Villa Gamberaia es una villa del siglo XIV cerca de Settignano , en las afueras de Florencia , Toscana , Italia central;. Está caracterizada por jardines escalonados del siglo XVIII.
La belleza del lugar fue elogiada por Edith Wharton , que lo vio después de años de ocupación como inquilino con su parterre plantado con rosas y coles, y por Georgina Masson, que la vio restaurada por Sig. Marcello Marchi de su ruina de la Segunda Guerra Mundial a la condición impecablemente adaptada en la que se desarrolla en la actualidad.
La villa fue originalmente una casa de campo, que era propiedad de Matteo Gamberelli, un albañil, a principios del siglo XV.
Sus hijos Juan y Bernardo se convirtieron en arquitectos famosos con el nombre de Rossellino.
Después que el hijo de Bernardo vendió a Jacopo Riccialbani en 1597, la casa fue ampliada en gran medida, entonces casi completamente reconstruida por el propietario siguiente, Zenobi Lapi, los documentos de la época mencionan una limonaia y la bolera ajardinada que forma parte del jardín en el diseño de hoy.
En 1717 la Gamberaia pasó a la familia Capponi.
Andrea Capponi expuso la larga pista de petanca , plantaron cipreses, especialmente en una larga avenida que conduce a la fuente monumental encerrada dentro del bosco (zona boscosa), y pobló el jardín de estatuas, como se puede ver en un grabado de Giuseppe Zocchi dedicado a marqués Scipione Capponi, que muestra la avenida de los cipreses a medio crecer y la bolera flanqueada por árboles maduros que desde entonces han ido desarrollándose.
La casa ya estaba en su plataforma elevada, se extendía a un lado, donde está hoy el parterre de agua.
El parterre fue presentado con Broderies cortadas a la francesa en el siglo XVIII, como un mapa detallado finca descrita por Georgina Masson .
Olivares siempre han ocupado las pistas por debajo del jardín, que tiene una vista distante de los techos y torres de Florencia.
La fuente monumental establecida en una colina empinada en un flanco lateral de la terraza del jardín tiene un dios sentado flanqueado por leones en relieve de estuco en un nicho decorado con mosaicos de guijarros y mampostería almohadillada .
La conservación del jardín de Villa Gamberaia Edith Wharton astutamente atribuye a su «destino desconocido» durante el siglo XIX, cuando los jardines más prominentes con ricos propietarios tenían sus características históricas.
Poco después lo vio Wharton, la villa fue comprada en 1895 por la princesa Juana Ghyka , hermana de la reina Natalia de Serbia , que vivió aquí con su compañero americano, Blood Miss, y disfruto restaurando;.
Fue ella quien sustituyó los parterres por estanques de agua frente a la casa..
Durante la Segunda Guerra Mundial , la villa fue destruida casi por completo.
Marcello Marchi la restauró después de la guerra, utilizando grabados antiguos, mapas y fotografías de orientación.
Jardines sin fronteras 