Exposición Internacional de Sevilla EXPO 92 (Parque del Guadalquivir, Muro de Defensa, Jardín Americano, Parque del Alamillo) y zonas forestales del Polígono Sevilla Este.

Sevilla .-Parque Infanta Elena.-Poligono Sevilla-Este

ZONAS FORESTALES DEL POLIGONO DEL AEROPUERTO

Con una superficie de 94 hectáreas, está limitado al Norte y al Este con los terrenos del Aeropuerto de San Pablo de Sevilla, en el Sur con la Ronda del Parque Alcosa, al Oeste con el Centro Deportivo Alcosa y al Noroeste con la Autovía de Córdoba. – N4 y con el enlace de conexión a la Ronda Supe norte con dicha Autovía.

ANTECEDENTES

La historia nos habla del asentamiento sobre la base de excavaciones y estudios paleobotánicas, ya que es posible reconstruir el pasado a partir de los diferentes estadios de sucesión ecológica, en los que se ha podido determinar la riqueza de la zona que permitió el asentamiento de numerosos pueblos desde la prehistoria. El yacimiento más importante data de época hispanorromana y corresponde a una villa próxima a la Vía Augusta. Aprovechando los recursos naturales que ofrecen las márgenes del arroyo, se dio un asentamiento estable, planificado y consolidado en el tiempo que, además, presenta un buen estado de conservación como constatan los registros arqueológicos.

El territorio que conforma hoy el Parque del Tamarguillo perteneció hasta principio de la década de los setenta a la “Hacienda Buena Esperanza” y se trataba, en sus orígenes, de una dehesa de olivos y encinas, con toros bravos había pertenecido al que fuera concejal del Ayuntamiento de Sevilla en los años 30 del siglo XX, Idelfonso Marañón Lavin y después a la familia.

En julio de 1975 se aprobó el decreto de expropiación, estimándose el importe dedicado a la misma en 325 millones de pesetas, estando prevista la posibilidad de sustituir el sistema de expropiación por el de compensación total o parcial.

En marzo de 1977, el por entonces alcalde de la ciudad Fernando de Parias Merry, suscribió un acuerdo con la junta de compensación para dotar de infraestructuras básicas al sector.

Milagrosamente testigo de esa época no queda más que un cortijo, el de San Ildefonso, emplazado en el interior del parque y que hoy asume las tareas de gestión y uso para las huertas vecinales y escolares.

La explotación de diversas graveras y la frecuencia de rebaños fueron contribuyendo a su abandono, sin embargo, el cultivo intensivo, la ganadería y la intervención en los cauces, aunque determinó profundamente el paisaje, no consiguió extinguir la vegetación autóctona.

La primera actuación sobre la superficie que nos ocupa fue llevada a cabo por el Ayuntamiento en 1997 quien con fondos POMAL y a través de LIPASAM con una inversión de 1.477 millones de pesetas llevo a cabo el Proyecto de regeneración de solares degradados en varios puntos de la ciudad.

Dicha actuación propicio la recuperación de 81 hectáreas  en las parcelas 33 y 35 de dicho programa correspondientes a los terrenos del antiguo Cortijo San Ildefonso, junto al barrio Parque Alcosa, por aquel entonces abandonados, llenos de hierbajos con evidente peligro de incendios y llenos de escombros, degradación propiciada por el continuo vertido descontrolado que se realizaba propiciado por la intensa actividad constructiva habida en el sector y en otros barrios con continuas modificaciones en las viviendas.

Sevilla Parque del Tamarguillo                                                                                                                 Revindicaciones ciudadanas solicitando la apertura del parque

Esta primera intervención supuso la retirada de miles de metros cúbicos de escombros y detritus de las parcelas, la construcción de 47.000 m2 de caminos y zonas recreativas, 2.400 metros lineales de cerramiento y la plantación de 3.736 árboles y más de 7.500 arbustos las obras contenidas en este proyecto se dieron por concluidas en el año 1999.

El Ayuntamiento como es tradicional en esta ciudad, presto poca atención a las obras realizadas por otra Corporación y llego nuevamente el abandono de las obras y plantaciones realizadas.

Las protestas vecinales eran continuas al ver que lo que con tanta ilusión se había preparado con el saneamiento de los solares y las plantaciones realizadas seguía abandonado y con continuos incendios de los hierbajos y matorrales que crecían en las parcelas regeneradas.

Así estuvo durante unos años, con cuidados de mantenimiento mínimos, unos desbroces a destiempo y un escaso riego a las plantaciones realizadas.

Los suelos incluidos dentro del proyecto del antiguo cauce del Arroyo Ranillas, forman parte del Sistema General de Espacios Libres y Zonas Verdes del Nuevo Plan General de Sevilla, si bien, la ausencia de financiación específica impidió su construcción.

El principal efecto socioeconómico basado en un desarrollo sostenible, que supone una mayor y mejor dotación de servicios urbanos, un estricto control de la incidencia medioambiental, la creación de unas condiciones de vida y de habitabilidad más agradables, y la generación de unas perspectivas de futuro en la sociedad que redundan muy positivamente en el aumento de la calidad de vida. Con estas actuaciones se pretende conseguir un espacio de ocio con los servicios necesarios para su uso y disfrute en las pertinentes medidas de seguridad y salubridad.

En noviembre de 2.003 el Ministerio de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y la Gerencia de Urbanismo, firman un convenio dentro del marco del Plan de Restauración Hidrográfico Forestal y de Protección de cauces en el municipio de Sevilla, para llevar a cabo una serie de actuaciones ambientales encaminadas a potenciar el uso público de riberas y la regeneración de diferentes parques del municipio, financiado con Fondos Europeos FEDER..

Hasta que llego el Convenio entre la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla como recuperación y regeneración ambiental de antiguos cauces públicos, actualmente muy degradados, “y regeneración hidrológico y forestal de cauces y riberas” que supuso una inversión de la Administración de 10.897.044,91 €, cantidad que se bajó con el resultado de la licitación.

Al proyecto hubo que realizarle un complementario de 1.341.596,34 € para atender las peticiones y modificaciones que exigieron los vecinos como más adelante detallamos, ascendiendo el gasto total del proyecto inicial y el complementario a 12.238.641.25 euros en una superficie de 930.036 m2.

La financiación del proyecto corrió a cargo de los siguientes organismos: La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir aporto el 75 % de la inversión con cargo a Fondos FEDER y el 25 % restante lo aporto la Gerencia de Urbanismo de Sevilla.

En marzo de 2.007 se adjudicaron las obras y se iniciaron los trabajos en el mes de mayo del mismo año.

EL PROYECTO APROBADO

Debido a la singularidad de la implantación territorial de la ciudad de Sevilla en relación con la historia de los cauces de los arroyos y ríos que han incidido directamente en la evolución histórica de la ciudad, se trata de una de las actuaciones pendientes más importantes en cuanto a la recuperación y regeneración ambiental de antiguos cauces públicos, actualmente muy degradados.

Dentro del propio Convenio de Colaboración entre Ministerio y Ayuntamiento de Sevilla, estaba incluida esta actuación como una de las más importantes por su importancia simbólica y estratégica, no solo para la ciudad, sino como ejemplo a seguir para otras actuaciones pendientes en Andalucía en relación con aspectos relacionados con regeneración de cauces públicos y riberas de ríos y arroyos.

Con la ejecución del Proyecto se pretendía solucionar una serie de problemas, los cuales quedan enumerados a continuación:

– Problemas de inundabilidad de la Ciudad de Sevilla en la zona Norte.

– Precaria situación del actual cauce urbano del arroyo Ranillas.

– Grandes dificultades de accesibilidad norte-sur en toda la franja comprendida entre el ferrocarril exterior, las extensiones urbanas del polígono Aeropuerto y los suelos industriales al sur de la carretera de Málaga.

– Existencia de grandes extensiones del actual Parque Tamarguillo con carencias de valores paisajísticos y de valores propios de un Parque.

El resultado de la problemática descrita anteriormente impedía a un desarrollo sostenible del sector Norte de la Ciudad de Sevilla.

La realización de estos trabajos se basaba en cuatro objetivos fundamentales:

  • Recuperación del cauce natural del arroyo Tamarguillo como zona de calidad ambiental dentro del parque.
  • Adecuación de las márgenes del nuevo encauzamiento de los arroyos Miraflores y Ranillas a su paso por el parque (con un trazado de unos 1.200 metros)
  • Puesta en valor de aquellas zonas que se encuentran parcialmente adecuadas a las funciones del futuro parque.
  • Adecuación de aquellas zonas que en la actualidad carecen de cualificación o valor paisajístico.

Sin olvidar los criterios establecidos por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y la Gerencia Municipal de Urbanismo de Sevilla para este espacio libre, que se sintetizan a continuación:

  • Comprender las funciones urbanas que debe asumir como primera condición el diseño de este tipo de espacio que exige la ciudad. Y en este sentido aplicar, con carácter general, las ideas de parque equipado y de intercambiabilidad, como garantía para conseguir un uso intensivo y diverso de estos.
  • El Parque Tamarguillo debe entenderse en conexión con el sistema de espacios libres y zonas verdes previsto en el Plan General. El objetivo es la creación de una sucesión de espacios libres dedicados al ocio, al esparcimiento o al fomento de los aspectos puramente naturales, que permitan acentuar la variedad urbana, reducir la densidad, y potenciar los desplazamientos peatonales y el uso de los espacios libres existentes.
  • La ordenación del parque será un elemento fundamental para vertebrar formal y funcionalmente la ciudad.
  • Mejorar el diseño y contenido del parque en relación con los usos y programa de equipamientos complementarios que pueden incorporarse dentro del parque.
  • La minimización del impacto medioambiental, y la minimización de la carga de mantenimiento, sobre todo desde la perspectiva del ahorro de recursos.
  • De acuerdo con el diseño del Plan General, los terrenos del Parque tendrán la consideración de parque equipado, compatible con la reserva para la dotación de equipamientos y dotaciones de barrio-ciudad, que se integrarán dentro de la ordenación de la estructura del Parque.

En la ejecución de las obras estaba previsto el desmantelamiento completo de las redes y edificaciones existentes tanto en las instalaciones pertenecientes al Camping Sevilla, como a las naves industriales de Tuberías Távora.

Red viaria y pavimentación de los distintos tipos de vías: Ejes perimetrales, anillo perimetral, ejes secundarios, sendas, carril bici y las pasarelas diseñadas para los diferentes pasos que pueden soportar tráfico ligero de vehículos de mantenimiento o emergencias, en el que varían las dimensiones para ajustarse a las necesidades de cada paso concreto.

El movimiento de tierras con la ejecución de los desmontes y terraplenes necesarios para conseguir la topografía proyectada.

Una de las actuaciones más importantes dentro del parque es la creación de una lámina de agua sobre la parte del cauce del arroyo Tamarguillo más degradada. Se dotará a la lámina de un sistema de impermeabilización para evitar pérdidas de agua por filtraciones.

Para potenciar la nidificación de aves en el entorno de la lámina de agua se proyectan dos zonas que se acondicionarán específicamente para tal fin. Por un lado, se recrea una pequeña isla en la zona final de la lámina, y por otro lado se protegerá otra zona del acceso del público mediante la topografía y la implantación de una cobertura vegetal densa, con objeto de conseguir una zona de ribera en la parte más ancha de la misma.

Para la red de recogida de aguas pluviales, en los caminos principales del parque se ha proyectado una red de cunetas formadas por piezas prefabricadas de hormigón a ambos lados de los mismos, con desagüe a la lámina de agua.

Con respecto a las plantaciones el proyecto indica que se realizarán los siguientes trabajos:

  • La limpieza y retirada de todos los residuos existentes en la parcela de actuación.
  • La implantación de una cubierta vegetal arbórea con especies autóctonas y ornamentales en las diferentes zonas del parque que carecen de ella.
  • La implantación de una cubierta vegetal arbustiva con especies autóctonas y ornamentales distribuidas en las diferentes áreas del parque.
  • La implantación de praderas y zonas cubiertas por especies tapizantes y cespitosas.
  • Los tratamientos necesarios sobre los ejemplares existentes de las plantaciones realizadas con el Programa de regeneración de solares degradados que se han mantenido en las parcelas del futuro parque.

Incluía el proyecto el diseño del sistema de riego para toda la vegetación existente y de nueva implantación dentro de los límites del Parque Tamarguillo.

  • Un primer sistema general automatizado que combina riego con aspersores de corto y largo alcance.
  • Un sistema de riego auxiliar con bocas que permitan realizar un riego manual con manguera en caso de avería en el sistema principal.

Para el diseño del sistema se ha dividido la superficie en tres sectores independientes, y cuyo abastecimiento se realizará a través de pozos de bombeo de aguas subterráneas y a través de una arqueta de bombeo que se abastece con agua procedente de la lámina de agua. La superficie total a regar se estimaba en unos 610.000m2.

Una red de abastecimiento de agua potable prevista en el parque tiene dos funciones: dejar previstas dos acometidas (una para el cortijo y otra para la nave de apoyo) y diseñar una red secundaria de abastecimiento para fuentes públicas.

En el mismo proyecto de “Restauración Hidrológica del Antiguo Cauce del arroyo Ranillas y Acondicionamiento ambiental del Parque Tamarguillo”, se eligió la construcción de una nueva sección para el canal de Ranillas y la reordenación paisajística y vegetal del entorno, como las soluciones más idóneas para restaurar el cauce del arroyo Ranillas y acondicionar el actual parque Tamarguillo.

La elección de una sección variable de aguas abiertas para el desvío del Canal de Ranilla atravesando en diagonal el parque es técnicamente viable, puesto que permite la circulación de los caudales que recogen el canal sin que se produzcan inundaciones en el resto del parque. En este sentido, la lámina de agua fija supone también un elemento regulador de las posibles avenidas que se produzcan.

El otro objetivo era la reordenación paisajística y vegetal del entorno, para lo cual se ha diseñado un espacio verde adaptado a las condiciones ecológicas del entorno y aprovechando en la medida de lo posible la vegetación existente en el mismo; la elección de especies se ha realizado teniendo en cuenta la facilidad de adaptación de las mismas al entorno y a las condiciones climáticas por lo que en su mayoría se trata de especies autóctonas y/o naturalizadas en el área mediterránea.

Para mejorar las condiciones ambientales del parque en esta actuación se realizará la plantación de especies ornamentales de porte arbustivo y arbóreo autóctonas y especies ornamentales que sean compatibles con las naturales de los alrededores, no compitiendo con ellas y no siendo eliminadas por las autóctonas. Mediante la misma, además de mejorar estéticamente la zona, se disminuye la evaporación de agua, se fija el suelo evita las erosiones, y se crea un espacio agradable que mejora la calidad ambiental del entorno.

El principal efecto socioeconómico basado en un desarrollo sostenible, que supone una mayor y mejor dotación de servicios urbanos, un estricto control de la incidencia medioambiental, la creación de unas condiciones de vida y de habitabilidad más agradables, y la generación de unas perspectivas de futuro en la sociedad que redundan muy positivamente en el aumento de la calidad de vida. Con estas actuaciones se pretende conseguir un espacio de ocio con los servicios necesarios para su uso y disfrute en las pertinentes medidas de seguridad y salubridad.

Las obras fueron adjudicadas en el mes de marzo de 2007 y se iniciaron el mes de mayo del mismo año.

Una vez comenzaron los trabajos, la Plataforma Movida Pro-parque, asociación de vecinos del Parque Alcosa de Sevilla, mostró su preocupación por ciertos aspectos que no venían recogidos en el proyecto de ejecución. Tras diversas reuniones mantenidas entre dicha Plataforma, Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, y las empresas citadas, se acordó por todas las partes la redacción de un proyecto complementario, y posterior ejecución de las obras, que completara las actuaciones definidas en el primero y que cubriera las necesidades planteadas por la Plataforma de vecinos.

El citado Proyecto de actuaciones complementarias del Parque del Tamarguillo T.M. de Sevilla, se centraba en tres objetivos principales:

  1. a) Creación de un Aula de la Naturaleza: Hay que destacar que no existe en Sevilla ninguna instalación de esta índole, si bien en la provincia existen diferentes Centros de Educación Medioambiental en los que se incluye un Aula de Naturaleza.
  2. b) Desarrollo de un Programa de Vigilancia Ambiental para establecer una serie de medidas que garanticen la correcta puesta en marcha y mantenimiento de las medidas preventivas y correctoras propuestas en el Estudio Ambiental del “Proyecto de Restauración Hidrológica del antiguo cauce del arroyo Ranillas y Acondicionamiento Ambiental del Parque Tamarguillo, T.M. de Sevilla”.
  3. c) Colocación de elementos de seguridad a lo largo del trazado del encauzamiento del arroyo Ranillas y del arroyo Tamarguillo, dado que se ha detectado, en el “Proyecto de Restauración Hidrológica del antiguo cauce del arroyo Ranillas y Acondicionamiento Ambiental del Parque Tamarguillo, T.M. de Sevilla”, la falta de elementos de seguridad a lo largo, tanto del nuevo encauzamiento del arroyo Ranillas, como de las láminas de agua creadas sobre el cauce del arroyo Tamarguillo.

En cuanto a los objetivos específicos que persiguieron con las actuaciones complementarias, se pueden destacar:

  • La conservación, mantenimiento y mejora del parque como medio natural, así como al desarrollo de programas de concienciación y formación de la población respecto a su parque, y funciones de oficina de información al ciudadano en temas medioambientales y del propio parque, objetivo buscado a través de la creación del Aula de la Naturaleza.
  • La correcta puesta en marcha y mantenimiento de las medidas preventivas y correctoras propuestas en el Estudio Ambiental del “Proyecto de Restauración Hidrológica del antiguo cauce del arroyo Ranillas y Acondicionamiento Ambiental del Parque Tamarguillo, T.M. de Sevilla.
  • Evitar situaciones de riesgo para los futuros usuarios del parque a través de la colocación de elementos de seguridad a lo largo del trazado del encauzamiento del arroyo Ranillas y del arroyo Tamarguillo.
  1. a) Creación de un Aula de la Naturaleza.

El Aula de la Naturaleza se creará aprovechando parte de las actuales instalaciones del Cortijo de San Ildefonso ubicado en la zona central del parque, y con la construcción de un pequeño edificio sostenible, integrado en el entorno, en la zona norte del parque.

Las actuaciones específicas que se ejecutaron son las siguientes:

  1. Adecuación del Cortijo de San Ildefonso:
  2. En su zona del Patio se llevaron a cabo demoliciones, la edificación de un elemento de cierre perimetral completo y adecuación del actual corral como espacio libre para exposiciones y otro tipo de actuaciones. Por último, se ejecutaron las instalaciones de alumbrado, recogida de agua de lluvia y alguna toma de agua.
  3. En la zona de la Oficina de Participación Ciudadana se llevaron a cabo demoliciones para el desmontaje de elementos obsoletos, y la edificación de cubiertas, tabiques, escalera, etc.…, intentando conservar el artesonado, así como los suelos de madera. Por último, se ejecutaron las instalaciones

de saneamiento, electricidad, etc., así como el sellado de un paso ciego que se presume que existía.

  1. Construcción de un Edificio Sostenible: Se realizará como apoyo a las instalaciones del Cortijo, cuyo conjunto formará el Aula de la Naturaleza. Se situará en las huertas vecinales cercanas a la A-4, y además de la construcción en sí, se ejecutarán las infraestructuras necesarias para dotarlo de electricidad y agua corriente.
  2. c) Colocación de elementos de seguridad.

Se detectaron la falta de elementos de seguridad a lo largo tanto del nuevo encauzamiento del arroyo Ranillas, como de las láminas de agua creadas sobre el cauce del arroyo Tamarguillo. En ambos casos se localizaron puntos críticos en los cuales resultaba indispensable la colocación de algún elemento protector, debido a la creación de taludes de cierta relevancia, y al carácter público que tendrá el espacio objeto de proyecto, una vez finalizadas las obras.

Por lo tanto y con objeto de evitar situaciones de riesgo para los futuros usuarios del parque, se ha planteo la necesidad de colocar en aquellas zonas que lo requieran, desde un máximo respeto por el entorno, talanqueras de madera y/o muretes de piedra para con objeto de conseguir la mayor adecuación paisajística de estos nuevos elementos.

No acabaron aquí las reivindicaciones, el PGOU de la ciudad de Sevilla contemplaba el trazado de la autovía SE-35 aproximadamente de tres kilómetros mediante un talud o terraplén con dos carriles por cada sentido. La obra afectaría a los yacimientos arqueológicos, a los diversos hábitats y al uso que se hace del parque de manera considerable, nuevamente Movida Pro Parque del Tamarguillo se movilizo hasta paralizar lo que ellos consideraban un disparate, destrozar el parque dividiéndolo en dos con afección a sus calidades ambientales.

El parque del Tamarguillo es un paraje fluvial de trazado longitudinal que se encuentra en la cabecera de dos históricos arroyos de Sevilla: el único tramo naturalizado del Tamarguillo, que le da nombre, y el antiguo cauce del arroyo Ranillas, que aún conserva los meandros a través de su llanura de inundación. La recuperación de este arroyo para el uso y disfrute de los ciudadanos, tal y como se está comprobando en su tramo de cabecera, beneficia en multitud de efectos positivos a los habitantes de Sevilla, además de devolver parte del pasado histórico a estas tierras de la vega del Guadalquivir.

Han sido fruto de una larga la historia de reivindicaciones y acciones emprendidas por los vecinos de Parque Alcosa en favor de la declaración de la cabecera del arroyo Tamarguillo como un gran Parque Público, Se trata del último cauce natural que se conserva del arroyo, donde aún son visibles los ancestrales meandros y la vegetación autóctona de ribera.

El parque contiene una amplia muestra de ambientes naturales mediterráneos, en los que encontramos predominantemente bosques mixtos de pinos, algarrobos encinas, alcornoques y acebuches, junto con formaciones de vegetación baja de especies autóctonas.

Unas plantaciones forestales con especies mediterráneas que establecen el bosque actual junto con algunas especies exóticas introducidas de climas sub tropicales las algunas zonas del Parque en las primeras plantaciones.

Apoyando la vegetación existente unos grandes eucaliptus, verdaderos ejemplares junto al discurrir del arroyo, los eucaliptos plantados en los cauces fluviales forman parte de una vieja política de control de las avenidas que se generalizó durante los años de la dictadura, el eucalipto fue llamado hasta árbol fascista, por las grandes plantaciones que se hacían de este árbol con fines forestales y de aprovechamiento para celulosa.

. Los terrenos del cortijo de San Ildefonso no fueron una excepción y en la década de los años cincuenta se plantaron una serie de ellos y se eliminó el último reducto de bosque autóctono de una de las márgenes del arroyo (a excepción de tres ejemplares). En su lugar se plantó un huerto de árboles frutales que continuó abasteciéndose por una vieja acequia rodeada de olmos silvestres cuyos restos son posibles contemplar a la derecha de la plaza pública y el mirador. No obstante, aunque se trate de especies alóctonas (de fuera), un número controlado de eucaliptos constituyen refugio y protección para las aves del parque y, de hecho, se han convertido en el posadero habitual de algunas especies. tanto diurnas como nocturnas.

La Vegetación está formada en lo que podemos denominar bosque mediterráneo por Pinus pinea – pino piñonero, Ceratonia siliqua – algarrobo ambos con una gran difusión, junto con Olea europea var.sylvestris – acebuche, Quercus ilex.-encina y Quercus suber.-alcornoques en menor proporción que se han desarrollado estupendamente a pesar del abandono que han sufrido durante años y en el terreno arcilloso donde están ubicados.

Estas especies conforman el 85 % de las especies plantadas en el Parque.

Introducidas y próximas al cauce figuran algunas Acacia bayleyana – Mimosa común y Acacia retinodes floribunda – Mimosa floribunda junto unos recién plantados Fraxinus angustifolia – Fresno.

En el cauce del arroyo aparecen los Tamarix gallica – tarajes, las cañas comunes -Arundo donax, algunos: juncos (Juncus inflexus), las ciperáceas (Scirpus sp.), o las tifáceas (Typha dominguensis) eneas, cauce colonizado por el Phragmytes australis -Carrizo, que colmata en algunos lugares todo el cauce y que conviene eliminar para facilitar el discurrir de las aguas y la visión de la lámina de agua que persiguió el proyecto.

Aparece de forma silvestre junto al cauce natural la única palmera endémica de la península, el Chamaerops humilis.-. el palmito, así como especies silvestres de acebuches, encinas, olmos y otras singulares que por su edad, porte e importancia dentro de nuestra ciudad merece la pena conocer y valorar, destacando el único ejemplar de rebollo (Quercus pyrenaica) del municipio.

En la parte oeste detrás del Cortijo San Ildefonso aparecen plantaciones de árboles ornamentales de clima subtropical, especies como las Ceiba speciosa – palo borracho procedente del Brasil o Argentina, la Phytolacca dioica originaria del Perú y Argentina, la Casuarina cunninghamiana. -Pino australiano y la Grevillea robusta – roble australiano ambas de origen australiano, la Tipuana tipu – Palo Rosa del Sur del Brasilla Jacaranda mimosaefolia – Jacarandá del Norte de Argentina, los Schinus molle – falsa pimienta originarias del Perú y Bolivia, junto con las Meliá azedarach – paraíso originaria de Himalaya y la India todas ellas de reconocida aclimatación en nuestro clima, ocupan una parte del parque en el Sector Oeste.

No falta en la zona de transición entre lo autóctono y lo exótico la plantación de unos Ginkgo biloba – árbol de los escudos de origen Chino y japonés que lógicamente no le auguramos un gran porvenir por la diferencia climática con su país de origen que hace que se desarrollen con mucha dificultad en nuestro clima, también un Ficus rubiginosa var. australis – Higuera herrumbrosa, árbol tropical más propio por su resistencia al calor.

Las masas arbustivas del parque están formadas por especies autóctonas plantadas en unas desordenadas masas verdes sin criterio formando agrupaciones donde se funden sus portes y volúmenes en unas desordenadas masas verdes donde predomina la ley del más fuerte.

Aparecen en estas agrupaciones los antes citados Chamaerops humilis – palmitos, la Pistacia lentiscus – Lentisco, las Phillyrea angustifolia – Labiérnago – los Mirthus communis – Arrayan, algún taraje Tamarix gallica, junto con olivillos – Teucrium fruticans y Phlomix fruticosa – Salvia de Jerusalén o Nerium oleander – adelfas y alguna Rosa canina – Escaramujo.

Los Spartium junceum – gayumbos, aparecen aislados en algún que otro grupo diseminado en el Parque.

Aparecen asimismo algunos naranjos amargos – Citrus aurantium var. amara restos de las plantaciones antiguas de frutales de cuando estos terrenos han sido tierra de labor de una explotación agrícola.

Unas Thuyas orientalis var. compacta – tuyas de bola aparecen cerrando una zona estancial.

En una de las zonas más urbanizadas del parque sorprende una organización de parterres elevados ejecutados con obra de fábrica, para albergar plantas aromáticas donde quedan representadas la Perovskia atriplicifolia – Salvia rusa, el Rosmarinus officinalis var postrata – romero rastrero, otras han desaparecido la zona conviene ser restaurado y repoblada.

Desde este punto de vista faunístico, la gran extensión del parque y la zona privilegiada donde se asienta, en la periferia de la ciudad, le proporcionan grandes ventajas para la atracción de las aves. Nos encontramos en una ciudad que cuenta con el mayor número de especies diferentes de aves de toda Europa.

Para una mayor información se puede acudir al departamento de Ecología de la Universidad Hispalense, Como figura en las conclusiones publicadas en el libro “Calles Aladas. Las aves de Sevilla y su entorno” (Figueroa C., Arroyo-Solis et. al, 2008), “el arroyo Tamarguillo es frecuentado por numerosas bandadas de especies migratorias avión común – Delichon urbica, vencejo pálido – Apus paludis y, sobretodo, por una gran cantidad de golondrinas – Hirundo rustica que aprovechan la abundancia de insectos voladores que se encuentran asociados al humedal para satisfacer sus necesidades de alimentación. Es también frecuente la existencia de muchas especies gregarias como el estornino negro – Sturnus unicolor y Fringílidos tales como el jilguero – Carduelis carduelis, verderón común – Carduelis chloris y verdecillo Serinus serinus , que son más numerosos en las zonas de arbolado. La proximidad del aeropuerto hace necesaria la utilización de rapaces como aves disuasorias para muchas de estas especies que pueden comprometer seriamente el tráfico aéreo. Esto dota de un atractivo inusual al Parque Tamarguillo para las grandes cazadoras de nuestros cielos.”

Diseminadas por el parque existen varias zonas de juego para niños y para adultos. Pistas de skating, mesas de ping pong, zonas para perros con elementos de movilidad, un pequeño auditorio y mesas para picnic etc…

Un carril bici discurre por todo el parque junto con amplios paseos y sendas que nos conducen a las zonas más paisajistas del parque donde el ciudadano puede encontrar y escoger sus espacios de ocio..

La recuperación de los arroyos merece especial atención en los que se han construido varios puentes y pasarelas para comunicar las distintas zonas del parque.

La limpieza del cauce en todo su recorrido hace que aparezcan láminas de agua, elemento esencial en el paisaje.

Atendiendo peticiones ciudadanas de la Plataforma Movida Pro-Parque del Tamarguillo el Ayuntamiento ha creado huertos en la zona Sur para atender las demandas ciudadanas, huertos escolares, huertos para discapacitados o huertas de ocio, que han tenido una gran aceptación entre los vecinos del Parque Alcosa, en los que se intenta que planten de manera ecológica.

Con gran éxito se han establecido en dos zonas del Parque Huertos urbanos, un conjunto de parcelas gestionadas que han tenido una gran aceptación entre los vecinos del Parque Alcosa. , en los que se intenta que planten de manera ecológica.

Hoy en día se califican como nuevos espacios verdes públicos con respecto a la posibilidad de la educación medioambiental que se pueda dar a través de ello a los escolares.

Espacios de gran valor social para sus participantes y para el intercambio entre generaciones con programas participativos donde el huerto, es el protagonista.

Atendiendo las peticiones que en su día se formularon, se ha creado junto al Cortijo San Ildefonso una Aula de la Naturaleza con el fin de desarrollar programas de concienciación y formación de la población con referencia al parque, o la información sobre temas medioambientales, así como los problemas de mantenimiento del propio parque que será uno de los objetivos principales del Aula.

El Ayuntamiento de Sevilla en un esfuerzo económico extraordinario, licita en mayo de 2012 la conservación y mantenimiento de las zonas verdes y el arbolado viario de Sevilla por cuatro años más dos de prórroga, en las que se incluye el Parque del Tamarguillo, este año se renuevan las contratas, se espera que con un continuado mantenimiento el parque no sufra los abandonos a que ha sido sometido desde sus inicios.

Parque Infanta Elena. – (De la descripción de Parques y Jardines)

El denominado Parque Central del Polígono Aeropuerto de 35.000 m2 surge de un proyecto del año 1977 que intentaba la creación de una gran zona verde que incluía el arroyo Ranilla y la parte posterior del cuartel allí existente (Cuartel de San Fernando). Diversas circunstancias, como la falta de los fondos necesarios, así como la aprobación en su día de un plan especial por parte de la Gerencia Municipal de Urbanismo, que reducía la superficie del futuro parque, aconsejaron retrasar su ejecución y redactar un nuevo proyecto. Este proyecto que no incluía la totalidad de la superficie inicialmente fijada para el parque estimaba en casi 304 millones de pesetas el coste de las obras. Ante esta situación el Ayuntamiento solicitó ayuda a la Unión europea. Ésta acordó participar en la financiación del proyecto costeando el 70% del total con dinero procedente de los fondos POMAL (Programas Operativos del Medio Ambiente local) mientras que el ayuntamiento aportaba el 30% restante.

El proyecto inicial contemplaba en realidad la revegetación y urbanización de varias zonas próximas entre sí para constituir un gran núcleo verde. En primer lugar, la ya señalada, que debía continuarse con la zona que va desde el arroyo ahora canalizado, hasta la autovía de circunvalación de la ciudad (SE-30), constituyendo la denominada segunda fase del parque. Además, una tercera zona entre el cercano barrio de Torreblanca, la sede de la empresa municipal de Limpieza (Lipasam) y las instalaciones del Parque acuático (de propiedad privada), abarcando una superficie cercana a las 28 has y por último una zona ya muy próxima al aeropuerto. Con ello se pretendía crear un gran parque que fuera el mayor de Sevilla con más de 50 Has.

Con anterioridad al año 1998 en que se inician los trabajos de construcción y trazado, ya existía en la zona que primero fue convertida en parque, una considerable masa arbórea que se había plantado para constituir un vivero. A principio de ese año, y con la subvención de la UE de cerca de 213 millones de pesetas, se empiezan a realizar labores tendentes a ampliar algo la superficie existente. Se reforestan para ello casi nueve hectáreas más utilizándose especies de fácil conservación y bajo consumo de agua. También se ejecuta el cerramiento del futuro parque, distinto según lindase con los barrios colindantes (postes verticales como los actuales) o más opaco si se tratara de la zona colindante con el cercano canal.

En el verano de 1999 se ultiman los diversos aspectos del diseño del parque que en principio abarcan en total una superficie de casi treinta y dos hectáreas comenzándose las obras. Se impermeabiliza la laguna de cerca de 5000 m² y 500 m de perímetro- que ha aprovechado la existencia de una hondonada natural. Se llena con agua procedente del nivel freático y será posible utilizarla para riegos, contando con una isleta natural en el centro para refugio y anidación de aves acuáticas. Debe también destacarse que las farolas que la iluminan funcionan con energía solar. Así mismo se diseña y construye uno de los elementos más singulares del parque: el denominado centro de recepción y mantenimiento. Edificación que se ha pretendido quede totalmente integrada en el entorno, construyéndola semienterrada y siguiendo las directrices de la arquitectura bioclimática. Es de planta circular y sección tronco-cónica abierta en su circunferencia superior. Exteriormente tiene aspecto de montículo cubierto de césped, con suave pendiente que hace fácil trepar y bajar sobre el mismo e incluso descansar y contemplar la gran masa verde del parque. Interiormente, en torno al patio central, se distribuyen distintas dependencias relacionadas con su uso. En noviembre de 2002 se instalaron nuevos juegos infantiles en madera y plástico que tienen la particularidad de distribuirse en dos zonas diferenciadas: una para niños de uno a seis años y otra para los comprendidos entre seis y doce.

Este parque constituye la principal zona verde del denominado Polígono Aeropuerto, una zona al Este de la ciudad, cercana al aeropuerto de donde toma el nombre- también conocida como “Sevilla Este” y con un notable incremento de áreas residenciales y de servicios en los últimos años. El mismo año de 1999 se le dio el nombre de Parque Infanta Elena que en la actualidad ostenta.

Se ha planteado con una fórmula de diseño muy semejante a la adoptada en el Parque del Alamillo, a la vista de la gran aceptación que este tipo de parques tiene entre la población a la que en principio va destinado.

No se ha diseñado, pues, bajo una premeditada geometría que siga planteamientos más tradicionales, como por ejemplo la solución adoptada en los jardines del Prado. No hay ejes de composición ni ordenación rigurosa en las plantaciones. No puede buscarse en ellos la rígida geometría de los estanques o de las fuentes, acompañados de vegetación subordinada a un esquema de fácil replanteo sobre el suelo, en muchas ocasiones presidido por la más absoluta simetría. No son parques de setos recortados, de parterres o arriates de formas reconocibles; tampoco de glorietas o de sendas rectilíneas delimitadas por bordillos, ni de alineaciones con cuidadas perspectivas, las más de las veces rematadas por un monumento.

Tampoco se sigue la ya clásica fórmula paisajista que enfrenta grandes praderas abiertas de césped a volúmenes arbóreos cerrados en una estudiada naturalidad. Es cierto que más cerca se encuentra de esta solución que de aquélla otra, pero con algunas variantes o modificaciones que sobre todo lo adaptan a las condiciones del entorno donde se sitúan.

El parque es, antes que nada, una numerosa y extensa arboleda que casi puede calificarse de masa forestal, principalmente a base de coníferas y en particular pináceas, que se distribuye con soltura y naturalidad por toda la superficie del mismo. La recorren sendas curvilíneas de albero compactado sobre árido de machaqueo -apenas ya visible- sin bordillo ni borduras y con acusado peralte a modo de caminos forestales que se adentran con decisión en la arboleda como si de un bosque se tratara. Una laguna – no estanque- es el punto hacia donde tienden a encontrarse todas ellas. Se trata de una zona abierta, más despejada, en contraste con la espesura del resto. La vegetación lacustre acentúa el carácter naturalista que se ha querido dar a esta lámina de agua sin forma regular y en la que nadan y viven en libertad bandadas de patos.

La valla que rodea todo el perímetro del parque y lo cierra está constituida por postes cilíndricos y verticales, espaciados para permitir la vista perpendicular y disminuir la tangente, siguiendo el modelo que se ensayó en el recinto de la Exposición Universal en la isla de la cartuja y que todavía hoy cierra el conjunto de los Jardines del Guadalquivir entre otros; allí era y es de color blanco, aquí se ha pintado en verde. Otros detalles ayudan a acentuar el carácter casi rural que ha querido darse a todo el parque. Los bancos de tablones de madera tratada no se sitúan en los bordes de las sendas, sino dentro ya del manto vegetal que antecede a los árboles, aunque próximos a ellas rara vez guarda relación su posición con el perfil de la senda que les acompaña. Las zonas de juegos infantiles sobre manto de grava se hallan arropadas también por el conjunto arbóreo que las rodea. No se ha podido aún modificar el trazado del tendido eléctrico que en la actualidad cruza el parque. De momento la base de sus postes convenientemente protegida y aislada se cubre con trepadoras (madreselvas).

Además de la gran masa de pinos (Pinus Pinea), es posible encontrar entre la vegetación del parque algunos cipreses (Cupressus sempervirens y Cupressus arizonica), catalpas (Catalpa bignonoides) y algunos eucaliptos y olmos especialmente en las sendas que bordean el lago. También arbustos como adelfas (Nerium oleander) y plumeros (Cortaderia selloana).

Es especialmente agradable contemplar el parque a primeras horas de la mañana o bien al atardecer, cuando casi sin público, el sol muy bajo se cuela entre los troncos de los árboles, dibujando siluetas que recuerdan los perdidos ambientes del campo.

El impacto de estos dos parques en el Poligono Sevilla Este.al margen de las zonas verdes que definen el Poligono, junto con áreas verdes todavía faltas de acondicionar para el disfrute de los ciudadanos supuso una gran ampliación de las zonas verdes de la ciudad.

 

EL IMPACTO DE LA EXPOSISION INTERNACIONAL DE SEVILLA. -EXPO 92´

Expo 92

La Exposición Universal de Sevilla 1992 se celebró en la capital de Andalucía (España) en el año 1992, y fue conocida popularmente como «Expo’92» o «la Expo».

La celebración del acontecimiento transformó la ciudad urbanísticamente y con ello las zonas verdes de la capital en este sector, a las que brevemente me voy a referir.

Para acoger la Exposición Universal se aprovecharon 250 ha de terreno agrícola en donde se ubicaba el histórico Monasterio de la Cartuja, donde vivió y estuvo enterrado varios años Cristóbal Colón.

“Estos terrenos habían sido expropiados por la Administración Central como consecuencia del ACTUR (Actuación Urbanística Urgente de la Cartuja) siendo posteriormente transferidos a la Junta de Andalucía en diciembre de 1983”

La transformación de estos terrenos, conocidos como la isla de la Cartuja, fue considerada la mayor obra pública de la década en Europa.

El Plan Director del Paisajismo de la Exposición Universal de Sevilla fue encargado al equipo formado por Jorge Subirana y Silvia Decorde, que realizaron el encaje de los espacios públicos verdes de las avenidas, los accesos y parques intramuros y perimetrales de la exposición.

Su intervención sentó las bases para una exposición, enclavada sobre una isla de aluvión, donde la vegetación corría a la par que la arquitectura incorporándose a los espacios verdes el «Proyecto Pérgolas» y el «Proyecto de Bioclimatismo» que sentó las bases en España para el desarrollo de un urbanismo medioambientalmente sostenible. Los responsables del proyecto bioclimático y sistemas de climatización de espacios exteriores fueron el Dr. Arq. Jaime López de Asiain junto a los directores en física Valeriano Ruiz Hernández y Jaime Navarro Casas todos catedráticos de la Escuela Técnica Superior de Sevilla.

En el diseño del paisaje tuvieron especial importancia varios elementos para el desarrollo en dos años de una ciudad arbolada. Por un lado, la incorporación de un equipo de paisajistas para el desarrollo del plan director del recinto. Por otro la incorporación al equipo de diseño de la organización de un arquitecto paisajista que velara por el desarrollo y la unidad de los proyectos arquitectónicos a partir de los ejemplares arbóreos. Junto a ello la decisión de incorporar un vivero de aclimatación y una central de compras propia que garantizaba la existencia de ejemplares arbóreos de gran tamaño repicados y disponibles en cualquier momento, así como la aclimatación y el cultivo de las especies donadas por los países iberoamericanos dentro de la «Operación Raíces» y la segregación de las obras de paisajismo de las obras de construcción, pionera en España, permitió garantizar la ejecución de los proyectos de paisaje en su integridad sin los vaivenes económicos propios de este tipo de obras.

También participaron en el proyecto Margarita Arencibia (1990) y Ricardo Librero (1990 a 1992) como paisajistas del Equipo de Diseño de Expo´92. Alberto García Camarasa como Director del «Programa de Forestación y Jardinería», teniendo a su cargo como directores de proyectos para la dirección de las obras de jardinería y paisaje a Juan Antonio Cabrera (1989-90), Ricardo Librero (1990-1992) y Mónica Magíster (1991-1992), para la dirección de las obras de infraestructura de riego y fertirrigación a Jesús de Vicente y la dirección del Vivero Expo´92 a Esperanza Romero. Junto a ellos el equipo de la Universidad de Sevilla dirigidos por el Catedrático Benito Valdés Castrillón que coordinó la Operación Raíces, cuyo asesoramiento permitió la ejecución del jardín Americano, a cuyo frente se incorporó durante la etapa expositiva como director del jardín, Mariano Martín Cacao, siendo el único recinto verde que contaba con un director dada la importancia de su contenido, equiparándose su estructura a la de los pabellones expositivos.

Entre los proyectos de paisajismo desarrollados para la Exposición Universal, muchos de los cuales aún hoy pueden contemplarse, destacaron: Parque Jardín del Guadalquivir,  Muro de Defensa y Bosque en Galería , Jardín Américano , Avenida 5 , World Trade Center , Avenidas 2 , Avenidas 1 y 4 y Camino de los Descubrimientos , Avenida de los Descubrimientos  Borde del Lago , Aparcamientos de Autobuses  Aparcamientos de Turismos , Pabellones de la Organizadora , pabellón del Siglo XV , Proyecto Pérgolas (A. García Camarasa), Cubiertas ajardinadas modulares y Avenida V (R. Librero), Proyectos de Infraestructura de Riego y Fertirrigación (J. de Vicente).

Los espacios verdes fueron protagonistas en pie de igualdad con la arquitectura y el urbanismo.

Con motivo de la Expo, Sevilla consiguió un logro bioclimático hasta nunca experimentado en la ciudad: disminuir la temperatura del recinto en 10 grados para contrarrestar el efecto isla de calor que había en las fechas de celebración del evento.

Desde que finalizó la Exposición Universal, no son pocas las opiniones críticas que se han lanzado contra la gestión de las instalaciones y los terrenos que ocupó Expo’92.

Finalizada la Expo 92 los espacios comunes. Jardin americano y Parque Jardin del Guadalquivir fueron entregados al Ayuntamiento para su gestión como espacios verdes de la ciudad, junto con el Muro de Defensa, Avda. de los Descubrimientos, Avda. Carlos III. calle Américo Vespucio etc.…. Entraron años de abandono, lo que durante seis meses había sido el orgullo de los sevillanos presentaba un aspecto desolador, nadie se hacía responsable, todo el mundo escurría el bulto, inaugurar si, conservar como siempre no entraba en sus planes ni presupuestos.

De todo lo que se perdió de la Expo, lo más llamativo puede ser el sistema de bioclima que se logró en la Cartuja. La urbanización y ajardinamiento del recinto jugaron un papel fundamental, en el que sobresalieron dos elementos llamativos: las pérgolas vegetales y la esfera bioclimática. De las pérgolas una parte se sigue utilizando en el parque tecnológico, mientras que otras piezas se han reubicado delante de la Estación de Santa Justa. Las otras unas permanecen sin vegetación en el Jardin Americano y otras convertidas en chatarra están amontonadas al lado del rio La esfera bioclimática no ha sido puesta en valor y se mantiene solamente como adorno en la avenida de Marie Curie.

Y así pasaron los años hasta que en 2010 se reabrieron rehabilitadas algunas zonas verdes de la exposición: los jardines del Guadalquivir y el jardín americano y los, aunque la multitud de plantas que se mostraron en este parque en el 92 ha quedado reducida a poco más de la mitad a pesar de que en la rehabilitación del Jardín Americano. -Jardines del Guadalquivir y Paseo de Ribera., se han invirtieron 8,5 millones de euros.

Sin embargo, otros espacios no se han respetado. Por ejemplo, espacios de referencia internacional como la Avenida 5 diseñada por el Grupo Site de Nueva York, uno de los pocos ejemplos de la arquitectura deconstructivista de España, ha sido modificada hasta hacerla irreconocible.

Además, se han perdido activos muy atractivos desde el punto de vista cultural y turístico recientemente, se han reabierto los Jardines del Guadalquivir, espacio recuperado por el Ayuntamiento de Sevilla y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Con la reapertura de este Parque se pone en valor un conjunto de zonas entre las que también se encuentra el Jardín Americano donde se ha instalado un Aula Bioclimática que tendrá un uso educativo.,

A pesar de los intentos del Ayuntamiento, la gestión de estas áreas incorporadas al Patrimonio verde de la ciudad continúa en un estado deplorable indignas de figurar dentro de los circuitos turísticos de la ciudad como zonas de interés a visitar.

Sevilla.-Parque de San Jerónimo y Parque del Alamillo

DOS HITOS DE LA EXPO EN LOS QUE SE REFIERE A LAS AREAS VERDES

El Parque del Alamillo, que comenzó ocupando 80 hectáreas y más tarde se extendió hasta las 120 se encuentra situado entre los términos municipales de Sevilla y Santiponce, sobre la originaria huerta agrícola del Alamillo, perteneciente a la demarcación de la Iglesia Parroquial de la O, dentro del Quinto distrito de Triana.  Es un sitio singular en la historia de Sevilla, que se encuentra rodeado de lugares claves por su tradición e historia, como los monasterios de la Cartuja, San Jerónimo y San Isidoro del Campo, el río Guadalquivir o el Cortijo de Gambogaz.

Los últimos  propietarios abandonan definitivamente la finca del Alamillo en 1978, tras la expropiación realizada por el Ministerio de la Vivienda, con motivo de la construcción de la Corta de la Cartuja Como resultado de la transformación que se llevó a cabo en esta área en torno a 1992, se realizó la Exposición Universal y la Junta de Andalucía construyó el Parque del Alamillo, gestionado desde su origen por la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (antes Empresa Pública de Suelo de Andalucía), dependiente de la Consejería de Fomento y Vivienda.

El actual Parque del Alamillo fue inaugurado el 12 de octubre de 1993, en la misma isla, pero al norte del recinto una vez finalizada la muestra. Las zonas verdes de toda la isla, incluido el parque, respondían al Plan de Reforestación del Polígono de la Cartuja de 1985.

El parque fue inaugurado con 47 ha. y permaneció así durante 15 años. En 2009 se le incorporaron 10 ha (entre las que estaba un antiguo vivero de la Expo) y en 2010 se le incorporaron 15 ha más. En 2014 hubo una nueva ampliación de 40 hectáreas.

En 2004 el Ayuntamiento de Sevilla y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir firmaron un convenio9 para la regeneración del entorno de los cursos fluviales de la ciudad. Este plan incluyó una gran remodelación del Parque de San Jerónimo, su ampliación en 11 ha y la creación de una pasarela para comunicarlo con el Parque del Alamillo.

Es una de las zonas de la ciudad que tiene un área dedicada a huertos urbanos.

El Parque del Alamillo pone sus espacios a disposición de organizaciones, entidades y asociaciones sin ánimo de lucro y colabora con ellas en la organización de actividades adecuadas a las características y al entorno de este espacio.

El Parque del Alamillo establece en el ámbito de Sevilla una nueva forma de entender la jardinería. Con clara vocación de entenderse como un parque paisajista de carácter urbano, el Alamillo juega con masas vegetales evocando los diferentes ecosistemas de las áreas mediterráneas, usando para ello las especies propias de nuestras sierras, riberas y bosques, a las que dota de un nuevo valor ornamental.

El terreno original donde se implanta el parque, de una topografía sensiblemente horizontal, se alteraría para obtener de la zona las cualidades paisajistas que en ella se requerían. El conjunto resultante con lagos, caminos peatonales, y las masas vegetales hacen del Alamillo un parque moderno de gran actividad.

OPERACIÓN RAICES. -JARDIN AMERICANO

La organización del programa fue a cargo del Gabinete Técnico de la Oficina del Comisario General para la Exposición Universal y del Equipo Asesor para Reforestación, conformado este por un grupo de investigadores del Departamento de Botánica, Biología Vegetal y Ecología de la Universidad de Sevilla. Este grupo se encargó, desde el año 1985, en hacer la previsión de materiales vegetales que iban a ser necesarios para ajardinar el recinto. Y por supuesto de las condiciones para hacer el acopio en los viveros creados al efecto. De esta forma se trababa que disponer de las plantas y conseguir que en el momento de su plantación alcanzaran el mayor tamaño posible.

En Julio de 1987 el Comisario de la Exposición en aquel entonces D. Manuel Olivenza de dirigió a los embajadores de España en los países de Iberoamérica para que solicitasen de las autoridades de dichos países el envío de plantas nativas con destino a las áreas ajardinadas de la Exposición.

El programa resultó tener un gran éxito. De hecho, logró la participación de los países de americanos en el Plan de Reforestación y ajardinado del recinto. Lográndose una variedad de especies nunca vista en España, añadiendo por ello mayor atractivo al certamen.

El resultado final fue la llegada a Sevilla, desde 21 países, 2014 ejemplares pertenecientes a 619 especies vegetales americanas,

El transporte se realizó por vía aérea, salvo en el caso de las plantas enviadas por Cuba. Estas hicieron el transporte por carretera entre Madrid y Sevilla dado el volumen de las cajas que contenían las plantas, que no cogían en el avión.

El destino final eran los viveros de la Expo, que hoy en día continúan formando partes de las instalaciones del Parque del Alamillo. En estos viveros serían aclimatadas las nuevas especies por Alberto García Camarasa, director del Servicio de Parques y Jardines de la EXPO’92, y Mariano Martín Cacao, entonces coordinador del Jardín Americano, entre otros técnicos.

Fue tal la diversidad vegetal que la Expo construyó el llamado Jardín Americano que, con 2 hectáreas, permitía a los visitantes contemplar la mayoría de estas especies durante los seis meses que duró la Muestra.

Hoy en día parte de este legado vegetal se ha perdido por la dejadez de las administraciones. Y además por lo que suele suceder en general con los jardines y sus plantas: la poca conciencia de que son seres vivos que hay que cuidar, nadie asumió su mantenimiento. Y así han pasado los años hasta nuestros días.

Pocos asumieron que era la mayor introducción de plantas americanas realizada en la historia un trabajo ímprobo de recolección a través de los países de Iberoamérica y de su aclimatación en el Jardin Americano. Se han perdido muchas, que yo sepa no se ha reproducido ninguna para su introducción en la jardinería ornamental española, Alberto García Camarasa multiplico y conservo algunas en los que fueron Viveros de la Expo, cuando se convirtieron en Viveros de Puertos del Estado y al final en una sección del Parque del Alamillo, donde en uno de sus invernaderos se pueden contemplar todavía alguna especie. Salvo algunas que la asociación de Amigos de los Jardines de la Oliva, que con su labor ha recuperado y mantenido algunas de las especies que se trajeron en este programa.

Los jardines han pasado a depender del Ayuntamiento de la ciudad y hasta ahora su gestión ha sido un desastre.

REGENERACION DE SOLARES DEGRADADOS. -FONDOS POMAL. -1999-2002

La transformación urbanística sufrida como consecuencia de las infraestructuras creadas para la EXPO’92 originó la rápida expansión geográfica de la ciudad sin que se ampliaran las zonas verdes existentes, ya de por sí escasas

Ante esta situación, el Ayuntamiento de Sevilla, apoyándose en la cofinanciación de los Fondos Estructurales de la Unión Europea, decidió poner en marcha el proyecto «Sevilla Ciudad Verde» destinado a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y la prestación de los servicios públicos.

Entre sus intenciones estaba la creación del cinturón verde en la SE-30 y la Recuperación de Solares Degradados, solares que desmerecían mucho principalmente en los accesos a la ciudad producto de un descontrolado vertido de residuos procedentes de la intensa actividad constructiva llevada a cabo en esta época y por qué no decirlo por el incivismo de quienes construían que utilizaban cualquier solar para verter sus escombros.

Nace el Proyecto de Regeneración de Solares Degradados en el Término Municipal de Sevilla, no estando incluidos la mayoría de los solares o parcelas a regenerar en el Sistema General de Espacios Libres y Zonas Verdes que contemplaba el PGOU entonces vigente.

Lo cierto es que se realizaron actuaciones en varias parcelas a través de fondos POMAL con una inversión de 1.477 millones de pesetas y un tratamiento consistente en la regeneración de los solares, limpieza de los mismos, remodelación topográfica y reforestación de los espacios con miles de árboles y arbustos y muchos metros lineales de cerramientos, nadie pensó que una vez finalizadas las obras había que conservarlo.

La actuación laudable fue un fracaso al ser robados los cerramientos de las parcelas, arder en verano las plantaciones, secarse muchos de los árboles y arbustos plantados, aunque algunos superaron estos años de abandono. Triste experiencia a pesar de las buenas intenciones, aunque la creación de nuevas zonas verdes, ver árboles en las parcelas, aún sin estar programadas el Plan General de Ordenación Urbana de la Ciudad, era siempre era mejor que ver los vertidos incontrolados de escombros.

Allá por el año 2000 acabaron las actuaciones y empezó el abandono de las plantaciones en las parcelas donde se había actuado.

Las nuevas zonas verdes y los numerosos beneficios medioambientales que se preveían fueron una quimera, el dinero invertido en las plantaciones un despilfarro, no se consiguió lo que se pretendía, alguien se olvidó que había que conservar lo realizado.

Algunas parcelas subsistieron y sus plantaciones, ya muy mermadas,

Sevilla.-Parque Riberas del Guadaira                                                                                                        Acacia pendula

FONDOS EUROPEOS CONVENIO ENTRE CONFEDERACIÓN HIDROGRÁFICA DEL GUADALQUIVIR Y GERENCIA DE URBANISMO DEL AYUNTAMIENTO DE SEVILLA

Las ultimas a través del Convenio entre la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla a través de Fondos Europeos, que ha supuesto una gran ampliación de las zonas verde de la capital. Parque Vega de Triana en el Charco de la Pava. Parques Guadaira II y Riberas del Guadaira, Parque Miraflores II, Parque Palmas Altas etc.…

Parque del Tamarguillo. -94 has.

Ubicado dentro del Área Metropolitana de Sevilla entre las instalaciones del Aeropuerto de Sevilla y la Barriada Parque Alcosa en los terrenos del Cortijo San Ildefonso.

Con una superficie de 94 hectáreas, está limitado al Norte y al Este con los terrenos del Aeropuerto de San Pablo de Sevilla. Incorporadas como Patrimonio de la ciudad, aunque existían como Parque forestal en la actuación sobre solares degradados.

Parque de las Riberas del Rio Guadaira

Ha supuesto la integración paisajística del parque des de la Carretera de Su Eminencia hasta el propio cauce del Guadaira con la conformación de una masa arbórea con especies autóctonas que faciliten el uso del Parque como lugar de ocio, con el consiguiente acondicionamiento ambiental y sus correspondientes equipamientos. Incorporadas como Patrimonio de la ciudad, aunque existían como Parque forestal, actuación sobre solares degradados.

Parque Vega de Triana, las Riberas del Rio Guadalquivir,

Parque del Charco de la Pava y zonas verdes y espacios libres de la margen derecha.

La particularidad de la zona es que debía de seguir siendo aparcamiento de vehículos durante los días de la Feria de Abril y debía respetar las instalaciones del Instituto Municipal de Deportes que existen en la zona.

Se han creado nuevos elementos paisajísticos con una nueva modelación del terreno creando lomas, senderos y plazas en todo el espacio de sus 80 hectáreas. Incorporadas al Patrimonio verde de la ciudad.

Parque San Jerónimo

El tramo de las riberas del Guadalquivir entre el Puente del Alamillo y el tapón de la Dársena en su lado izquierdo existían plantaciones producto de una intervención anterior realizada por la Gerencia de Urbanismo en el año 1991.

Ha supuesto la modificación del trazado existente con nuevos tratamientos de las márgenes y su reforestación, en las 11 hectáreas ordenan la movilidad dentro del nuevo espacio verde creado y marca los itinerarios y los espacios de ocio y esparcimiento potenciando las vistas sobre el rio. No incrementan el Patrimonio verde, ya que existían y estaban computadas con anterioridad.

Parque Palmas Altas en las márgenes del Rio Guadaira

Se trata de una actuación en el cauce artificial construido y prestando servicio desde hace años con la recuperación de terrenos degradados. El parque lineal construido en ambas márgenes del cauce actual crea zonas entre la naturaleza y lo urbano, ordena espacios para el uso colectivo y disfrute de la población como zonas de recreo. Incorporadas al Patrimonio verde de la ciudad.

Parques de las riberas del Rio Guadalquivir. -Jardines del Guadalquivir, Jardín Americano y Paseo de Ribera.

El proyecto en sí, en su mayor parte ha consistido en la construcción de una pasarela flotante en las márgenes del jardín americano que permite la continuidad del paseo fluvial de la margen derecha de la Dársena que comunica con el Paseo de Ribera, sin necesidad de atravesar por el Jardín Americano.

En lo que se refiere al Jardín Americano los trabajos más importantes han sido la reparación de todas las instalaciones existentes, ampliación de la zona de umbráculo, acondicionamiento de las redes de riego y las plantaciones realizadas en la ampliación de la rocalla de cactáceas y algunas en la zona de umbráculo con plantas de origen americano que vienen a engrosar el número de géneros y especies que con motivo de la Expo 92 y a través de la Operación Raíces se introdujeron en el jardín.

Los Jardines del Guadalquivir has sido recuperados en parte, desconocidos por muchos sevillanos, faltos de una conservación más esmerada y un plan de actividades para ponerlos en valor y a disposición de los ciudadanos como un elemento cultural donde su hilo conductor nos introduce a la historia de los jardines.

Las actuaciones en los jardines, abandonados hace años ha sido imperceptible, el abandono sigue siendo su sino.

Jardines del Guadalquivir

Parque del Muelle Nueva York. – Tramo comprendido entre el Puente de San Telmo y Puente de los Remedios.

La reforestación de este tramo del paseo fluvial ha supuesto poner en uso para los ciudadanos un espacio abandonado en el centro de la ciudad en la margen izquierda de la Dársena del Rio Guadalquivir a su paso por la ciudad.

Entre las diversas actuaciones llevadas a cabo de mejora y acondicionamiento nos centramos en lo que ha supuesto la repoblación de árboles y jardines del paseo fluvial. No ha supuesto una ampliación del Patrimonio verde, ya que ya estaban contabilizadas.

Parque Miraflores II.- Cauce del Arroyo Miraflores.

El Parque de Miraflores se sitúa en el sector Norte de la ciudad de Sevilla formando parte del Plan General de Espacios Verdes de la Ciudad.

El Ayuntamiento a través de la G.M.U. había actuado en una primera fase con unos proyectos de adecuación y plantaciones del Parque Miraflores en lo denominado 1º FASE. con una gran inversión que fue abandonada y vandalizada al no ser conservadas las plantaciones ni las instalaciones, solo algunas plantaciones sobrevivieron al abandono.

Se recuperó el cauce del Arroyo Miraflores y adecuaron las 45 hectáreas como zona de recreo para disfrute de la población. Ha supuesto la incorporación de las de las 45 hectáreas al Patrimonio de las áreas verdes de la ciudad.

Parque Guadaira II

Parque en el Antiguo Cauce del Rio Guadaira entre Heliópolis, Bermejales y Su Eminencia,

En total 60 hectáreas a lo largo de tres kilómetros desde la Avda. de la Raza a la Avda. de la Paz, de este territorio sobre todo en la zona desde la Carretera de Pineda hasta la Avda. de la Paz se había intervenido anteriormente en los proyectos de Recuperación de Solares Degradados de cuya actuación solo quedaron algunas plantaciones. Ha supuesto la incorporación de las de las 60 hectáreas al Patrimonio de las áreas verdes de la ciudad.

Rehabilitación y urbanización del paseo de Nuestra Señora de la O

El proyecto supuso la rehabilitación y repavimentación con adoquines, obras de reforma que consistieron en la instalación de dos embarcaderos en la lámina de agua y puestos de pesca en la margen del paseo, nuevo alumbrado y restauración de las esculturas. No supusieron ampliación del Patrimonio verde de la ciudad.

¿El crecimiento de estas superficies dedicadas a zonas verdes ha aumentado la calidad de vida de los ciudadanos?

¿No falseamos la realidad al incrementar las cifras de m² de zona verde por habitante al crear nuevas zonas y abandonarlas después?

Las zonas verdes urbanas reales son siempre y únicamente las incluidas en el planeamiento y en cuya gestión el Ayuntamiento asume la obligación de su conservación y mantenimiento.

Cuando en la ejecución de este planeamiento, no participa el ciudadano consciente de las necesidades generales de la ciudad, no sólo no pueden mejorar su calidad de vida, sino que puede ocurrir todo lo contrario.

Ocurre frecuentemente que el esfuerzo financiero de su primera ejecución, realizado con el dinero de todos, ha cumplido lo que política y técnicamente establecía el planeamiento, el uso del terreno era el de zona verde, sin embargo, en muy poco tiempo el abandono, el vandalismo y la destrucción la convierten en un erial o son poco usadas por el ciudadano

Cada vez son más divergentes los gastos en inversión y los de conservación.

Queremos crear, construir, inaugurar, …, nadie quiere conservar, mantener, cuidar …, cuando éste es el verdadero éxito de la gestión.

Conservar y mantener lo mínimo, pero lo necesario, para que las inversiones que se realicen aporten verdadera

Sevilla.-Jardines de Murillo.-2017

calidad de vida al ciudadano.

La calidad bien entendida es primordial, subjetiva por naturaleza, no se deja fácilmente definir, su éxito siempre estará basado en el arte de la buena ejecución de la obra.

Debemos alejarnos de los diseñadores doctrinales, que la mayoría de las veces no tienen los pies sobre la tierra, y de los gestores iluminados encargados del mantenimiento posterior, así como de la triste banalidad del «ciudadano funcional» contemporáneo.

Aprovechemos las mejores experiencias realizadas con éxito en otros países que nos pueden servir como elemento de referencia para nuestra propia y singular elaboración, los políticos, los profesionales y los usuarios son los que deben utilizar sus propias palabras para poner en juego nuestros propios deseos.

Lo que debe primar es el criterio sobre las realizaciones.

Mi deseo es que este trabajo motive diálogos, genere encuentros, movilice actividades, promueva asimismo la creación de grupos interdisciplinares que jerarquicen la importancia de los espacios verdes en la ciudad y dinamiten la indiferencia o indefensión de los ciudadanos con respecto a su importancia.

Calidad de vida supone calidad del entorno donde vivimos, debemos rechazar la cantidad, si no llega aparejada de la calidad. Ofrezcamos a los ciudadanos unos espacios verdes que satisfagan sus deseos y nos den una mejor calidad de vida en las ciudades.

«Es preciso imperativamente reducir el volumen de desplazamientos y el uso del coche privado». «Hay que reconquistar el espacio social de la calle». «Es indispensable un esfuerzo continuo de formación».

Sevilla.-Plaza de Refinadores.-Barrio de Santa Cruz

UN POCO DE HISTORIA. -( Escribíamos en el 1981)

Sevilla perdió los verdaderos núcleos convivenciales de sus plazas y los patios interiores de las típicas casas sevillanas, grandes espacios que colaboraban en gran medida como esponjadores de la trama urbana. Durante este período, se restauraron y reformaron muchas plazas existentes en toda la ciudad.

Sevilla ha alcanzado un crecimiento demográfico importante, la ciudad ha crecido y sus zonas verdes no, existe déficit de espacios verdes, y zonas donde la naturaleza pueda ser contemplada y disfrutada.

Los parques y jardines de Sevilla constituyen actualmente un patrimonio verde de características muy especiales en el contexto de los parques y jardines públicos de las principales ciudades del país, al igual que los elementos artísticos y arquitectónicos situados en un gran número de espacios, especialmente en los jardines históricos.

El elevado número de árboles que hay en la ciudad es otro patrimonio de gran valor, sobre todo aquellas especies vegetales que, por el hecho de ser arbolados históricos, merecen ser consideradas especies de singular identidad.

En 1981 Sevilla inventariaba un total de 152 Ha de zonas verdes, con una superficie verde útil por habitante de 1.82 m², una cifra realmente muy baja, a la que se añadía el factor agravante de la mala distribución de las mismas en la ciudad; favorecido el Sector Sur y Centro, el resto de los distritos eran totalmente deficitarios.

El auténtico déficit de zonas verdes, era más un problema de falta de voluntad política y de ejecución del Planeamiento, entre otros factores. Los planes por etapas previstos no se ejecutaban, las actuaciones se limitaban a las rentables o a las de iniciativa privada. La falta de capacidad de gestión municipal y la incapacidad económica del municipio imposibilitaron el desarrollo del P.G.O.U. de 1962. La consecución de suelo a través de expropiaciones era una rémora para la economía municipal.

Posteriormente las actuaciones de los Organismos Centrales también distorsionaron acusadamente el Planeamiento, el Área de la Cartuja, el Polígono del Aeropuerto, el Polo de Desarrollo entre otros, nadie estaba en contra de estas actuaciones, pero hemos de reconocer que distorsionaron el P.G.O.U. Con las actuaciones que se llevaron a cabo en estas fechas, se programó la construcción de 223 Ha destinadas a Parques urbanos y estructura de esparcimiento en el Polígono del Aeropuerto -ahora Sevilla Este- no programadas el Plan y de difícil gestión en cuanto a su adecuación, conservación y mantenimiento, si no se buscan recursos para ello, ahora que el ciudadano reclama su acondicionamiento.

Una nueva Ley del Suelo y la revisión del P.G.O.U. de la ciudad y la creación de la Gerencia de Urbanismo podría solucionar muchos problemas en la ciudad.

Sevilla.-Torre Perdigones

La primera porque en la nueva ley, como es sabido, todas las zonas destinadas a equipamientos comunitarios e infraestructuras han de ser cedidas gratuitamente a la administración como un componente de la justa compensación que se exige a los propietarios de los beneficios derivados del proceso urbano independiente de la cesión del 10 % de suelo edificable para formación del Patrimonio Municipal.

El segundo porque sería el elemento de gestión eficaz que posibilitaría el cumplimiento del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad aprobado.

El desarrollismo de los años siguientes añadió un componente más despersonalizado del proceso del planeamiento urbano, que cobró un carácter sólo cuantitativo, bajo la óptica del mercantilismo inmobiliario, ayudado de cerca por el trato favoritista de la Administración

La ciudad que es el lugar cuyo aire hace libre al hombre y reúne un conjunto de recursos y atractivos indudables, se convirtió en un puro objeto de la especulación urbanizadora, acumulando problemas sólo característicos del medio urbano (la contaminación atmosférica y sónica, las islas de calor urbano) transformándose en el modelo del que se protegen todavía hoy los ciudadanos y del que huyen -los que pueden- en desbandada los fines de semana.

Hemos permanecido al margen de las corrientes urbanísticas durante decenas de años. Sin saber si es peor la terquedad o la ignorancia de los urbanistas que desde los años sesenta a los noventa se pasan el relevo sin inflexiones de interés en lo que se refiere al tratamiento ambiental, paisajista y ecológico de la ciudad.

El Plan General de Ordenación Urbana P.G.O.U.

El Plan reconoce que el sistema de espacios libres contribuye básicamente a estructurar la ciudad. Jardines, parques, plazas y conjuntos vegetales, constituyen elementos esenciales para la mejora de la calidad de vida, deben ser bien concebidos y los árboles que constituyen su armadura esencial bien dispuestos, bien elegidos y bien plantados para crear los volúmenes y los ambientes que respondan a las aspiraciones de los ciudadanos.

¿Y si fuera el vegetal el que ordenara la urbanización? ¿Y si fuera el jardín quien genera la ciudad y la hace funcionar?

¿El urbanismo, no es en el fondo el arte de construir edificios en los cuales la organización debe permitir una vida social y de ocio a través de una asociación de viviendas, comercios y actividades de todas clases? El P.G.O.U. aprobado reconoce la gran carencia de espacios libres formalizados para estancia y solaz de la población en la periferia y propone consolidar una serie de espacios exteriores a la ciudad con carácter de espacios abiertos naturales, con intención cautelar y protector de expectativas urbanas.

Destaca que la localización de grandes espacios abiertos en las ciudades se conforma más a partir de las oportunidades que de los modelos preconcebidos.

¿Cuántas veces los buenos parques han surgido de oportunidades no buscadas? San Telmo, Parque de María Luisa, Prado de San Sebastián, son sólo unos ejemplos.

Sin embargo, los modelos ideales, cultos y académicos serán una

Sevilla.-Jardines del Prado de San Sebastian

referencia en la búsqueda y selección de oportunidades y en la decisión de su formalización en la ciudad.

Algunos parques nuevos, de oportunidad reciente y hasta ahora desconsiderados, se han podido incorporar a la trama verde de la ciudad, rompiendo el anillo de parques periféricos propuestos en el Plan, el Parque de la Calzada y Santa Justa, los Jardines de la Buhaira, el nuevo parque de la Barqueta y el de San Jerónimo, son nuevas posibilidades que aporta el Plan y cuyas construcciones se han terminado.

Otro espacio abierto periférico a destacar, clasificado como suelo urbanizable protegido, es el situado entre el muro de defensa de Triana-Los Remedios y el río (conocido como el Charco de la Pava hasta el puente de San Juan de Aznalfarache).

Con referencia al primero de los espacios citados el parque equipado de la Cartuja, su transformación ha sido total. Sevilla consiguió la organización de una Exposición Universal a celebrar en 1992, EXPO-92, eligiéndose los terrenos de la Cartuja para su celebración, la ciudad estaba totalmente en marcha para prepararse para el evento.

La ciudad vería ampliado su patrimonio verde con la celebración del certamen. Terrenos a preservar se habían convertido por actuaciones ajenas al P.G.O.U.  en zonas urbanizadas, de equipamiento y con gran profusión de espacios verdes.

El Núcleo Central constituye en sí mismo un parque, el Parque del Alamillo, en una primera fase de 47 Ha. con posibilidad de ampliarlo a 80 Ha. cuando se liberalicen los terrenos ocupados transitoriamente por la EXPO, nace promovido por la Empresa Pública del Suelo de Andalucía (EPSA), equipado con accesos rodados, aparcamientos, mobiliario urbano, pavimentos y todas las infraestructuras básicas; la ciudad cuenta con 480.000 m² de zona verde para atender las necesidades del deficitario Distrito Macarena.

Qué duda cabe que si la Exposición Ibero-Americana fue un revulsivo para la ciudad, la Exposición Universal de 1992 ha supuesto una importante remodelación urbana de la misma, en la que los espacios verdes no han sido una excepción. Pasada la Exposición y finalizadas las obras que ha comportado, he estimado el momento de reflexionar sobre lo que ha hecho en la ciudad, y sobre lo que queda por hacer del planeamiento previsto.

El incremento de los espacios libres y zonas verdes ha sido notable como se comprueba en las estadísticas que se presentan, más si se comparan con las del año 1981. La ciudad ha pasado de disponer de 1.84 m² de zona verde por habitante a 8.60 m² en 1996.ahora elevados a 14 m2 por habitante.

Con estos datos podemos observar las diferencias existentes de un distrito a otro, lo que da una imagen de la distribución de las zonas verdes de la ciudad.

Datos estadisticos de 1981

DISTRITO I:  CASCO ANTIGUO              4.19 m²/ha

DISTRITO II:  MACARENA                       12.90   «

DISTRITO III NERVION                            1.02   «

DISTRITO IV: ESTE                                    18.24   «

DISTRITO V:  SUR                                         5.74   «

DISTRITO VI: TRIANA-LOS RE.                4.01   «

Datos estadísticos actualizados 2017.

RESUMEN DE M2 DE ZONA VERDE POR HABITANTE y DISTRITO

DISTRITO CASCO ANTIGUO………………………………………………………………….                         8.12 m2

DISTRITO CERRO-AMATE………………………………………………………………………                       9.16 m2

DISTRITO ESTE-ALCOSA-TORREBLANCA……………………………………………….                      30.07 m2

DISTRITO LOS REMEDIOS…………………………………………………………………….                      11.66 m2

DISTRITO NORTE…………………………………………………………………………………                       16.01 m2

DISTRITO MACARENA………………………………………………………………………….                         4.59 m2

DISTRITO NERVIÓN…………………………………………………………………………….                          3.16 m2

DISTRITO SAN PABLO-SANTA JUSTA……………………………………………………                         3.47 m2

DISTRITO SUR……………………………………………………………………………………….                     24.99 m2

DISTRITO TRIANA……………………………………………………………………………….                       60,12 m2

En el inventario del 1981 se observa :

El Distrito Nervión es el menos beneficiado, junto con Triana-Los Remedios y Casco Antiguo.

Distrito Macarena

La construcción del Parque del Alamillo por EPSA con 120 Ha., la incorporación de los Parques de San Jerónimo, Miraflores y Pino Montano con un total de 110 Ha. y el Paseo Rey Juan Carlos I, suponen una gran aportación de espacios verdes en el distrito.      Las posibilidades de ampliación de las zonas verdes de este distrito son esperanzadoras con la ejecución del Parque Norte, el Parque de la Barqueta, los Parques de Pino Montano y otras VI previstas en el P.G.O.U.

Distrito Este

Favorecido en los estándares de zonas verdes por la inclusión de los parques forestales existentes en el Polígono Sevilla Este, pendientes de su adecuación a espacios públicos, las grandes superficies de estos parques disparan los m² por habitante en el Distrito.

Sus posibilidades de ampliación se basan en la construcción de las V3 previstas en el P.G.O.U. y de ellas, las más importantes son el Parque de Torreblanca con cerca de 4 Ha. y el Parque Suburbano de la Hacienda de San Antonio con un total de 15 Ha.

Distrito Sur

Los espacios verdes más emblemáticos continúan siendo el Parque de María Luisa, los Jardines de las Delicias de Arjona y los Jardines de San Telmo, a los que se les ha incorporado el recién construido, pero todavía no abierto Parque Celestino Mutis y los Jardines del Prado de San Sebastián, con un total de 9,5 Ha.

Sus posibilidades dotacionales según el P.G.O.U. son mayormente las construcciones del Parque de los Bermejales y el Parque Guadaira-Sur, así como las dos V1 previstas en la Barriada de Bellavista.

Como colofón a las posibilidades de actuación que nos da el planeamiento incluiríamos las márgenes del río Guadalquivir, que deben constituir un elemento paisajístico y de esparcimiento de primera magnitud, procediendo a la remodelación activa de su paisaje que permita la plantación con árboles propios de la ribera, junto con unidades ambientales de inmensurable valor, tratadas como elementos naturales de singulares posibilidades para su remodelación y valoración.

Tanto la ciudad como el futuro desarrollo urbano de la misma debe mirar al río y no volverle la espalda como hasta ahora ha venido haciéndose.

Cabe finalmente señalar la importancia que tendrá en el sistema de espacios libres del área metropolitana la Corchuela, Parque Forestal propiedad del Excmo. Ayuntamiento de Sevilla en el término municipal de Dos Hermanas.

Es urgente aprobar normas para la construcción y recepción de nuevos espacios verdes, teniendo en cuenta que, con la nueva Ley del Suelo, los espacios son cedidos gratuitamente, urbanizados y plantados al Ayuntamiento.

Como urgente a establecer una unidad de gestión para el arbolado viario que vele por su conservación y mantenimiento, y que fije las normativas correspondientes para su plantación en la ciudad, la anárquica situación actual es lamentable.

Se acompaña un catálogo de árboles a utilizar en la ciudad respondiendo a criterios de reconocida aclimatación y siguiendo los dictados de la biodiversidad.

Se acompañan unas ordenanzas básicas, que ahora no existen, para el uso de las zonas naturales y forestales y los espacios verdes.

Planes estratégicos para la conservación y mantenimiento de las zonas verdes de la ciudad, estableciendo criterios básicos de actuación.

Planes estratégicos de aprovechamiento de aguas freáticas, normas de implantación de nuevos sistemas de riegos y manual para su conservación. El agua como bien preciado, debe ser controlado.

Normas para la construcción de pavimentos en jardines y su recepción. No más pavimentos duros en jardines o sólo los necesarios.

En lo dedicado a suelos y abonos, programas de fertilización y normativas para la recepción de tierras y sustratos con un posible plan de reciclaje de restos y detritus vegetales.

Un plan para la defensa fitosanitaria de nuestros espacios verdes y una llamada de atención sobre la fauna de los mismos.

Manual y normas para la instalación de mobiliario urbano y juegos infantiles en los parques y jardines de la ciudad para evitar la instalación de elementos con riesgos y peligros para los niños.

Aunque someramente, aportamos posibilidades de sistemas de gestión experimentados en otros municipios. Un aspecto fundamental e importante es la formación del personal, su seguridad, la salud laboral y la tendencia generalizada en el uso de maquinaria y vehículos en los parques de la ciudad.

No se podía escapar la informática y la necesidad de informatizar muchos aspectos de la gestión de nuestros parques.

Sevilla.-Jardines de Catalina de Ribera.-BIC

PLAN DE GESTION DE LOS JARDINES HISTORICOS DECLARADOS B.I.C.

El plan de gestión de un jardín histórico debe reflejar su historia, su evolución, las actuaciones, el inventario de todos sus elementos y el plan de mantenimiento, con la programación de renovación de la vegetación, las estructuras arquitectónicas, las esculturas y la obra civil a corto, medio y largo plazo. Igualmente, el plan de gestión debe establecer las normas especiales de uso de estos espacios para preservar sus valores, lo que en determinados casos supondrá la elaboración de estudios específicos de capacidad de carga.

Los jardines temáticos, por su parte, precisan unos planes de gestión específicos que determinen las actuaciones que deben llevarse a cabo con el fin de mantener en un estado óptimo los elementos que les aportan su valor —las colecciones— y planificar una renovación a largo plazo para velar por que el jardín no pierda su razón de ser.

PLAN ESTRATÉGICO PARA EL MANTENIMIENTO DE LOS PARQUES Y JARDINES URBANOS

La vegetación es el elemento más importante de los espacios verdes, un elemento vivo que, a diferencia del mobiliario y de otros elementos urbanos, tiene unos ritmos estacionales y un ciclo vital que exigen la definición y la aplicación de unos procedimientos de gestión y mantenimiento adaptados a cada tipo de vegetales: árboles, arbustos, plantas herbáceas, céspedes y flores.

Asimismo, el arbolado viario, por su complejidad, precisa una gestión y un mantenimiento muy diferente al que requieren los árboles que se encuentran en los parques y jardines de la ciudad.

Las directrices principales irán encaminadas a la racionalización de los recursos y con un marcado carácter ecológico del mantenimiento de acuerdo con las tendencias que se están imponiendo en la gestión del verde público.

La racionalización del consumo de agua de riego, la selección de especies vegetales mejor adaptadas al suelo y clima de nuestra ciudad, serán elementos primordiales. Los tratamientos de plagas y enfermedades con un mínimo impacto negativo para el medio ambiente, las nuevas exigencias en juegos infantiles y un largo etcétera, tienen que traducirse en un plan de actuación para hacerlas realidad.

PLAN DE GESTION DEL ARBOLADO

Asimismo, el arbolado viario, por su complejidad, precisa una gestión y un mantenimiento muy diferente al que requieren los árboles que se encuentran en los parques y jardines de la ciudad.

En la gestión del arbolado viario, el objetivo debe ser el de reducir la importante presencia de plátanos en la vía pública, ya que presentan un envejecimiento general y su elevada presencia supone una situación de riesgo importante por el fuerte ataque de plagas o enfermedades.

Las calles históricas, de Platanus x hispánica con casi 100 años de antigüedad deben ser respetadas hasta cuando la renovación de arbolado en la calle sea total. No se deben introducir especies distintas en la reposición de marras mientras esto no ocurra.

La sustitución prevé también la reducción de especies problemáticas, como el olmo o Ulmus pumila,,la acacia o Robinia pseudoacacia y el,negundo o Acer negundo. En esta sustitución ha tomado protagonismo el almez o Celtis australis, un árbol muy adaptado a las condiciones urbanas. Sin embargo, el almez acabara teniendo una población excesiva en la ciudad, si solo se utiliza esta especie.

Por ello, los esfuerzos deben concentrarse en incrementar la biodiversidad del arbolado de alineación, favoreciendo las especies mejor adaptadas a las condiciones estresantes del medio urbano.

Sevilla supera en mucho el porcentaje de árboles de una misma especie en la ciudad con el naranjo amargo, Citrus aurantium var. amara, la peculiaridad de sus calles con aceras estrechas y su buen comportamiento lo han convertido en el árbol tradicional de calle en toda Andalucía. su plantación debe ser considerada.

Un análisis visual para prever el riesgo de caída de árboles o ramas debe ser llevado a cabo de forma permanente sobre el arbolado viario.

Investigar nuevas especies para ampliar la diversidad vegetal y conseguir unos espacios verdes más naturales y menos vulnerables a los efectos del cambio climático.

Elaborar, junto con el sector de la producción de plantas, un catálogo con aquellas especies de mayor interés susceptibles de ser plantadas en Sevilla, que incluya las principales formas vitales –árboles, arbustos y plantas vivaces, tapizantes, trepadoras y cespitosas–, preferiblemente autóctonas y presuntamente poco vulnerables al cambio climático.

En cuanto al arbolado viario, se revisará el proceso de plantación de nuevo arbolado y se alargará el riego de las nuevas plantaciones durante los primeros cuatro años. Asimismo, se analizarán los criterios de poda actuales para asegurar que las actuaciones que se lleven a cabo garanticen la calidad del arbolado, los servicios ambientales que aporta, la conservación de la biodiversidad y los criterios de seguridad.

Reunir información sobre las plantas más aconsejables para refugio y alimento de la fauna silvestre autóctona.

Sevilla.-Cartuja Santa Maria de las Cuevas.-Phytolacca dioica

NORMAS PARA PRESERVAR Y DAR A CONOCER LOS ARBOLES DE SINGULARES DE SEVILLA

Un árbol es considerado singular cuando destaca del resto de los ejemplares de su misma especie, bien sea por adoptar una forma poco habitual, tener una avanzada edad, poseer dimensiones excepcionales, adquirir un alto valor paisajístico, localizarse en lugares poco habituales para su especie, por su historia o tradiciones populares, o sencillamente por su rareza.

Velar por el patrimonio arbóreo con la creación de un Catálogo de Árboles de Interés Local.

Sevilla capital no dispone de un Catálogo de Árboles de Interés Local, que incluya los ejemplares arbóreos más valiosos, ya sea por su tamaño, edad, rareza, calidad estética o histórica, singularidad o interés botánico.

La propuesta de inclusión de un árbol o de un grupo de árboles en el catálogo —tanto si se trata de un ejemplar de propiedad municipal como si es de propiedad privada— debe ser valorada por una Comisión de Catalogación, que posteriormente la eleva al Consejo Plenario para su aprobación. Los árboles catalogados deben estar convenientemente señalizados, considerándose necesario, en muchos casos, resaltar su valor a través de proyectos de mejora del entorno inmediato, realizar tareas de mantenimiento específicas y trabajar en acciones de divulgación de este patrimonio.

NORMAS PARA IMPLANTAR UN PROGRAMA DE JARDINES Y HUERTOS DE PROXIMIDAD, DE GESTION COMUNITARIA

Los Huertos Urbanos tienen unos importantes valores sociales entre las personas que participan, ya que les permiten ocupar su tiempo, favorecen la creación de un tejido de nuevas relaciones y mejoran su calidad de vida mediante una actividad física muy positiva para la su salud. También tienen un alto valor ambiental para la ciudad, ya que se convierten en nuevos espacios verdes públicos en los que la huerta es la protagonista.

Otro aspecto destacado de los huertos urbanos es la función que desempeñan en el ámbito de la educación ambiental: la realización de actividades destinadas a las escuelas permite a niños y niñas conocer el mundo agrario y los principios de la agricultura biológica

La estrategia de desarrollo de esta acción requiere la posibilidad de destinar a jardín comunitario algunas parcelas de parques y jardines públicos que presenten determinadas características de ubicación y de problemática de gestión. Para el desarrollo de esta estrategia, habrá que estudiar la viabilidad legal de la cesión temporal y gratuita a entidades, asociaciones y vecinos, y establecer unas condiciones de uso, como por ejemplo que dichos espacios permanezcan abiertos al público general en un régimen horario previamente establecido. Este programa permitirá ampliar el proyecto de huertos urbanos municipales existente en la actualidad a nuevos colectivos de la sociedad, explorando nuevas formas de gestión.

NORMAS PARA LA CREACION DE HUERTOS ESCOLARES

A medida que crece la preocupación por el medio ambiente y aumentan los problemas de salud relacionados con la alimentación y la nutrición, Ayuntamientos y sus asociados para el desarrollo se interesan cada vez más por las posibilidades de los huertos escolares.

Los huertos escolares son zonas cultivadas en torno a las escuelas o cerca de ellas, que al menos en parte están bajo el cuidado de los alumnos. Suelen producir hortalizas y frutas; las actividades pueden incluso ser cría de animales y pesca en pequeña escala, apicultura, plantas ornamentales y de sombra, así como producción de alimentos básicos en pequeña escala.

La existencia de los huertos escolares obedece a diversas razones. Algunas que están adquiriendo importancia en todas las partes del mundo son la promoción de una buena alimentación, la educación nutricional y el fomento de técnicas de subsistencia, junto con la posibilidad de ampliar de diversas maneras este aprendizaje más allá de la propia escuela.

Un huerto escolar es una enciclopedia de la Naturaleza.

Huertos urbanos.-Huerta de las Moreras.-Parque de Miraflores

NORMAS PARA FOMENTAR EL VERDE PRIVADO

Fomentar el verde privado mediante la promoción o subvención de huertos, balcones, terrazas, azoteas, cubiertas, muros, jardines verticales y patios ajardinados sin vinculación municipal que permitan una mayor implicación de la ciudadanía.

Aumentar la superficie de verde privada debe formar parte de las políticas municipales, dada la contribución ambiental del conjunto de espacios verdes de la ciudad, sea cual sea su titularidad. Las actuaciones a promover son el ajardinamiento de azoteas para su utilización por parte de los vecinos —con el apoyo técnico de los colegios profesionales de los sectores implicados—; la implantación de cubiertas verdes en edificios de nueva construcción —para lo cual se facilitarán ayudas y se divulgarán ejemplos—, y el ajardinamiento de balcones y terrazas con el objetivo de crear pequeños rincones de verde que mejoren el paisaje urbano y sirvan de refugio para la fauna asociada. También hay que avanzar en la implicación del comercio y las empresas, promoviendo la implantación de cubiertas verdes y muros, así como en el ajardinamiento de patios interiores en espacios accesibles al público en horario comercial.

NORMAS PARA LA IMPLANTACIÓN DE NUEVOS SISTEMAS DE RIEGO.

Prever la demanda de agua ante el incremento previsto de las zonas verdes. Prever la posibilidad de tener que regar los árboles viarios de las vías emblemáticas de la ciudad para asegurar su supervivencia.

Analizar la previsión de aguas alternativas (principalmente regenerada y freática) para el riego de los espacios verdes; determinar su calidad y sus efectos en la planta y en el sistema de riego.

Las instalaciones de riego son muy complejas y para una correcta implantación de las mismas es necesario cumplir una normativa estricta que a la vez sea la garantía de su posterior buen funcionamiento y mantenimiento.

Esta normativa se tiene que basar en la tipologías y calidades intrínsecas de los materiales empleados; contemplar las obras necesarias para su óptima colocación y prever determinadas pruebas de seguridad y control del uso de las aguas.

Para el óptimo manejo del riego siempre resulta conveniente, en la medida de lo posible, disponer de sistemas automáticos de control del riego

RIEGO DE JARDINES CON AGUAS RESIDUALES DEPURADAS

Lo que se suele denominar como agua depurada Sevilla al igual que han tenido que plantearse ciudades con escasez de agua para el consumo humano tiene que plantearse el uso de aguas residuales depuradas para el riego de zonas verdes.

El mantenimiento del patrimonio vegetal exige disponer de recursos hídricos y de tecnologías y sistemas de riego que permitan satisfacer de forma sostenible la demanda de agua de las diferentes especies.

El Plan de aprovechamiento de recursos hídricos alternativos de Sevilla prevé, asimismo, regar prácticamente todas las zonas verdes con recursos alternativos al agua potable, como los pluviales y el agua freática, puesto que hay una elevada disponibilidad de estos recursos, poniendo una red de distribución al servicio de estas atenciones.

Promover que el uso de las aguas regeneradas se realice conforme a las buenas prácticas de reutilización de aguas.

Sevilla cuenta en la actualidad con cuatro E.D.A.R.: San Jerónimo, Ranilla, Tablada y El Copero dedicadas a la depuración de las aguas residuales donde son tratadas y vertidas al río, pero no una red de distribución a los lugares de posible consumo.

Por agua residual se entiende el resultante de la mezcla de aguas domiciliarias e industriales, aguas de limpieza pública, riego y aguas pluviales. El agua residual, tras sufrir el proceso de depuración.

Se indica el sistema como medio para un uso racional de agua añadido a los existentes a poder aplicar en el riego de las zonas verdes.

No debe olvidarse así mismo la utilización de los lodos que producen las plantas depuradoras de aguas residuales que una vez tratados adecuadamente pueden ser utilizados como fertilizantes en los parques y jardines de la ciudad, mejorando suelos en zonas de futuras plantaciones por su gran contenido en materia orgánica.

PLAN ESTRATÉGICO PARA EL APROVECHAMIENTO DE LAS AGUAS FREÁTICAS

En el subsuelo de Sevilla hay zonas que tienen agua embalsada subterránea que se forma por las filtraciones producidas por la red de abastecimiento a la ciudad, la red de alcantarillado y de riego de jardines, también cabe tener en cuenta las importantes aportaciones de agua que se producen en la cuenca del Valle del Guadalquivir, la que produce los principales embalsamientos.

Actualmente, casi todo el riego de los parques se hace con aguas freáticas, María Luisa, Amate, Príncipes, Chapina, Cristina, Catalina de Ribera, Murillo, Torneo, San Jerónimo, etc. Son aguas con un pequeño índice de salinidad, por tanto, no tratada en plantas potabilizadoras. Sin embargo, en la ciudad histórica y centro urbano, las redes para riego de jardines y arbolado están conectadas con la red de agua potable, Alameda, Duque, Pl. Concordia, Pl. Encarnación, Pl. Nueva, Lonja, Triunfo, etc…

El aprovechamiento de las aguas freáticas para regar mediante la explotación de los recursos hidráulicos del subsuelo supondría un ahorro importante a los medios que actualmente se aplican; riego con auto-cubas.

MANUAL PARA LA CONSTRUCCIÓN Y RECEPCIÓN DE PAVIMENTOS

En todo el mundo, el hormigón y el asfalto han ido ganando terreno al suelo.  A pesar de su larga historia, el impacto de las carreteras y ciudades sobre el medio se hizo patente de una forma muy importante a mediados del siglo XIX con la Revolución Industrial.

La fabricación de cemento Porland, que dio lugar a la aparición del hormigón, y el invento en 1902 de la técnica del MAC ADAMS tuvo una gran repercusión en las condiciones de la vida urbana y evidentemente sobre las condiciones de crecimiento de las plantas en la ciudad.

Hay que diferenciar dos tipologías de pavimentación con características completamente diferentes: pavimentos permeables y pavimentos impermeables.

El Servicio de Parques y Jardines es consciente de los avances que comporta.

LA FERTILIDAD DE LOS SUELOS EN LA CIUDAD

La fertilidad de los suelos depende de su capacidad, de suministrar nutrientes y las condiciones que permiten una buena actividad de las raíces, es decir, de sus propiedades físicas y químicas que actúan de forma interdependiente y que están relacionadas con la actividad biológicas.

Cuando se habla de los nutrientes minerales del suelo, existe una gran diferencia entre la cantidad total de nutrientes en el suelo y su disponibilidad para las plantas.

El pH del suelo -Es importante para mantener la fertilidad adecuada del suelo. Afecta la disponibilidad de los nutrientes del suelo. Un rango de pH de 5.5-7 es óptimo para la mayoría de las plantas.

Textura del suelo –Es la proporción de arena, limo y arcilla presente en él. Los suelos arcillosos son capaces de retener más nutrientes que los arenosos y actúan como un reservorio de nutrientes.

En líneas generales, se puede afirmar que gran parte de los suelos de los espacios verdes de la ciudad presentan texturas de granulometría fina.  Esta característica, unida al uso intensivo que se hace, comporta la falta de aireación y suelos con tendencia a compactarse y a impermeabilizarse.  Con el fin de garantizar un buen desarrollo de las plantas, hace falta mejorar estas condiciones físicas mediante el cambio de textura y/o la mejora de la estructura del suelo.

NORMATIVA PARA LA RECEPCIÓN DE TIERRAS Y SUSTRATOS

El Servicio de Parques y Jardines utiliza gran cantidad de tierras y sustratos, tanto para el cultivo de plantas ornamentales como para el ajardinamiento de glorietas y jardines de nueva construcción, plantación de árboles, macetones, etc. … es muy importante unificar criterios y establecer condiciones que deben ser exigidas para su recepción.

Real Decreto 865/2010, de 2 de julio, sobre sustratos de cultivo. Este real decreto sobre sustratos de cultivo define y tipifica todos aquellos productos así denominados, con el fin de garantizar que los que se ponen en el mercado sean agronómicamente eficaces y que eviten sus posibles efectos nocivos en el agua, el suelo, la flora, la fauna y el ser humano.

La falta de suelo fértil en los espacios verdes de las ciudades hace que muchas veces haya que realizar aportaciones de tierras.  Es necesario conocer la calidad del terreno original de donde proceden para prever las enmiendas que serán necesarias efectuar y las prácticas de cultivo más adecuados.

PLAN DE RECICLAJE DE RESTOS Y DETRITUS VEGETALES.

Eliminar los residuos sólidos que genera una gran ciudad, es un problema que también afecta al Servicio de Parques y Jardines.  Las tareas de divulgación por una parte y el fomento del reciclaje por otra, son elementos indispensables para conseguir minimizar los residuos urbanos.

Con el fin de que este reto de la sociedad actual tenga éxito, son necesarios los esfuerzos de las Instituciones y de todos los ciudadanos. Para reciclar los residuos urbanos de una forma efectiva es necesario primero hacer una recogida selectiva, es decir, separar los distintos tipos de basura (residuos orgánicos, papel, plástico, cristales etc.…)  Hay que constatar que la buena acogida que han tenido estas experiencias entre la población anima a seguir trabajando en este sentido.

PLAN PARA LA DEFENSA FITOSANITARIA DE LOS ESPACIOS VERDES

El Real Decreto 1311/2012 sobre el uso sostenible de productos fitosanitarios.

La reducción del uso de productos químicos en la lucha contra las plagas y enfermedades de los espacios verdes es una tarea muy importante que se está llevando a término, desde hace años en Sevilla.  Para controlar estas plagas de forma natural y no perjudicial para el medio ambiente es necesario utilizar tratamientos biológicos y ecológicos que respetan el medio natural.

La utilización indiscriminada de plaguicidas presenta los siguientes problemas:

– Toxicidad para otros organismos.

– Desarrollo de resistencias.

– Degradación del medio ambiente.

Asegurar la conservación de un entorno con calidad ambiental como mejor soporte para los sistemas naturales de la ciudad.

Profundizar en la línea ya consolidada de llevar a cabo una gestión de plagas de la vegetación urbana empleando los sistemas y los productos menos agresivos, y realizando ensayos de lucha biológica.

LA FAUNA DE LOS PARQUES

En tiempos recientes y en la actualidad de manera cada vez más profunda, se está despertando el interés por el medio natural, por el entorno, cercano o lejano.  Las reglas de funcionamiento básicas son equivalentes para todos los ambientes, de manera que los parques urbanos pueden llegar a ser también un excelente ecosistema a partir del cual conocer mejor los fenómenos de la naturaleza.

En primer lugar, se tiene que considerar la gran riqueza de especies vegetales y animales que ocupan los parques, asumiendo valores que pueden llegar a superar los correspondientes a las áreas silvestres más próximas.  Además, dan unas condiciones favorables de observación ya que los animales están más acostumbrados a la presencia humana.

Fomentar iniciativas para ampliar la participación, el disfrute y el conocimiento de la naturaleza más cercana por parte de la ciudadanía.

Un bioblitz es una iniciativa ciudadana para la identificación colectiva de las plantas y los animales que viven en la ciudad, que se desarrolla en una jornada intensiva. La actividad cuenta con la participación de la ciudadanía, instituciones académicas, entidades naturalistas y la Administración. Es necesario promover otras actuaciones que persigan el mismo objetivo.

MANUAL PARA LA INSTALACIÓN DE MOBILIARIO URBANO

El mobiliario urbano es el conjunto de objetos que conforman el paisaje de la ciudad, sirviendo de catalizador entre los seres humanos y el espacio público.

El mobiliario urbano está adquiriendo día un papel cada vez más importante en la configuración de los espacios de la ciudad.

A su contenido formal y a su función, se le tienen que añadir las exigencias del uso eminentemente público. el mobiliario del distrito sea un proceso transparente, oportuno y estandarizado, basado en criterios de diseño y funcionalidad acorde con la visión de la gestión municipal.

Es por este motivo que se hace necesaria una normativa que regule la seguridad y el mantenimiento del mobiliario y que controle que el diseño se adapte a las funciones de uso y al entorno, que sea coherente con la política urbanística general etc. para evitar instalaciones obsoletas o que son destruidas a poco de estar instalado.

MANUAL PARA LA INSTALACIÓN Y RECEPCIÓN DE JUEGOS INFANTILES

La evidencia de una demanda social diferente, marcada por aspectos demográficos, por cambios en la composición de la población y por la valoración de los espacios verdes como espacios de salud y ocio, plantea nuevas situaciones y formas de estar en el espacio público y de utilizarlo. En ese sentido, hay que trabajar para equipar los espacios verdes con elementos que estén al servicio del ocio y la salud de las personas, y reforzar su papel socializador. Es necesario, asimismo, revisar, mejorar y/o crear nuevos equipamientos, como por ejemplo áreas de salud para personas mayores, circuitos de salud para gente joven, circuitos terapéuticos o espacios de acogida para niños y adolescentes

Con esta finalidad, se han establecido unas normas técnicas que regulan el uso y la instalación de las áreas de juego, garantizando la seguridad de sus usuarios.

Norma UNE-EN 1176 Equipamiento de las áreas de juego

Norma UNE-EN 1177: 2009 sobre Revestimiento de las superficies de las áreas de juego absorbentes de impactos. Requisitos de seguridad y métodos de ensayo.

Norma UNE-EN 147101 IN: 2000 sobre Equipamiento de las áreas de juego. Guía de aplicación de la norma UNE-EN

1176-1 Norma UNE-EN 147102 IN: 2000. Guía para la aplicación de la norma UNE-EN 1176-7 a la inspección y el mantenimiento.

Norma UNE 147103 Apartado 5 “Seguridad y mantenimiento de las áreas de juegos al aire libre”. Decretos de aplicación

La necesidad de jugar y de estar en contacto con la naturaleza hace que el uso de estas áreas sea cada vez más alto.  Con el fin de que estas experiencias de juego no comporten ningún riesgo de lesiones, es importante realizar una buena elección de los elementos de juego y tomar las medidas observadas para su instalación.

GESTION Y ORGANIZACION

Paralelamente, la necesidad de aumentar los recursos económicos exige aumentos notables de productividad y calidad de los servicios que presta, casi como la contención de gastos superfluos y la optimización de los métodos de trabajo

Respondiendo a estos arquetipos, hay que potenciar la actual estructura organizativa para permitir una operatividad más ágil y establecer canales de comunicación perfectamente definidos al mismo tiempo que puntualizar las actividades productivas y las de soporte.

La actividad productiva, razón de ser del Servicio de Parques y Jardines, debe ser definida por el Excmo. Ayuntamiento, para salir del confusionismo actual, donde se interfieren actividades y se ejecutan obras por diversos organismos sin ni siquiera contar con aquel. Debe estructurarse de tal forma que permita una rápida respuesta a las necesidades de la ciudad y minimice el riesgo de descoordinación actual.

PLAN DE FORMACIÓN INTERNA

La formación de los trabajadores del Servicio de Parques y Jardines es una premisa indispensable para poder ofrecer a la ciudad de Sevilla una jardinería de calidad y ha de ser el motor del cambio que permita llevar a término una gestión de los espacios verdes de Sevilla eficaz.

Un plan de formación interna ha de relacionar íntimamente los objetivos del Servicio de Parques y Jardines con la formación de sus trabajadores.  Partiendo de esta voluntad, el plan de formación interna tiene que elaborar acciones educativas concretas, que planifiquen la formación de los trabajadores según las funciones que desarrollen dentro de la estructura de la organización.

Utilizándose en la actualidad más el sistema de conservación y mantenimiento por contratas será indispensable la formación interna del personal de las empresas para unificar los sistemas de gestión adaptados por el Ayuntamiento. De no ser así puede ser el caos.

SEGURIDAD Y PROTECCIÓN INTEGRADA

Las estadísticas demuestran que la asistencia de los trabajadores a seminarios y cursos de formación sobre Seguridad e Higiene, así como de la utilización correcta del material de prevención y seguridad, incide directamente sobre la reducción del número de accidentes laborales.

La necesidad de tomar medidas para reducir las lesiones y las enfermedades laborales se deben traducir en un Manual de Seguridad y Protección integrada, unos Servicios Médicos competentes y un vestuario adecuado para cada trabajo y cada época del año.

Aunque el personal es reticente a los usos de los EPIS, estos deben ser exigidos en la realización de los trabajos.

BR10 BRUSELAS (BÉLGICA) 2016.- Activistas de Avaaz protestan contra el uso de pesticidas con glifosato en Bruselas (Bélgica) hoy, 18 de mayo de 2016. El Ejecutivo comunitario hizo hincapié ayer en el último estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) publicado el lunes, en el que se afirma que «es poco probable que el glifosato cause un riesgo cancerígeno para los humanos expuestos a él mediante los alimentos».

SALUD LABORAL. CENTROS DE TRABAJO

Los Servicios Médicos son los encargados de velar por la salud laboral del personal.  Deben hacer informes sobre situaciones e incidencias del personal referido a enfermedades o patológicas que exigen tratamientos diferenciados, hacen el seguimiento de procesos de carácter crónico y se encargan de la prevención de enfermedades y de evitar los posibles contagios etc. …

Además, durante el año se hace un muestreo entre el total de revisiones médicas y sobre el personal que ha pasado anomalías, con el fin de corregirlas y erradicarlas.

VEHÍCULOS Y MAQUINARIA

El Servicio de Parques y Jardines y/o las contratas deben estar comprometidos en el medio ambiente.  Contribuir a tener una ciudad más limpia y habitable es tarea de todos, el Servicio de Parques y Jardines debe optar por las energías limpias.  Así a la hora de pensar en la renovación del parque de vehículos, debe tenderse a incorporar vehículos eléctricos menos contaminantes y menos ruidosos.

Debe existir una tendencia en la renovación de vehículos, camiones ligeros, furgonetas, camiones cisterna, dumpers, segadoras, motosierras, motocultores, desbrozadoras, cortasetos, sulfatadoras, que deben ser utilizadas adecuadamente y amortizadas en su tiempo no como ahora que el alargar su vida supone un mayor número de averías, y costos de reparaciones.

Se hace necesario un mantenimiento preventivo, después de cada campaña a todos los vehículos y maquinaria programado para poder hacer una distribución equitativa del trabajo de taller.

PLAN INFORMATICO DE GESTIÓN DE LOS ESPACIOS VERDES

Los objetivos que deben pretenderse a medio término mediante el desarrollo de un plan informativo deben ser los siguientes:

Integrar toda la información generada por la experiencia de la gestión de los espacios verdes, con el fin de hacerla accesible a toda la organización y a todos los miembros involucrados en la gestión.

-Integración de esta información junto con la que en la actualidad ya disponen otras entidades municipales, en la prevista red global del Ayuntamiento de Sevilla, que pondrá a disposición de los ciudadanos y técnicos un amplio abanico de datos sobre la gestión de infraestructuras y equipamientos de la ciudad.

LOS GUARDAS Y LOS INFORMADORES

Los espacios verdes de la ciudad permiten a los ciudadanos disfrutar de la naturaleza, además de ser el marco idóneo para realizar actividades de ocio, deportivas y culturales etc. … Es por este motivo que el Servicio de Parques y Jardines debe dar a conocer y potenciar las posibilidades que ofrecen estos espacios al aire libre como herramienta educativa y de recreo.

Es necesario crear un servicio de guardas e informadores que ahora se carece, como mejora del servicio que se ofrece al ciudadano y garantice que los espacios verdes se mantengan en buen estado.  En los últimos años con la ausencia de guardas los parques y jardines han sido expoliados, ejem. Catalina Ribera, y Murillo, jardines de las Delicias, Parque de María Luisa, Amate, Jardines de San Diego y Parque de los Príncipes etc.  Los guardas e informadores del Servicio de Parques y Jardines deben dar a conocer la naturaleza e historia de los parques.

Tomar conciencia de la realidad del verde urbano permite a los usuarios hacérselo más suyos y por tanto tratarlos con el respeto que merecen.

PROGRAMA DE CURSOS DE JARDINERÍA Y MEDIO AMBIENTE

El Servicio de Parques y jardines como elemento aglutinador de las demandas de los ciudadanos pueden ser un Forum de opinión abierto a todos los profesionales de la jardinería y el paisajismo, así como respuesta al interés creciente de los ciudadanos hacia la naturaleza y el medio ambiente.

Se ha intentado crear el Comité consultivo para la gestión del arbolado, las zonas verdes y el paisaje de Sevilla, antes fue la Mesa del Arbol, intentos sin éxito de una participación ciudadana activa, con poca voluntad política de que sea participativa.

El objetivo es poner en valor el verde urbano como patrimonio fundamental de la ciudad, divulgar el conocimiento de la biodiversidad entre los ciudadanos y dar a conocer la red de parques y jardines de Sevilla, así como su historia y su riqueza artística y arquitectónica.

En lo que respecta al verde urbano, la interacción con los ciudadanos es esencial, y en este sentido, la política de comunicación debe llegar a todos los segmentos de la ciudadanía a través de los canales habituales.

En los espacios verdes debe incorporarse una información específica para orientar a los visitantes y dar a conocerlas especies vegetales más significativas que contienen.

Ampliar y mejorar la oferta de actividades educativas existente en todos los segmentos de la sociedad con nuevos temas y aproximaciones: talleres de jardinería con diversos horarios y para distintos públicos; organización de salidas, charlas, cursos y debates en torno al patrimonio natural y a los espacios verdes…

Elaborar planes de interpretación que describan los valores de cada espacio y cómo mostrarlos al público que lo visita, y generar recursos orientados a su conservación y disfrute.

Con un programa de cursos de jardinería para aficionados de los distintos distritos municipales dirigidos al sector de ciudadanos que dispone de mayor tiempo libre (jubilados, parados, amas de casa, estudiantes etc.

El estado del bienestar hace que proliferen los jardines privados y el consumo doméstico de plantas, las Comunidades de vecinos tienen problemas con sus jardines, lo que hace que cada vez haya más necesidad de conocer la profesión.

Textos propios y  fotografías bajadas de Internet.                                                    Enero 2018